Los Mmorpg son juegos en línea masivos donde los jugadores interactúan entre sí a través de avatares representativos de sus personajes. Los jugadores acceden al mundo persistente del juego a través de un cliente, mientras que los proveedores mantienen y actualizan dicho mundo virtual para garantizar el interés de los usuarios. Estos juegos pueden afectar positivamente a los jugadores al permitirles interactuar socialmente, pero también pueden generar adicción si no se controla el tiempo de juego.