1. LA CONVERSION DE SAULO
Hechos de los Apóstoles 9:3-9
INTRODUCCION
C. La luz divina es penetrante; Hch.
I. Saulo de Tarso halló la luz cuando se 22:6, 11; 2 Cor. 4:6.
hallaba en las más densas tinieblas; pudo
verse a sí mismo cuando estuvo ciego. 1. La conversión requiere la
predicación.
II. Jesús es la luz del mundo (Jn. 8:12) y
Saulo de Tarso confirma esta afirmación. 2. La predicación se fundamenta en
el evangelio.
III. Continuemos analizando las
particularidades relacionadas con la 3. El evangelio trae luz al ser
conversión de Saulo de Tarso. humano; He. 4:12.
DESARROLLO II. EL CONOCIMIENTO QUE
IMPULZA LA CONFRONTACION;
I. LA LUZ QUE PRECEDE AL
Hch. 9:4-5.
CONOCIMIENTO; Hch. 9:3.
A. La pregunta necesaria: ¿Quién eres
A. La conversión puede llegar de
Señor?
manera “repentina” o “inesperada”;
cf. Hch. 2:2; Hch. 16:26.
1. Dios conoce al ser humano y lo
llama por su nombre; cf. Gn.
B. La luz debe tener un origen celestial;
3:9.
cf. 1 Jn. 1:5.
L A C O NLA E R S I O N D E S A U L O ( S e g u n d a P a r t e )
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2. 2. La confesión no necesariamente CONCLUSIONES
es convicción; cf. Mt. 7:21-23.
I. La conversión está precedida por la
3. Una pregunta espiritual predicación.
demanda una respuesta
espiritual; cf. 1 Cor. 2.12-13. II. La predicación motiva la regeneración.
B. La respuesta correcta: Yo soy Jesús. III. La conversión real requiere la
obediencia total.
1. El hombre debe escuchar de
Jesús.
2. El hombre debe conocer a
Jesús.
3. El hombre debe obedecer a
Jesús.
C. La confrontación inevitable: Yo soy
Jesús, a quien tú persigues…
1. Conocer a Jesús nos ayudará a
conocernos; cf. Hch. 2:36;
17:29-30.
2. Conocernos a sí mismo hará
evidente nuestra necesidad
espiritual; cf. Is. 59:1-2.
3. Nuestra necesidad nos llevará a
actuar; cf. Hch. 9:6; 2:38;
16:30.
III. LA CONFRONTACION QUE
CONDUCE AL
ARREPENTIMIENTO; Hch. 9:6-9.
A. El hombre ha hecho lo malo; cf. Ro.
6:23.
B. El hombre debe cambiar su
accionar.
C. Dios es quien dice al hombre qué
debe hacer; cf. 2 Ti. 3:16-17.
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