2. “Vi volar por en medio del cielo a
otro ángel, que tenía el evangelio
eterno para predicarlo a los
moradores de la tierra, a toda
nación, tribu, lengua y pueblo,
diciendo a gran voz: Temed a Dios,
y dadle gloria, porque la hora de
su juicio ha llegado; y adorad a
aquel que hizo el cielo y la tierra,
el mar y las fuentes de las aguas”
(Apocalipsis, 14: 6-7)
El mensaje final que la iglesia remanente
está llamada a proclamar incluye la idea
del juicio divino.
¿Qué dice la Biblia acerca del juicio?
¿Qué relación tienen el juicio divino y la
gracia que Dios nos ofrece?
3. ¿Qué dice la Biblia acerca del juicio?
En el Antiguo y en el Nuevo
Testamento (especialmente en
este último) encontramos la idea
del juicio.
Un juicio cuya
sentencia puede ser
tanto condenatoria
como absolutoria.
“Porque Jehová juzgará a su
pueblo, y se compadecerá
de sus siervos” (Salmo 135: 14)
“Porque es necesario que todos
nosotros comparezcamos ante el
tribunal de Cristo, para que cada uno
reciba según lo que haya hecho
mientras estaba en el cuerpo, sea
bueno o sea malo” (2ª de Corintios, 5: 10)
4. “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de
pie ante Dios; y los libros fueron abiertos,
y otro libro fue abierto, el cual es el libro
de la vida; y fueron juzgados los muertos
por las cosas que estaban escritas en los
libros, según sus obras” (Apocalipsis, 20: 12)
“Porque es tiempo de que el juicio
comience por la casa de Dios; y si
primero comienza por nosotros,
¿cuál será el fin de aquellos que no
obedecen al evangelio de Dios?”
(1ª de Pedro, 4: 17)
“Mas yo os digo que de toda
palabra ociosa que hablen los
hombres, de ella darán cuenta en
el día del juicio. Porque por tus
palabras serás justificado, y por
tus palabras serás condenado”
(Mateo, 12: 36-37)
5. ¿En qué consiste la gracia de Dios?
“Porque de tal
manera amó
Dios al mundo,
que ha dado a
su Hijo
unigénito, para
que todo aquel
que en él cree,
no se pierda,
mas tenga vida
eterna”(Juan, 3: 16)
La gracia de Dios consiste en que, sin merecerlo, Él envió a su Hijo para pagar
por nuestros pecados, ofreciéndonos así la posibilidad de tener vida eterna.
6. ¿Qué relación tiene
la gracia con el juicio?
“Porque no envió Dios a su Hijo al mundo
para condenar al mundo, sino para que el
mundo sea salvo por él. El que en él cree,
no es condenado; pero el que no cree, ya
ha sido condenado, porque no ha creído
en el nombre del unigénito Hijo de Dios.
Y esta es la condenación: que la luz vino
al mundo, y los hombres amaron más las
tinieblas que la luz, porque sus obras
eran malas” (Juan, 3: 17-19)
La gracia y el juicio aparecen en estos textos y están radicalmente
entrelazados. El pecado, la oscuridad y el mal han producido la necesidad de
un Dios de justicia que juzgue y condene estas cosas. Al mismo tiempo, la
gracia de Dios ofrece una salida a quienes son culpables y van a Cristo por fe.
El que creyere en Jesús no es condenado. Es así de sencillo. La justicia de
Cristo cubre a esa persona, y ella está sin condenación, ahora y en el juicio.
7. El hombre fue Solo cuando Adán y Eva pecaron
creado perfecto. se hizo necesario que Dios
En este estado, juzgara al hombre. Este juicio es
el juicio era inevitablemente condenatorio.
innecesario No obstante, en ese mismo
porque no había momento Dios ofrece al hombre
infracción alguna su gracia, una puerta de salida
que juzgar. para obtener la absolución en el
juicio.
“Y pondré enemistad entre ti y
la mujer, y entre tu simiente y
la simiente suya; ésta te herirá
en la cabeza, y tú le herirás en
el calcañar” (Génesis, 3: 15)
8. En el juicio de Dios a Adán y Eva, vemos un ejemplo claro de juicio:
1. Juicio investigador (Génesis, 3: 9-13). En primer
lugar, Dios realiza una investigación a base de
preguntas:
¿Dónde estás tú?
¿Quién te enseñó que estabas desnudo?
¿Has comido del árbol de que yo te mandé
no comieses?
¿Qué es lo que has hecho?
2. Juicio condenatorio (Génesis, 3: 14). Satanás es
condenado como instigador del pecado.
3. Juicio absolutorio (Génesis, 3: 15). Se le ofrece a
la raza humana la posibilidad de aceptar la gracia
a través del sacrificio de Jesús. Todo el que
acepte esta gracia será absuelto en el juicio.
“Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al
infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio”
(2ª de Pedro, 2: 4)
9. “Aunque los impíos puedan pensar que sus caminos no son conocidos por el Señor, llegará el
momento en que él mostrará que todas las obras de los hijos de los hombres le son conocidas.
En los días de Noé, la maldad humana llegó a ser tan grande que fue necesario que Dios
mostrara su autoridad y castigara a los transgresores de la ley. Había llegado la hora de crisis
al declarar el Señor cuáles eran los límites de la paciencia divina hacia la raza culpable. No
obstante envió a su fiel siervo para que los amonestara, y les dio ciento veinte años de
oportunidad para que se arrepintieran de sus pecados.
Pero ellos rechazaron y despreciaron tales muestras
del amor de Dios. Cuando la copa de su iniquidad
se llenó; cuando los límites de la misericordia divina
se traspasaron, el Señor eliminó a la raza pecadora
de la faz de la tierra mediante el diluvio”
(E.G. W., Signs of the Times, 15 de diciembre de 1881)
“y si no perdonó al mundo antiguo,
sino que guardó a Noé, pregonero de
justicia, con otras siete personas,
trayendo el diluvio sobre el mundo de
los impíos” (2ª de Pedro, 2: 5)
10. “y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de
Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que
habían de vivir impíamente, y libró al justo Lot, abrumado por la
nefanda conducta de los malvados (porque este justo, que moraba
entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos
inicuos de ellos)” (2ª de Pedro, 2: 6-8)
“sabe el Señor librar
de tentación a los
piadosos, y reservar a
los injustos para ser
castigados en el día
del juicio” (2ª de Pedro, 2: 9)
11. LOS HECHOS LA JUSTICIA LA GRACIA LA ACEPTACIÓN
La humanidad es El Hijo unigénito de
La entrada del Todo aquél que en él
condenada a la Dios se ofrece a
pecado crea se salvará
muerte morir por el pecador
Se construye un arca
La maldad de los La humanidad es de salvación y se Noé y su familia se
antediluvianos destruida pregona ésta salvan
durante 120 años
Se envían ángeles
La maldad de Los impíos son Lot y sus hijas se
para sacar de allí a
Sodoma y Gomorra destruidos salvan
los justos
La paga del pecado es la muerte (Rom. 6: 23). Todos
hemos pecado y todos merecemos la muerte. Si la
justicia fuese el único atributo divino, todos estaríamos
condenados a la muerte eterna.
Afortunadamente, Dios es un Dios de gracia. Dios, a
través del sacrificio de Jesús, ofrece su gracia para que
todo aquel que crea en Él (Jn. 3: 16) sea absuelto en el
juicio (1Jn. 2: 1-2) y obtenga la salvación eterna.