La época del liberalismo y la industrialización se caracterizó por tres cambios fundamentales: 1) El surgimiento de ideas liberales que defendían la libertad individual y los derechos humanos; 2) La Revolución Industrial trajo nuevas máquinas, fábricas y formas de producción; 3) España experimentó un lento proceso de industrialización debido a factores como la pobreza, la falta de inversiones y problemas de transporte.