El documento reflexiona sobre el papel de la narración y el folklore en la educación, enfatizando la importancia de contar cuentos para fomentar la imaginación y el desarrollo emocional de los niños. Se mencionan diversas obras y autores que ayudan a guiar a padres y maestros en este proceso, destacando la conexión entre la tradición oral y la literatura contemporánea. Además, se aboga por integrar el folklore y la música en la educación para cultivar el alma infantil.