Las empresas ahora deben revelar más información sobre el origen de sus productos debido a las crecientes demandas de transparencia por parte de los consumidores y gobiernos. Nuevas tecnologías como etiquetas electrónicas y códigos de barras permiten rastrear productos a lo largo de la cadena de suministro y proporcionar datos sobre su origen. Esto generará confianza y reputación para las empresas, pero también plantea nuevos desafíos en términos de qué información revelar y exigir de los proveedores.