Este documento presenta dos leyendas populares del estado Vargas en Venezuela. La primera leyenda describe los lamentos y gritos que se escucharon durante tres meses después de la tragedia de Vargas en 1999, donde miles de personas murieron debido a deslaves e inundaciones. La segunda leyenda cuenta la historia de un hombre misterioso de ojos azules que bailó sin cansarse en un festival en el pueblo de Todasana hasta desaparecer, dejando atrás un fuerte olor a azufre, identificándolo como el maligno que se presentó para interrumpir