logistica sanitaria en catastrofes. parte temario certificado de profesionalida de asistencia sanitaria a multiples victimas y catastrofes. Ante una situación desbordante se plantea
la necesidad de cubrir una serie de aspectos
básicos de la comunidad afectada, siendo
alguno de estos la existencia de productos
alimenticios, agua, ropa, aseo e higiene.
Estos son productos de necesidad inmediata
que son indispensables de suministrar.
2. Introducción
Ante una situación desbordante se plantea
la necesidad de cubrir una serie de aspectos
básicos de la comunidad afectada, siendo
alguno de estos la existencia de productos
alimenticios, agua, ropa, aseo e higiene.
Estos son productos de necesidad inmediata
que son indispensables de suministrar.
3. Es preciso planificar y calcular cómo se van
a distribuir estos productos, así como cuáles
van a ser los medios para transportarlos y
almacenarlos hasta su posterior entrega.
Debido a que la naturaleza de una catástrofe
es por múltiples causas, toda esta
planificación se analizará en función de las
necesidades previsibles de los damnificados.
4. Logística de transporte
En la cadena logística, el transporte es el
elemento que servirá para poder hacer llegar
la asistencia a la zona donde esta sea
requerida. El personal responsable de la
logística de transporte no solo debe tener en
cuenta los medios y recursos necesarios para
la movilización, sino que también debe
estimar las posibilidades reales y las
alternativas para la entrega de la asistencia.
5. Es obvio que en la mayoría de
las ocasiones estos flujos implican la
organización de diversos medios de
transporte, ya sean terrestres, aéreos o por
medio de grandes embarcaciones.
6. Las diferentes vías y medios de transporte
tienen unas exigencias y características
técnicas diversas que evidencian ventajas y
desventajas en relación con la intervención a
realizar, y que van a oscilar desde sus costos
hasta su idoneidad.
7. En la elección del
transporte a utilizar van a influir también
otras variables como las necesidades
reconocidas y las posibilidades accesibles.
8. En alusión a las necesidades, va a
depender de la urgencia de la entrega, del
tipo y características de la mercancía a
suministrar, el número, volumen, camino a
recorrer, etc.
9. Las posibilidades van a depender de la
disponibilidad de los medios de transporte,
sus costes y, muy importante, las
condiciones de acceso al destino. Es de suma
importancia en la elección de los medios
conocer el estado de la ruta y las
condiciones climatológicas de la zona.
Deberá existir una alternativa en el caso de
que estas condiciones sean adversas.
12. Aviones
CARACTERÍSTICAS
Indicado cuando los recursos se requieren con
urgencia o cuando el acceso a la zona solo
permite este tipo de transporte.
VENTAJAS
Rápido. Cubre largas distancias. Permite la
aproximación relativa a las zonas de
operación.
16. Para determinar el tipo y la cantidad de
transporte a emplear es necesario conocer
aspectos como:
• Volumen de la carga a transportar.
• Dirección de la carga.
• Necesidad de la entrega.
• Tipos de suministros que se van a administrar.
17. Cuando las condiciones lo permitan, y
dependiendo de la zona del siniestro, será
mejor subcontratar una empresa ajena en
lugar de tener una flota de vehículos.
18. Una vez recepcionados todos los vehículos
en la zona de la catástrofe, se origina la
caravana asistencial dirigida hacia un mismo
destino, aunque en ocasiones es preferible
evitar estas formaciones ya que los vehículos
individualmente se desplazan más rápido y
la organización de la caravana requiere de
gran destreza y experiencia en su
preparación.
19. Es habitual que este tipo de
caravanas se utilice para el traslado de la
asistencia hacia una zona de emergencia,
sobre todo en largas distancias o cuando por
seguridad sea más práctico y fiable que los
vehículos se desplacen de forma colectiva.
20. Logística de abastecimiento
y distribución de recursos
Los recursos que se emplean para atender
la catástrofe provienen de distintas fuentes,
bien los adquiridos directamente por las
organizaciones, donados por la comunidad
nacional o prestados por empresas
o instituciones colaboradoras.
21. En una situación
colectiva desbordante se combinan estas
modalidades, cada una con sus ventajas e
inconvenientes. Siempre que sea posible, la
decisión se tomará en base a criterios
técnicos.
22. El abastecimiento de suministros a través
de la compra local presenta la ventaja de su
rápida entrega, un coste menor y, de forma
colateral, es un apoyo a la economía local o
nacional.
23. Sin embargo, presenta el
inconveniente de no estar siempre disponible
la cantidad y calidad requerida y causar un
posible desabastecimiento en el mercado local.
24. La importación de productos implica la
consecución de artículos de mayor calidad y
en mayor número, no obstante, aumenta el
tiempo de entrega, los costes por transporte
y no se apoya a la economía local.
25. La donación de recursos en principio es a
bajo coste y estimula la solidaridad nacional
e internacional. Por contra, mucha de la
mercancía recibida llega sin haber sido
solicitada y no siempre es lo que más urge,
lo que incrementará los recursos y tiempos
de actuación para con estos.
26. La zona donde se centralicen los
suministros no solo debe ser un local que los
almacene, tiene que ser un sitio que cuente
con un sistema organizado de los mismos y
permita conocer el tipo, volumen y
localización de las provisiones existentes, así
como saber la previsión de material de
reserva para posteriores necesidades.
27. En la
organización de un almacén de catástrofes
deben tenerse en cuenta los protocolos
necesarios para el establecimiento de la
calidad y cobijo de los productos.
29. Sector general.
Es en este espacio
donde los productos permanecen por
largo tiempo o bien esperando su
traslado al terreno de manera
inmediata o a un sector secundario.
30. Sector de rotación lenta.
Donde van
a estar almacenados artículos que no
son urgentes, bien de reserva o bien
porque no son de consumo habitual. En
general, en este sector se almacenan
herramientas, material de repuesto,
etc.
31. Sector de rotación rápida.
De uso
diario o frecuente de los productos. Son
los de uso habitual en la zona de la
catástrofe y suelen contener aquellos
productos que van a ser suministrados
de forma inmediata a la población.
33. A la hora de buscar un lugar para el
almacenamiento de los suministros, este
debe ser lo suficientemente amplio y
accesible para facilitar el transporte de
grandes mercancías.
34. El almacenamiento en
este debe realizarse a lo ancho, largo y alto.
Para determinar el espacio operativo, es
necesario conocer algunos parámetros
básicos como el espacio general, metros
cúbicos brutos, pérdida estructural, metros
cuadrados netos y metros cúbicos netos.
35. Puede plantearse el problema de que no
sea posible encontrar un lugar adecuado
para instalar la zona de almacenaje y se
haga necesario explorar alternativas para
tener un lugar temporal de almacenamiento.
Pueden instalarse estructuras prefabricadas
de diversos materiales que permitan el
almacenamiento de las mercancías recibidas.
36. Estas zonas de almacenamiento deben
contar con un equipo de personas que
gestionen el mantenimiento y manipulación
de los suministros en el área de carga,
descarga y clasificación.
37. Generalmente, estos equipos los forman
organizaciones de voluntarios o incluso los
mismos beneficiarios. Si es posible contar con
estos recursos humanos propios, se reducirán
de
forma considerable los costes de la operación de
rescate, y aunque no es una actividad
compleja deberá instruirse de forma básica al
personal para el desempeño de este trabajo.
38. Para la realización del trabajo en estas
áreas de almacenamiento de suministros se
debe contar con un equipo y material básico,
entre otros:
39. • Equipos informáticos con software específico.
• Formularios y tarjetas de gestión de
existencias, ingresos y salidas de productos.
• Material de oficina.
• Botiquines de primeros auxilios y extintores.
40. • Equipos de Protección Individual y colectivos.
• Grupos electrógenos y refrigerantes.
• Estructuras de soporte para el apilamiento de
los productos.
• Herramientas, escaleras, balanzas, carretillas y
equipos hidráulicos para carga y movilización.
41. De todo el espacio de almacenaje,
aproximadamente un 80% de este se
destina para los suministros y el sobrante
como espacio de trabajo. Para que este
espacio sea funcional es necesaria la
identificación de las distintas zonas de
movimiento y sectores específicos dentro del
área de trabajo.
42. Esta área de trabajo debe
quedar clasificada de la siguiente forma:
43. Punto de llegada:
donde ingresarán
las provisiones y se realizará la
recepción, verificación y control del
material recibido.
44. Punto de separación y clasificación
y registro:
donde en función de la
prioridad del producto este será
clasificado de una manera u otra
(urgente o no urgente).
46. Sin lugar a dudas, el gran objetivo de la
logística humanitaria en catástrofes es
proporcionar asistencia a las personas
implicadas en el desastre o a las
organizaciones encargadas de gestionar el
plan de emergencia,
48. La distribución de los recursos debe seguir
unos principios básicos basados en el control
y la proporción mensurable. Aunque existen
multitud de protocolos de actuación en
catástrofes colectivas, todos deben regirse
por:
49. Distribuir en la fase de emergencia
productos y artículos estrictamente
imprescindibles para la cobertura de
las necesidades básicas de
supervivencia o mejoramiento de las
circunstancias de vida del
superviviente.
50. Ser escrupulosos en la entrega de la
asistencia; es decir, solamente
aquellos que lo necesiten y en función
de sus carencias.
51. No serán criterios en la elección de los
beneficiarios la pertenencia política,
religiosa, raza étnica, nacionalidad, etc.
52. Dar cobertura a las situaciones críticas
de necesidad, por lo que la capacidad
de abastecimiento debe ser inmediata.
53. La ayuda no es resolutiva pero sí
complementaria en el auxilio de
aquellos que más lo necesitan.
54. Ser eventual para estimular la
recuperación económica de la zona y
así evitar la dependencia del lugar
afectado de la ayuda foránea.
55. La distribución es un ejercicio complejo
que exige capacidad de manejo y
experiencia. Un mal manejo puede originar
consecuencias negativas en la misma
población que se intenta beneficiar. Para
evitar esto, es necesario seguir unos criterios
que permitan la distribución de la asistencia
de la forma más adecuada posible.
56. En primer lugar, la distribución no debe
comenzar hasta que no haya plena
seguridad de que existe competencia para
enfrentar los requerimientos de un colectivo
que necesita una intervención de estas
características. Deben estar muy definidos
los criterios de elección de los agraciados,
así como los métodos de distribución.
57. En la mayoría de los casos, la catástrofe
evoluciona, por lo que será muy posible que
sea necesario reformular los criterios
iniciales y adaptarlos a las nuevas
situaciones encontradas.
58. Una vez verificada la situación se
procederá a la entrega de los suministros de
forma directa a los beneficiarios o
intermediarios seleccionados para este
cometido.
59. La distribución directa necesita de un
conocimiento completo del entorno físico y
social de la población y una buena capacidad
de logística sanitaria, administrativa y
estructural.
60. Una alternativa a la distribución directa es
la indirecta; es decir, la utilización de una
parte fiable y conocedora de la población y
el sitio que se ocupe de hacer llegar la
asistencia. Este planteamiento puede formar
parte de la organización, o bien, que el sitio
sea muy desconocido y, por tanto, la
distribución no se pueda realizar de manera
conveniente.
61. Distribución de los
suministros médicos
El suministro médico implica el material
médico, odontológico, de laboratorio y, por
supuesto, los medicamentos. En una
catástrofe es necesario asegurar su
disponibilidad y garantizar un empleo
racional.
62. Previo a su empleo se han debido
realizar acciones de selección, de
adquisición, de almacenamiento y asignación
que permitan contar con los medios
adecuados en el momento preciso,
garantizando unas condiciones y usos
óptimos de los recursos sanitarios.
63. Los suministros médicos básicos elegidos
deben otorgar a la población afectada
asistencia de urgencia. Todos los países
tienen que contar con un listado básico de
medicamentos y productos sanitarios.
64. Resulta imprescindible contar como
producto sanitario básico de primera
necesidad, el material destinado a la
realización de curas. Es obligatorio disponer
de antisépticos yodados, suero fisiológico
para el lavado de heridas, gasas, compresas
y vendas elásticas.
65. Además, para una
manipulación correcta de las heridas se
deberá disponer de al menos dos pinzas de
disección con dientes, tijeras rectas, bisturí
con mango, sonda acanalada, pinza pean,
pinza tipo mosquito y porta agujas, por si es
necesario la realización de cualquier tipo de
sutura. Para esta técnica se emplearan
sedas del 3/0 y 4/0.
66. En el supuesto de que la zona afectada o
país no cuente con esto, se utilizará como
referente el propuesto por la Organización
Mundial de la Salud (OMS), la cual también
ha establecido botiquines o maletones de
emergencia estandarizados para la atención
sanitaria inmediata, los cuales presentan la
siguiente dotación:
68. La programación de las adquisiciones
médicas tiene como objetivo disponer de los
suministros médicos en las cantidades que
se requieran para asistir a la población
afectada en el momento adecuado y
garantizando la calidad de la asistencia.
69. Esta
programación requiere una extrema
colaboración entre las personas encargadas
del suministro médico y el personal
asistencial ubicado en la zona de la
catástrofe.
70. Para hacer un cálculo de las necesidades
de los suministros es necesario identificar los
proveedores con los que se cuenta, la
realización de un estudio epidemiológico que
determine las cantidades de la logística
sanitaria en el momento del siniestro ya
posteriori, donde existe riesgo de epidemias,
así como establecer la consecuencia de cada
incidencia sanitaria o su morbilidad.
71. Una vez realizadas las estimaciones de los
productos sanitarios, estos se someterán a la
misma fórmula de adquisición que el resto
de recursos destinados a la resolución de la
catástrofe; es decir, a la compra de los
mismos de forma local o internacional y las
donaciones de las distintas organizaciones.
72. Recepcionados los medicamentos y
clasificados, estos serán sometidos a un
proceso de almacenamiento por grupo
terapéutico (analgésicos, antiinflamatorios,
cardiotónicos, etc.) que asegurará su calidad
y eficacia en su empleo y evitará su
deterioro acelerado.
73. La conservación de los medicamentos va a
estar sometida a factores de mantenimiento
específicos de cada uno de ellos. Muchos
requieren condiciones especiales de
conservación como la refrigeración o
controlar la temperatura y humedad, que se
hará mediante higrómetros.
74. Todos esos
controles van a ser esenciales en la
estabilidad del medicamento y la calidad de
la acción terapéutica. Para verificar la
prestación de una asistencia de calidad en
emergencias colectivas, se llevará a cabo un
seguimiento y monitorización de los
productos terapéuticos recepcionados en su
área de almacenamiento.
75. Logística de comunicaciones
En las emergencias colectivas la
comunicación entre los distintos equipos
intervinientes es necesaria a la vez que
obligatoria para el desarrollo exitoso de
cualquier intervención. Intercambiar
información, comunicar los datos, informar
del envío de entregas, etc., son necesidades
que las comunicaciones ayudan a resolver
durante la logística de recursos asistenciales.
76. La red de comunicaciones debe gestionar
distintos puntos organizativos como:
77. • El centro coordinador de las intervenciones
logísticas.
• Las áreas de distribución.
• Las áreas operativas en la zona de
intervención.
• Fronteras, puertos marítimos y aeropuertos.
78. • Unidades móviles asistenciales (helicópteros
medicalizados, UVI móviles, ambulancias
colectivas, personal de seguridad, etc.).
• Áreas de almacenamiento central y periférico.
79. Es necesario hacer un análisis de las
necesidades a las que hay que dar cobertura
para determinar el sistema de comunicación
a usar. Los equipos a utilizar deben ser
compatibles entre sí.
80. En una zona afectada por una catástrofe
es posible que el sistema de telefonía sufra
caídas y esté sin servicio desde horas a días,
incluso meses, en función del grado de
virulencia de la catástrofe.
81. Los diferentes tipos de comunicación van
desde la mensajería por voz hasta el
intercambio de datos gráficos e impresos. El
manejo del sistema de comunicaciones
implica el conocimiento del uso de los
equipos y los protocolos básicos de
comunicaciones.
82. Por este motivo, deben
considerarse distintos elementos para el
establecimiento de escuchas interactivas:
83. Radios de alta frecuencia. También
llamada de onda corta, lo que permite
el establecimiento de un rango de
contacto corto, medio o largo
dependiendo de la frecuencia en la que
se module.
84. Internet. Con aplicaciones de envío
de correo electrónico, permite entrar
en un complejo global de redes de
ordenadores enlazados entre sí y
capaces de enviar información a
cualquier lugar del mundo.
85. Este gran
medio de comunicación presenta el
inconveniente en las grandes
catástrofes que requiere de línea
telefónica para su funcionamiento, por
lo que si esta está deteriorada o
anulada por completo, la comunicación
es dificultosa o nula.
86. Comunicación PACTOR. Es un
sistema que permite el envío de texto
y datos en HF con el requerimiento
para su funcionamiento de un modem
PACTOR y un ordenador personal.
Requiere de un software específico
para su puesta en marcha.
87. Telefonía móvil. Este sistema
protagoniza una buena parte de las
comunicaciones en atención de
catástrofes. Hoy en día, la mayoría de
los terminales permiten la conexión a
Internet y el envío de información
gráfica desde cualquier lugar del
mundo a otro terminal u ordenador.
88. Es
obvia la importancia de estas
aplicaciones en el campo de las
grandes emergencias colectivas. La
mayoría de los vehículos asistenciales
ya llevan incorporadas aplicaciones que
transmiten video y valores de las
constantes vitales de un paciente a un
centro coordinador de referencia.
89. Teléfonos satelitales. Cuando las
conexiones telefónicas y de Internet
resultan inoperativas se emplean estos
terminales que implican la posibilidad
de comunicación mediante números
conocidos.
90. Para su funcionamiento
requieren como es lógico de un nivel
óptimo de batería y de su empleo en
una zona despejada para poder
disponer del enlace satelital.
91. Tecnología GPS. Permite localizar
heridos mediante una tecnología Cell
ID (red GSM) que logra localizar
cualquier dispositivo móvil con una
precisión en torno a 200 m en entorno
urbano y 5 km en entorno rural.
92. Esta
tecnología GPS, basada en los
satélites, otorga información muy
precisa siempre y cuando la zona no
esté muy poblada; es decir, no
funciona adecuadamente en interiores,
calles estrechas, zonas de grandes
edificios, etc.
93. En España, los servicios
de la línea 112 tienen integrado la
localización por GPS de la llamada
entrante a la sala de coordinación.
94. Sin lugar a dudas, las tecnologías móviles
han aportado una gran ayuda al mundo de la
asistencia sanitaria, ya que permiten una
gestión eficaz de los vehículos de asistencia
sanitaria, sobre todo en situaciones con
múltiples heridos de gravedad donde la
llegada al auxilio es fundamental.
95. Gracias al
GPS se puede conocer en todo momento la
localización exacta de los recursos móviles,
permitiendo reducir el tiempo de llegada al
lugar del siniestro y, por tanto, al centro
hospitalario de referencia, acelerando
lógicamente el tiempo de respuesta de los
sistemas de emergencia.
96. Logística de personal
Todo el personal interviniente en
catástrofes o emergencias colectivas debe
tener información sobre las características de
salud de la zona y debe someterse a un
reconocimiento de su estado de salud previo.
97. El personal sanitario debe cumplir de forma
estricta este examen previo, puesto que son
junto con otros colectivos de rescate como
bomberos los que van a acudir a la zona cero
del siniestro y van a establecer un contacto
directo con los damnificados.
98. En el caso de que un interviniente padezca
una enfermedad y esta requiera tratamiento
específico, además de la revisión estipulada,
es aconsejable que el personal médico
encargado de realizar la vigilancia de la
salud de aquellos futuros intervinientes en
catástrofes realice un informe sobre estos
99. y
disponga el medicamento en proporción
suficiente para poder cubrir la estancia en la
zona de la incidencia.
100. El personal que no esté entrenado o no
tenga facilidad para adaptarse a la
climatología de la zona deberá tomar
precaución previa,
101. como protección frente al
frío, sol, humedad, agua, hielo, etc. Desde el
punto de vista de la logística de personal, la
ropa de este colectivo debe ser cómoda, de
fibra natural, ligera, de colores pálidos y se
debe realizar el cambio a menudo de estas.
Para evitar las infecciones micóticas, el
calzado debe estar ventilado y ser amplio.
102. La humedad y el calor extremos, junto con
los importantes esfuerzos realizados, pueden
llegar a provocar golpes de calor debido a
gran pérdida de volumen y sales minerales,
siendo necesaria la intervención de urgencia
de otros compañeros sanitarios.
103. Para evitar
esto, se deberá dotar al personal de té y
otro tipo de bebidas isotónicas que
prevengan este tipo de cuadro.
104. Un requisito imprescindible que debe tener
resuelto todo personal de rescate
(sanitarios, mandos, pilotos, tecnicos,
almaceneros, etc.) es la vacunación contra
distintos tipos de enfermedades.
105. Logística de gestión y
administración
Una catástrofe representa una situación
crítica para una comunidad con una
capacidad importante para penetrar de
forma directa en su organización e
incapacitar su funcionamiento diario.
106. Es
primordial generar una acción coordinada e
integradora en este tipo de situación para
así poder reducir la morbimortalidad
derivada de estos incidentes; pero esta
acción debe estar diseñada, calculada,
entrenada y evaluada.
107. En cada crisis la gestión debe afrontar un
momento crítico con repercusiones múltiples
como las del sector salud, necesidades
básicas, factores económicos, sociales, etc.
109. Necesidades básicas no cubiertas.
La seguridad de la zona,
abastecimiento de agua, comida,
asistencia sanitaria, etc., dejan de
tener cobertura en la población
afectada.
110. Derrumbe institucional. La toma de
decisiones se torna compleja ante la
ausencia de información. No obstante,
esta incertidumbre debe estar
planificada para cualquier catástrofe y,
por tanto, las instituciones públicas que
tomen el mando de la situación deben
estar preparadas para gestionar este
tipo de obstáculos.
111. Pérdida de control.
Toda crisis
genera incertidumbre, rumores
desfavorables y dramatismo social
inevitable.
112. Sobreexposición del sistema.
En
cualquier emergencia de gran volumen
se alcanza un punto máximo donde el
sistema logístico no es capaz de
controlar el caos generado.
113. Se le
conoce con el nombre de crack system,
y va a depender de la organización
previa, de la característica de la
incidencia, de la especialización de los
intervinientes y del entrenamiento de
estos. A mayor capacidad para la
elaboración de respuesta, menor
tiempo de caos.
114. Ausencia de respuesta a corto plazo.
La capacidad para generar una
acción eficaz y eficiente marca el
transcurso temporal y, en cierto modo,
las consecuencias a corto y a medio
plazo.
115. Enfoque multisectorial.
La crisis comienza por elementos insostenibles
dentro del sistema, y lo que se inicia
siendo una afectación local puede
finalizar comprometiendo el
funcionamiento generalizado de la
comunidad, lo que hace que la
respuesta a generar sea
multidisciplinar.
116. La gestión logística de una crisis
representa una secuencia de actuación y una
forma concreta de diseñar la actividad de un
sistema. Gestionar una catástrofe implica
establecer un modelo de gestión de
incidencias que posibilita articular la
maniobra a seguir para la respuesta de la
crisis y debe estar basada en la
organización, la logística y el socorro.
117. Cada
institución participante debe desarrollar
procedimientos operativos y funcionales
adaptados a la realidad, en relación con los
recursos reales y riesgos específicos
118. Los grandes desastres o catástrofes
representan un grave problema de
organización. Será la autoridad la encargada
de gestionar la organización del caos.
119. Para generar una capacidad resolutiva y
organizadora, el sistema de gestión de la
crisis debe basarse en una serie de principios
básicos como son la simplicidad, unidad de
mando, diferencias de los cargos y función,
competencias del mando, etc.
120. Dentro de la
gestión de una emergencia colectiva o
catástrofe se encuentran involucrados los
sectores de extinción de incendios y rescate,
personal de seguridad, personal sanitario y
de intervención psicosocial, logística,
comunicación, administración, etc.
121. Lo que
origina que ante una demanda importante
en una crisis, se produzca una aglomeración
de mandos e instituciones que deben estar
perfectamente coordinados y así poder poner
en marcha la operativa de rescate y dar
respuesta a la demanda de ayuda.
122. Este
conglomerado de altos cargos debe estar a
su vez presidido por una cabeza única y
visible, que será el coordinador del incidente,
responsable en potencia en el lugar del
siniestro de la gestión global e integrada de
la operación.
123. Una buena gestión de la crisis implica la
evaluación de los requerimientos,
gestionando el abastecimiento, transporte y
recursos materiales y humanos. Esto implica
en la mayoría de las ocasiones trabajar en
situaciones de máxima precariedad, donde
debe primar el abastecimiento de los
recursos locales, si estos están disponibles.
124. La logística en el plan de emergencia debe
establecer unas normas operativas de
cumplimiento obligado, donde se
establezcan las tareas a realizar, el
responsable de estas, el mando superior de
logística, la localización de los medios a
emplear y las alternativas planificadas en el
caso de que la actividad proyectada para la
catástrofe no funcione adecuadamente.
125. Por
tanto, una logística no puede ser
improvisada, debe estar perfectamente
preparada para poder afrontar múltiples
situaciones de crisis.
126. A nivel de administración de desastres, la
gestión se considera el ejercicio de las
políticas y decisiones administrativas y
actividades de la operación que forman parte
de las diferentes fases del desastre en todos
sus niveles.
127. Las tareas y acciones
encaminadas a la administración del
desastre son permanentes en el tiempo y
espacio, armonizando un ciclo de tres fases:
128. 1. Prevención, preparación y alerta.
Comprende las acciones y medidas
encaminadas a evitar o reducir el
desastre. Es la fase del antes.
129. 2. Respuesta.
Corresponde a las acciones realizadas durante e
inmediatamente después del desastre
para minimizar sus consecuencias. Se
incluyen también las acciones de
salvamento y rescate. Es la fase del
durante.
130. 3. Rehabilitación y reconstrucción.
Acciones encaminadas a la
recuperación geográfica y social de la
zona. Es la fase del después.
131. Resumen
Una crisis sanitaria surge cuando una
eventualidad crítica provoca numerosas
víctimas, la alteración de la organización y el
funcionamiento de una comunidad.
132. Actualmente, se producen infinidad de crisis
con dificultad para su resolución debido a su
magnitud y forma de presentación; por este
motivo es importante que los equipos de
emergencia dispongan de una línea global
de actuación e intervención que les permita
dar respuesta a todas las nuevas incidencias
que se presenten.
133. Es muy importante que el gestor de casos
emergentes cuente en su plantilla con
personal especializado en la administración,
logística y gestión de crisis sanitarias.
134. Caos y Desorden.
Ante
el caos y desorden que se genera al inicio de
toda crisis, los equipos de intervención en
catástrofes deben tener la capacidad de
ofrecer una respuesta coordinada y
organizada, y para ello la mejor forma de
conseguirlo es mediante la creación de una
cadena de mando asistencial con la figura
del coordinador principal.
135. En la logística sanitaria en catástrofes no
solo se persigue la elección y estabilización
de los heridos y posterior traslado a los
centros hospitalarios, sino que implica
también la atención o el cuidado psicosocial
de los afectados que resultan ilesos.
136. Clasificación del
material logístico
Cuando ocurre una crisis de tipo
humanitaria se instaura de forma rápida un
entramado de suministros de ayuda en el
que intervienen multitud de organizaciones
como ONG, donantes, proveedores,
cooperantes internacionales, etc.
137. Este
entramado implica el desplazamiento a la
zona de la catástrofe de una gran cantidad
de suministros de diferentes tipos, desde
medicamentos, productos médicos, vehículos
pesados, alimentos, etc.
138. También es necesario contar con
que el flujo de material logístico que llega
implica el desplazamiento de un volumen
importante de personal técnico experto en
distintas especialidades, y que será
necesario incluir en el cómputo general de
recursos humanos y materiales a desplazar a
la zona afectada.
139. Como ante una catástrofe es muy
probable que las infraestructuras estén
dañadas y la capacidad de respuesta del
transporte local esté deteriorada o sea
insuficiente, será necesario contar
externamente con este tipo de recursos para
suplir las carencias de la zona.
140. Función
La labor de la logística en emergencias
consiste en la interrelación de todas sus
partes, permitiendo lograr objetivos de
forma rápida y secuenciada mediante el
empleo óptimo de los recursos.
141. La movilización del personal, de equipos y
materiales necesarios para poder brindar
asistencia, evacuar los heridos y reubicar a
los damnificados requiere de una estructura
logística para poder ser ejecutada de forma
efectiva.
142. La preparación de toda la infraestructura
necesaria para asistir en una catástrofe debe
ser un elemento activo del Plan de
Emergencias de cada país, al igual que los
planes de las organizaciones que
intervengan en la asistencia de la catástrofe.
143. Características técnicas
En relación a la magnitud de la catástrofe
se requerirán distintos elementos de rescate
que deberán adaptarse a las condiciones y
proporciones del desastre.
144. Para el envío de los suministros a la zona
del desastre es necesario conocer la
localización exacta del acontecimiento, sus
coordenadas, topografía significante y sus
posibilidades de acceso.
145. En función de estos
parámetros y las características técnicas del
abanico de suministros disponibles, se
enviará a la zona el medio que más se
adecue a las circunstancias.
146. De igual forma, a la hora
de establecer un asentamiento temporal
será necesario conocer previamente a su
instalación la posibilidad de abastecimiento
o no de agua, la topografía y las condiciones
ambientales de la zona, para así poder
establecer los requisitos técnicos de los
refugios a instalar: refugios con o sin sistema
de climatización, con o sin abastecimiento de
agua, etc.
147. Tipos
En una catástrofe o emergencia colectiva,
el material logístico a distribuir debe estar
relacionado con el transporte, soporte
eléctrico, iluminación, climatización, tipos de
refugio, comunicaciones, higiene, tareas de
saneamiento, almacenamiento,
descontaminación y gestión y
administración.
148. De transporte
La clasificación del transporte va a
depender de las personas que lo realizan y
del lugar donde se lleva a cabo. De esta
manera, se dispone de transporte sanitario
aéreo, marítimo y terrestre.
149. Asistido:
también llamado transporte
de Soporte Vital Básico. Está dirigido a
situaciones que oscilan desde un riesgo
medio a un riesgo alto. Son dispositivos
asistenciales medicalizados.
150. No asistido:
también llamado
transporte convencional. En este caso
es solo el Técnico en Emergencias
(TES) el encargado de conducir el
vehículo y transportar al accidentado.
151. Transporte aéreo
El más utilizado es el helicóptero, que se
usa preferentemente para el desarrollo de
Soporte Vital Avanzado en diversas
situaciones.
152. Otro medio aéreo utilizado es el avión
sanitario, que se usa para el traslado de
pacientes a grandes distancias debido a su
enorme autonomía y radio de acción.
153. Transporte marítimo
Debe ser realizado por embarcaciones
autorizadas y preparadas para realizar el
rescate, asistencia y traslado de pacientes.
154. Algunos ejércitos cuentan con buques de
logística y asistencia médica que permiten
aplicar cuidados y tratamientos in situ. Se
trata de barcos hospitales con una cubierta
completa que va desde la proa y con un
acceso directo al helipuerto y cubierta,
facilitando de esta forma el traslado de
víctimas.
155. Transporte terrestre
Es aquel que se va a realizar en
ambulancias de Soporte Vital Básico, Soporte
Vital Avanzado, ambulancias colectivas y
ambulancia no asistenciales.
156. De forma alternativa, existen otro tipo de
ambulancias destinadas a cubrir zonas con
problemas orográficos y situaciones
atmosféricas adversas. Estas son las
ambulancias todoterreno o de intervención
rápida, con personal médico y técnico y
dotadas de los materiales y equipo
electromédico necesarios para realizar una
asistencia precoz in situ.
157. De generación de electricidad
En equipos de intervención inmediata en
la catástrofe puede resultar útil el uso de
generadores eléctricos con motores de gasoil
o gas natural para la producción de
suministro de corriente alterna monofásica o
trifásica, idónea para la iluminación y para
equipos de electromedicina en la zona del
siniestro
158. De iluminación
La luz obtenida mediante los generadores
eléctricos descritos en el punto anterior con
frecuencia resulta demasiado costosa por su
instalación y mantenimiento.
159. No obstante, es
un elemento necesario que va a utilizarse en
multitud de ocasiones en una emergencia
colectiva o catástrofe y en los campamentos
de los damnificados.
160. De climatización
Los sistemas de climatización en
emergencias colectivas están diseñados para
satisfacer las necesidades de habitabilidad
en los campamentos instalados. Todos los
componentes de los sistemas de calefacción,
ventilación y aire acondicionado deben estar
protegidos frente a situaciones adversas.
161. De refugio
Uno de los problemas principales tras
acontecer una catástrofe es la situación de
abandono y aislamiento que sufren los
damnificados.
El alojamiento más práctico que pueden
tener estas personas es el de familiares o
amigos cercanos, aunque a veces esta
circunstancia no se da.
162. Ante esta circunstancia, la única
alternativa pasa a ser los alojamientos o
refugios colectivos
Un alojamiento temporal o refugio surge
ante catástrofes naturales o eventos creados
por el hombre, bien sea en las fases previas
del desarrollo de un desastre, durante o
después de este.
163. Un refugio debe presentar las siguientes
características:
• Proteger contra el calor, lluvia viento y frío.
• Disponer de zona para bienes y pertenencias.
• Dar seguridad a nivel emocional y
proporcionar intimidad.
164. La dotación necesaria para poder llevar a
cabo la instalación de un refugio temporal es
entre otras: carpas, estructuras de soporte,
lonas, letrinas, duchas, lavaderos,
generadores de corriente eléctrica, agua,
cocina y utensilios, vajillas, colchones,
mantas, sábanas, botiquines, camillas, etc.
165. De comunicaciones
Las comunicaciones van a ser elementos
integradores en la cadena asistencial,
permitiendo la armonización y uso apropiado
de los recursos, así como los enlaces de
conexión entre los distintos servicios de
emergencia.
166. • Algunos conceptos generales de las
comunicaciones son:
• Emisor: elemento que codifica el mensaje y lo
dirige hacia el destino.
• Receptor: elemento que recibe el mensaje.
167. • Transmisión: proceso por el que se envía la
información a distancia.
• Red: grupos de equipos de comunicación
conectados a un centro de coordinación.
• Malla: conjunto de redes conectadas
mediante un centro de coordinación que
conforman un sistema de comunicación con
frecuencias o tonos distintos para poder hacer
alineaciones
• selectivas de la comunicación a nivel emisor y
receptor.
168. De higiene
La población afectada por una catástrofe
debe estar sensibilizada y comprender las
consecuencias de una mala higiene sobre su
salud. Por parte de las instituciones será
necesario el reparto de jabón, material
sanitario, utensilios de aseo, establecimiento
de letrinas y zonas de acopio de basuras.
169. De saneamiento
Eliminar de forma segura residuos y
excretas es una prioridad en el momento del
establecimiento de los campamentos.
170. De almacenaje, distribución y potabilización de
agua
En campamentos de damnificados es
prioritario el suministro de agua en
cantidades importantes. Esta ha de ser
segura y saludable para poder cocinar, beber
y realizar la higiene y aseo personal.
171. Existen indicadores que establecen el
volumen diario de agua para una persona
adulta en un campamento. La cantidad de
agua resultante es de 15 l/día.
172. En muchas ocasiones, por diversos
motivos, es necesario realizar un
racionamiento del agua como en temporadas
de sequía, estaciones secas o
infraestructuras deficientes. En cualquier
caso, se debe garantizar:
173. Dar prioridad al consumo de agua a
personas frágiles.
Establecimiento de turnos que
permitan la apertura y cierre de las
bombas y grifos.
174. Transparencia con los damnificados
sobre el racionamiento del agua para
que comprendan el motivo de las
restricciones.
Sensibilización acerca de la necesidad
de limitar el consumo de agua de
forma innecesaria.
175. Para garantizar la calidad del agua en su
proceso de distribución han de establecerse
los siguientes pasos:
Someter a controles periódicos de calidad y
mantenimiento el agua de pozos, bombas,
grifos, tomas, tanques, etc. También realizar
limpieza de desagües y así permitir un drenaje
correcto que evite la estanqueidad del agua.
176. Cercar las zonas de recolección de agua (grifos y
fuentes) para limitar el acceso a niños y
animales.
Establecer suministro de agua para animales en
una zona alejada del consumo de agua
humano.
Realizar actividades encaminadas a la
promoción de la higiene y salud en relación
con el consumo de agua.
177. De descontaminación
En el supuesto de que la catástrofe origine
un problema nuclear, radiológico o biológico
(NRBQ), se procederá a activar los equipos
especialistas de respuesta para reducir los
efectos de estos.
178. De diagnóstico terapéutico
En escenas sanitarias desbordantes el
diagnóstico se torna altamente complejo
debido a la multitud de circunstancias hostiles
que envuelven la situación. En el lugar del
siniestro, el uso de dispositivos de
diagnósticos va a jugar un papel importante
en la toma de decisión con respecto a la
terapéutica a administrar a una víctima por
parte del sanitario.
179. La dotación de material
logístico en las situaciones iniciales de
reconocimiento debe limitarse a la
identificación de una serie de parámetros
vitales básicos, como van a ser la frecuencia
cardiaca (FC), presión arterial (PA),
temperatura (Tª) y frecuencia respiratoria
(FR).
180. Tras la realización de la valoración de la
victima, la actitud terapéutica a llevar a cabo
debe ser la de la estabilización
hemodinámica del paciente en el punto del
siniestro hasta su posterior traslado al
puesto médico avanzado y derivación última
a un centro hospitalario de referencia.
181. El
material inicial que va a ser empleado en el
diagnóstico de estos pacientes es el
siguiente:
182. Monitor desfibrilador :
es un dispositivo eléctrico portátil que
diagnóstica y trata la parada cardiorespiratoria
en casos de fibrilación ventricular (FV). Es un
dispositivo que, además de esta función,
presenta otras no menos
importantes para el diagnostico de una
persona como son:
183. • Control de la presión arterial (PA).
• Frecuencia cardiaca (FC).
• Frecuencia respiratoria (FR).
• Temperatura (Tª).
• Electrocardiograma (ECG) con posibilidad de
impresión.
• Marcapasos externo para bradicardias o
bloqueos.
184. • Capnógrafos para el análisis de los gases
arteriales.
• Pulsioxímetro para detección de la FC y
Saturación de O2.
185. DESA(Desfibrilador Externo Semiautomático):
que puede llegar a ser utilizado por personal
no sanitario previo entrenamiento y que
mediante el seguimiento de una serie de
órdenes lanzadas por el aparato, y tras
analizar de forma muy fiable el ritmo cardiaco,
requiere de un último paso dado por la
persona que lo utiliza para realizar la
descarga eléctrica.
186. DEA (Desfibrilador Externo Automático):
es igual que el anterior
salvo en la modalidad de
funcionamiento. Este dispositivo
analiza solo el ritmo cardiaco y si lo
considera necesario el solo realiza la
descarga eléctrica.
187. Pulsioxímetro:
permite detectar de forma inmediata la
frecuencia cardiaca (FC) y la saturación de O2
en un paciente. Es ideal en emergencias para
la detección de problemas respiratorios
y seguimiento de taquicardias y
bradicardias.
189. Glucómetro:
pequeño dispositivo que permite analizar la
glucosa en sangre capilar. Es sencillo y de fácil
manejo. Muy útil en la detección de
alteraciones glucémicas, como la
hipoglucemia.
Precisa de tiras reactivas para la recolección de
la muestra y posterior lectura.
190. Capnógrafo:
pequeño dispositivo que permite obtener
mediciones de los niveles de respiración de
dióxido de carbono (CO2) y de la saturación de
oxígeno (Sat O2) en sangre.
191. La terapéutica en la medicina de masas
tiene que adaptarse al número de víctimas y
adecuar los tratamientos a la urgencia vital u
orgánica. Se trata de asistir al mayor número
de heridos posibles en el menor tiempo,
dejando de alguna manera a aquellos
enfermos con mal pronóstico.
192. Para ello, se protocoliza el uso terapéutico de
ciertos fármacos muy utilizados en pacientes
críticos. Estos son los que se describen a
continuación.
193. Adrenalina
Su uso está indicado en el
aumento de la presión
diastólica debido a su efecto
vasopresor que mejora el
flujo coronario y cerebral.
194. Atropina
Actúa sobre el ritmo cardiaco
y está indicada en casos de
paro cardiaco, asistolia y
bradicardia.
215. Meperidina Analgésico opiáceo.
Metamizol magnésicoAnalgésico y antipirético.
Metilprednisolona Usado por su acción
antiinflamatoria.
Metoclopramida Usado como antiemético.
• Midazolan Indicado en convulsiones
y
para producir sedación.
216. Morfina Potente analgésico opiáceo
Nitroglicerina Indicado para producir
vasodilatación venosa y
arterial.
Omeprazol Protege la mucosa gástrica.
Paracetamol Analgésico y antipirético.
Salbutamol Broncodilatador para
crisis
respiratorias.
217. De gestión y administración
La gestión y administración en desastres
consiste en el establecimiento de programas
de planificación, organización, dirección,
control, evaluación y capacitación de los
recursos institucionales, humanos y
operativos que de forma conjunta deben
elaborar e integrar.
218. Resumen
Cuando ocurre una catástrofe todos los
mecanismos que se van a usar para
normalizar las diferentes situaciones, los
documentos necesarios para registrar la
información y de esta forma permitir el
control, movimiento y monitorización de los
suministros y, de forma general,
219. todas
aquellas acciones dirigidas al desarrollo
logístico de una emergencia colectiva deben
ser planificadas, conocidas y experimentadas
con anterioridad.
220. En la cadena de suministros se debe
garantizar su recorrido desde su origen hasta
la llegada a los destinatarios. Va a jugar un
papel imprescindible en la logística sanitaria
disponer de flotas de transporte en sus
distintos soportes, que aseguren la
mercancía médica para los primeros
necesitados
221. así como el resto de material
necesario para la instalación y funcionalidad
normal de campamentos de refugiados
(sistemas de refrigeración, grupos
electrógenos, comunicaciones, elementos
para la higiene y aseo, etc.).
222. La gestión de la logística debe estar
centralizada en un coordinador que relacione
las funciones y a su vez los cometidos de
personal, de transporte, almacenaje,
abastecimiento y asistencia sanitaria.
223. También que mantenga relaciones con las
instituciones locales, informándoles en todo
momento de la situación logística actual y
haciéndoles saber de las necesidades de
determinados recursos locales.
225. Introducción
Conociendo los riesgos a los que una
población se expone es interesante calcular
los tiempos medios que van a estar
operativos los refugios temporales en
función de la naturaleza de la catástrofe y la
capacidad de reacción.
227. Un desastre natural complejo puede
originar un incremento en la necesidad de
asistencia médica de emergencia. Es
probable que las asistencias locales se vean
desbordadas por el volumen de víctimas a
asistir y, además, incluso los hospitales y
clínicas es posible que hayan sufrido
desperfectos estructurales que imposibiliten
su función.
228. Con el tiempo y con el objetivo puesto en
prestar una asistencia sanitaria conveniente
y adecuada a la situación crítica y a las
particularidades de la población afectada, se
han proyectado sistemas asistenciales
móviles que pueden transportarse y
desplegarse en la zona afectada por el
desastre.
229. Los hospitales de campaña, los
puestos médicos de evacuación y avanzados
son estructuras sanitarias eventuales
destinadas a cubrir todas las necesidades
básicas y asistenciales de la población
afectada.
230. Estructuras asistenciales. Objetivos
Las catástrofes sanitarias con múltiples
víctimas son situaciones eventuales, pero
que originan un fuerte impacto en las
autoridades y opinión pública y, de forma
especial, en las instituciones destinadas a
afrontar la situación.
231. El objetivo de las estructuras asistenciales
es alojar y rescatar a los lesionados con un
mínimo de secuelas y facilitar su traslado a
los centros sanitarios en las mejores
condiciones hemodinámicas posibles.
232. Una de las acciones fundamentales en el
momento de hacerse presente en el marco
catastrófico será establecer como mínimo un
hospital de campaña, un Puesto Médico de
Evacuación (PME) y un Puesto Médico
Avanzado (PMA), donde estarán
representados los mandos de todas las
organizaciones que actúen en la zona.
233. Estas estructuras eventuales actuarán
cada una por separado pero en estrecha
relación y coordinación entre sí. Desde estas
estructuras se distribuirá al personal.
234. El objetivo principal de estas estructuras
implica asegurar la viabilidad del paciente
desde el momento del rescate hasta su
traslado al servicio hospitalario de urgencias
indicado como centro de destino.
235. Tipos
Los diferentes tipos de estructuras asistenciales
a instalar en la zona del siniestro van a ser:
• Hospitales de campaña.
• Puesto Médico de Evacuación (PME).
• Puesto Médico Avanzado (PMA).
236. hospital de campaña
es una estructura sanitaria móvil que puede
desplegarse, instalarse y agrandarse con
rapidez para satisfacer las necesidades
inminentes de atención sanitaria durante un
tiempo determinado.
237. Puesto Médico de Evacuación (PME)
va a ser aquella estructura
intermedia entre el Puesto Médico Avanzado
y los centros asistenciales receptores.
Integra las estructuras para la observación y
agrupamiento de víctimas mientras son
evaluadas.
238. Entre sus funciones más importantes destacan:
• Selección y verificación de la clasificación
realizada previamente por el Puesto Médico
Avanzado.
• Proporción y continuidad de cuidados a las
víctimas y su coordinación con los centros
hospitalarios en base a las instrucciones
recibidas.
239. • Organización de la evacuación de los
pacientes críticos mediante los medios
disponibles y su derivación hacia los centros
hospitalarios a través de los centros
coordinadores.
240. Puesto Médico Avanzado (PMA)
es la estructura fundamental en el manejo de
las víctimas y va a ser el encargado de la
atención inicial de los accidentados y de su
posterior evacuación en las mejores
condiciones hacia los recintos sanitarios
disponibles.
241. Esta tarea implica no solo las
maniobras de soporte vital mínimo para
asegurar la viabilidad del paciente a través
de su trayecto hasta el servicio de urgencias,
sino la elección de estos con la idea de
asegurar el mayor número de vidas.
244. De forma general, los hospitales de campaña
presentan las siguientes características:
245. Capacidad de intervención in situ en el
transcurso de las primeras 24 horas
posteriores al desastre. Este plazo debe estar
perfectamente entendido en el mismo
momento en el que se detecta una cantidad
importante de víctimas. Es una condición
médica fundamental para ofrecer una
atención destinada a salvar el mayor número
de vidas.
246. Capacidad para funcionar de modo
autosuficiente. En un primer momento el
hospital de campaña deber proporcionar la
capacidad de funcionamiento con apoyo y
servicios públicos de la población afectada.
247. Debe tener al menos suficiencia para la
generación de electricidad, soporte médico y
equipos independientes que le proporcionen
al menos una autonomía en las primeras 48
horas. A nivel de recursos humanos debe
depender del mínimo o de ningún apoyo de la
población afectada.
248. Ofertar estándares de asistencia sanitaria
comparables o de mejor calidad asistencial a
los ofrecidos por el país afectado previo al
desastre. Para ello, el personal sanitario
interviniente debe estar cualificado y poseer
experiencia profesional en la asistencia de
víctimas en masa, su clasificación y posterior
indicación terapéutica en el caso de pacientes
con lesiones múltiples comprometedoras de
su estado vital.
249. Una de las características generales que debe
cumplir un Puesto Médico Avanzado (PMA) es
disponer de tres áreas de trabajo. La primera
o área de recepción de pacientes, donde los
pacientes son llevados a través de los equipos
de rescate; la segunda o área de
estabilización; y la tercera o área de
evacuación.
250. En el área de recepción deberán converger las
víctimas trasladadas hasta allí por el personal
de rescate, aquellos que mediante un triaje,
llevarán a cabo el traslado en función de la
gravedad de cada uno de los pacientes.
251. Una vez las víctimas han llegado al área de
recepción del Puesto Médico Avanzado (PMA)
se procederá a realizar un segundo triaje por
parte del personal sanitario, en función a
determinados parámetros clínicos.
252. Así, las víctimas etiquetadas con tarjetas de
colores se dispondrán en zonas específicas
dentro del área de estabilización, siendo las
víctimas con tarjeta roja las de mayor
gravedad y, a continuación, las de color
amarillo, que recibirán las primeras medidas
terapéuticas encaminadas a la estabilización
de las funciones vitales para asegurar un
traslado en las condiciones más óptimas
posibles.
253. Este traslado es considerado el último paso
donde el Mando de Evacuación deberá
transmitir al centro hospitalario de referencia
las lesiones detectadas y sus parámetros
vitales, recibiendo de este centro las
coordenadas de derivación al recinto
hospitalario.
254. Por último, el Puesto Médico de Evacuación
(PME) debe estar localizado en función del
siniestro a una distancia considerable del
Puesto Médico Avanzado (PMA), y su
ubicación debe seleccionarse en función de la
accesibilidad para los distintos dispositivos de
evacuación.
255. La gestión del PME corresponde a un médico
que realizará las funciones de la dirección y
coordinación, además del mantenimiento de
las informaciones con el Centro Coordinador,
que recibirá datos sobre el número de
víctimas, centros sanitarios de recepción de
víctimas evacuadas, número de víctimas en
observación y número de fallecidos.
256. La organización del Puesto Médico de
Evacuación va a depender de la magnitud de
la catástrofe, pero de forma general siempre
se van a establecer dos áreas bien
diferenciadas: una de ellas donde van a estar
ubicados los pacientes que esperan ser
trasladados a los centros de referencia; y otra,
en la periferia del Puesto Médico de
Evacuación, dirigida a actuar como morgue,
donde los cuerpos de los fallecidos esperan
para poder recibir sepultura.
258. Toda instalación sanitaria temporal debe tratar
de cumplir determinados requisitos que
garanticen el beneficio de la comunidad
afectada.
259. Es interesante contar entre el personal sanitario
del hospital de campaña con especialistas en
cirugía general, internistas, intensivistas,
ginecólogos y obstetras, pediatras y, por
supuesto, personal de enfermería que
proporcione la continuidad de los cuidados.
260. Los hospitales de campaña más avanzados
cuentan además con sistemas de telemedicina
que permiten la realización de intervenciones
y posteriores diagnósticos en comunicación
con los centros coordinadores.
261. De forma genérica el hospital de campaña debe
disponer al menos de:
• Generador eléctrico.
• Bidón de 25 l de gasolina.
• Caja de montaje del módulo hospitalario.
• Camillas para pacientes de diversas patologías
(intensivos, quemados, traumáticos,
pediátricos e incubadoras).
262. • Carro completo de material y medicación.
• Carro de curas.
• Monitores desfibriladores (DEA/DESA).
• Balón resucitador adulto y pediátrico.
• Material y balas para oxigenoterapia.
• Material para intubación (laringoscopios,
mascarillas laríngeas, etc.).
263. • Aparato de electrocardiografía.
• Bombas de perfusión intravenosa y nutrición
parenteral.
• Sillas de ruedas.
• Collarines multitallas.
• Férulas semirrígidas y de vacío.
• Colchón de vacío.
• Inmovilizador cervical.
264. • Tablero espinal
• Mantas.
• Contenedores con material para curas y
material fungible.
265. En el Puesto Médico Avanzado (PMA) van a
confluir los elementos asistenciales que
permitan ofrecer un soporte vital avanzado a
multitud de víctimas y disponerlas en las
mínimas condiciones sanitarias para poder
tolerar un traslado.
266. Por ello, al menos es imprescindible contar con
los siguientes elementos y con todos los
dispositivos que cada uno de ellos requiere
para su funcionamiento:
• Dos respiradores de ventilación mecánica.
• Dos balas de oxígeno de capacidad máxima
para atender a más de 30 pacientes.
267. • Vías de canalización periférica y centrales,
para atender a más de 100 pacientes.
• Sueroterapia (cristaloides, salinos, glucosados,
glucosalinos, etc.).
• Medicación.
• Dos camillas especiales de pacientes críticos.
268. • Mesas y sillas plegables.
• Torreta de iluminación.
269. Características del despliegue de las estructuras
En el Puesto Médico de Evacuación (PME) se van
a distinguir tres tipos de estructuras de
montaje a elegir en función de la magnitud de
la catástrofe:
270. Estructura básica.
De elección ante una catástrofe reducida o de
efectos limitados. Sus elementos son:
• Zona de selección y acondicionamiento,
donde se localiza la admisión, selección,
estabilización y espera de evacuación de
víctimas.
• Zona de cadáveres o morgue.
271. Estructura compleja.
A elegir en catástrofes de mediana magnitud y
compuesta por:
• Zona de admisión de víctimas.
• Zona de reanimación y estabilización.
272. • Zona de confinación de heridos y
supervivientes.
• Zona de cadáveres o morgue.
• Local para abastecimiento de agua,
esterilización y almacén de suministros.
273. Estructura elaborada.
Su fin son las catástrofes graves y
desproporcionadas. Es una instalación
sanitaria portátil con autonomía tecnológica y
médica completa. Los elementos de la
estructura elaborada son:
274. • Área médica.
• Área de laboratorio.
• Área de hospitalización con 100 camas.
• Área de transporte para traslado de pacientes.
• Área quirúrgica con equipos de cirujanos y
anestesistas reanimadores.
• Área de mando y soporte.
275. El despliegue del Puesto Médico Avanzado
(PMA) tiene por objeto establecer lo más
rápido posible la estructura médica eventual
organizada lo más próxima a la zona del
desastre, así como instalar todos aquellos
elementos necesarios para la atención médica
de urgencia. Para que el despliegue del PMA
sea efectivo, debe ser visible y estar bien
estructurado en personal y medios.
276. El PMA debe contar con espacio suficiente para
poder organizar por bloques de gravedad a las
víctimas y disponer de manera organizada
todos los elementos de asistencia sanitaria,
como son material fungible, material de
electromedicina, tienda funcional, elementos
de señalización adecuados y visibles de cada
espacio, camillas asistenciales, tomas de
oxígeno, etc.
277. Por norma general, la estructura del PMA suele
ser un elemento hinchable a modo de
cubierta diseñada para cubrir cualquier tipo
de accidente o catástrofe. El tiempo de
autoinflado es aproximadamente de dos
minutos, siendo esta estructura de peso
reducido y fácil instalación.
278. Una vez preparado el PMA, se garantiza una
autonomía total en aquellas situaciones
donde se hace necesaria su instalación.
Las medidas aproximadas son de 40 m2
interiores, con posibilidad la mayoría de ellos
de hacer al menos una división interna de 20
m2.
279. El transporte necesario para el despliegue de
esta estructura es un remolque con dotación
complementaria de grupo electrógeno, mesas,
sillas, camillas asistenciales, material sanitario
de apoyo respiratorio y circulatorio, material
fungible, mantas y resto de material exclusivo
de diversas incidencias y patologías.
280. El despliegue del hospital de campaña debe
ofrecer un nivel adecuado de comodidad para
los pacientes, para los profesionales sanitarios
y, además, debe proporcionar espacio, control
de temperatura adecuado, impermeabilidad y
resistencia frente a elementos naturales.
282. Objetivos
En el escenario de una catástrofe se debe saber
quién es el que dirige el escenario y qué
competencias tiene, estableciendo un único
mando y una estructura jerarquizada para que
la eficacia y la seguridad sea máxima. La figura
encargada de establecer órdenes sobre
estructuras subordinadas de una misma
corporación es el mando.
283. La logística en catástrofes implica establecer un
puesto de mando inicial que sea el encargado
desde un principio de que el resto de
objetivos se vayan ejecutando según lo
previsto.
El mando será el encargado de ejecutar las
acciones sobre el coordinador y este las
ejercerá sobre los jefes de cada una de las
instituciones representadas.
284. A nivel sanitario, el mando recaerá sobre la
persona más destacada y que ejerce su
autoridad en el lugar del siniestro. Este
organiza el Puesto de Mando Sanitario
(PMSAN) dentro del Puesto de Mando
Avanzado (PMA), establece el despliegue y se
suma a la estructura de coordinación.
285. Tipos
Las diferentes estructuras y unidades de
coordinación sanitaria son las siguientes:
Centro de Coordinación Operativa (CECOP).
Puesto de Mando (PM).
Puesto de Mando Avanzado (PMA).
286. Centro de Coordinación Operativa (CECOP) es el
lugar fijo donde se van a ejercer las funciones
de coordinación, comunicación y
centralización de la información, con el
objetivo de evaluar la situación de emergencia
y transmitir las decisiones a aplicar, así como
para mantener en contacto directo a la
dirección encargada del rescate con otros
puestos de control.
287. El CECOP debe contar con todas las
infraestructuras necesarias para poder
ejecutar la secuencia de mensajes entrantes y
salientes que requiera la catástrofe. Por ello,
es imprescindible que durante una
intervención la comunicación esté
perfectamente integrada entre todos los
participantes implicados.
288. En el CECOP se van a diferenciar las siguientes
zonas:
• Zona de transmisiones, donde se ubicarán
todos los equipos técnicos que van a
intervenir en las comunicaciones.
• Zona de control o coordinación de las
operaciones, desde donde se hace un
seguimiento y se planifican las operaciones.
289. • Zona de apoyo con dotación de recursos para
la toma inmediata de decisiones (mapas,
estaciones meteorológicas, etc.).
290. Puesto de Mando (PM)
es el lugar desde donde se determinan las
acciones de forma secuenciada. Es el área
donde se encuentra el jefe. En una situación
de emergencia colectiva tiene que existir un
Puesto de Mando por cada institución
colaboradora con su correspondiente vehículo
de mando, que se encargará de transportar a
los mandos y de realizar labores
administrativas.
291. Puesto de Mando Avanzado (PMA)
es la estructura encargada de facilitar la
integración de todas las entidades
participantes en la incidencia sanitaria. Su
localización debe ser en una zona cercana a la
catástrofe.
292. La institución con más capacidad resolutiva para la
catástrofe será la encargada de ser la autoridad. Para
que las instituciones sean resolutivas, tiene que
existir una buena planificación, un buen
entendimiento y el establecimiento de estructuras
bien organizadas, y todo esto reforzado con la
realización de numerosos simulacros que permitan
detectar errores, con el fin de subsanarlos y así
poder garantizar el buen funcionamiento de un PMA
de cualquier entidad organizativa.
293. Funciones
En el CECOP se van a canalizar y coordinar
aquellas situaciones que afectan al desarrollo
normal de una emergencia, principalmente
son:
• Conocer los recursos disponibles en tiempo
real para la resolución de la emergencia.
294. • Activación de los recursos y medios que más
se adapten a la emergencia.
• Controlar y optimizar los recursos de la
respuesta operativa.
• Puesta en marcha de los procedimientos
operativos.
295. • Atención de las demandas de medios y
recursos donados o ajenos a las instituciones
participantes.
• Ejecución de órdenes recibidas a través de los
correspondientes órganos directivos.
• Realizar seguimiento de informaciones sobre
parámetros relacionados con los riesgos.
296. • Ofrecer apoyo a los servicios de intervención
mediante recursos, medios de información,
etc.
• Tener contacto de manera continua con
centros de información sobre aspectos
relacionados con los riesgos y otros centros de
coordinación cercanos a la zona.
297. • Realizar ejercicios y simulacros de forma
periódica. Un simulacro es un ensayo sobre
cómo se debe actuar en caso de emergencias,
atendiendo a un plan previamente
establecido, basado en procedimientos de
seguridad. Un simulacro pone a prueba la
capacidad de respuesta de la población y su
ejercicio permite evaluar y retroalimentar los
planes de emergencia.
298. La composición del Puesto de Mando Avanzado
(PMA) va a depender de las características y
naturaleza de la catástrofe, siendo la más
idónea la siguiente:
299. • Jefe del grupo de intervención.
• Responsable del área sanitaria.
• Responsable del área de asistencia técnica en
el PMA.
• Personal de seguridad de la zona afectada.
300. Las funciones a realizar en el puesto de mando
avanzado son las siguientes:
• Coordinar los distintos grupos de acción que
forman parte de la emergencia.
• Coordinar las acciones de los grupos
operativos que intervienen en la operativa de
emergencia.
301. • Disponer de comunicación permanente con el
CECOP.
• Informar al mando de las medidas propuestas
y de la evolución de la emergencia.
302. Los grupos de acción son los responsables de la
estructura operativa bajo un único mandato.
Estos grupos de acción están formados por las
estructuras operativas ordinarias con
funciones específicas y de carácter
permanente. Los distintos grupos de acción
que van a intervenir en la emergencia son los
siguientes:
303. • Grupo de especialistas sanitarios.
• Grupo de intervención.
• Grupo de asistencia técnica.
• Grupo de logística.
• Grupo de orden.
304. IMPORTANTE
En una catástrofe, también intervienen como
grupo especial, personal judicial, encargado
entre otras cosas de la identificación y
custodia de las victimas, diligencias periciales,
análisis de la situación, elaboración del censo
de personas heridas y fallecidas, etc.
305. Como principales cometidos del mando en las
situaciones de emergencia destacan:
Reconocimiento y fortalecimiento de los
puntos débiles. En esta función el jefe de
cualquiera de las organizaciones intervinientes
controlará aquellas situaciones más inseguras
de la operativa, fortaleciéndolas en la medida
de lo posible.
306. Buscar acuerdo en las tareas de planificación.
El objetivo es que todas las organizaciones
participantes intervengan en la planificación
de las tareas y así proporcionar la entrega de
competencias.
307. Establecer un tiempo de actuación.
Planificar los recursos disponibles en función del
tiempo (alimentos, combustible, suministros
médicos, etc.).
308. Uso cotidiano de los elementos y medios
asistenciales.
La opción que garantiza un uso adecuado de
estos medios es la utilización de los mismos
en asistencias convencionales. De esta forma,
no se generará ningún problema de uso a la
hora de su aplicación.
309. A nivel del mando sanitario, las
responsabilidades del médico o enfermero
que asume el puesto en una zona de
catástrofe son las siguientes:
• Encontrarse en el Puesto de Mando.
• Organizar al personal sanitario para realizar las
tareas de asistencia y clasificación.
• Gestionar el área de carga de unidades
móviles asistenciales y recursos aéreos.
310. De forma concreta, el mando sanitario realizará
las siguientes funciones:
• Ejercer la jefatura sanitaria y establecer su
puesto de mando.
• Controlar las comunicaciones entre las
distintas organizaciones intervinientes.
• Identificación de zonas para el despliegue
sanitario y su sectorización.
311. • Establecer el área para la noria de evacuación
de heridos.
• Coordinar el Puesto de Mando Sanitario
(PMSAN).
• Organizar las tareas asistenciales y de
clasificación de heridos.
• Disponer de los recursos de apoyos.
• Dimensionar el suceso y detectar los
problemas y puntos frágiles.
312. • Gestión instantánea de la información.
• Nombrar y asignar un director de socorros
médicos en el área de salvamento.
• Realizar las funciones de director de socorros
médicos cuando este no haya sido designado
o se estime que no es necesaria su
participación.
313. • Organizar el circuito de evacuación entre el
Puesto Sanitario Avanzado y los hospitales de
referencia en relación al número de camas
disponibles.
• Garantizar y coordinar las evacuaciones
sanitarias entre el Puesto Sanitario Avanzado y
los hospitales.
• Avisar sobre problemas locales en la zona del
siniestro (accesos complicados, inundaciones,
etc.).
314. • Asignar funciones al personal sanitario.
• Solicitar y garantizar el suministro de
materiales y medicamentos.
• Organizar al resto de personal sanitario
interviniente.
315. En una catástrofe de gran magnitud van a
intervenir también diferentes mandos
subordinados a las ordenes del mando
principal. Estos mandos entre otros son los
jefes adjuntos, jefe de triaje, jefe de
evacuación y director de socorros médicos.
316. Las funciones a realizar por parte de los jefes
adjuntos serán aquellas que reciban de las
órdenes otorgadas por el mando superior y
auxiliar al jefe médico del Puesto Sanitario
Avanzado.
317. El jefe de triaje tendrá entre sus funciones:
• Realizar el triaje.
• Etiquetar a cada víctima con la tarjeta de color
correspondiente.
• Informar al jefe médico sobre la clasificación
de los pacientes (aquellos que requieran
prioridad inmediata, número de fallecidos,
etc.).
318. • Una vez realizado el triaje, prestar labor
asistencial.
• Todas las funciones que sean ordenadas por el
jefe médico del Puesto Sanitario Avanzado.
319. Las funciones del jefe de evacuación van a ser
las siguientes:
• Determinar e identificar aparcamientos y
puntos de evacuación.
• Señalizar las rutas de acceso y salida.
• Clasificar los medios aéreos y terrestres en
función de las posibilidades de evacuación.
320. • Comprobación de la clasificación de los
pacientes.
• Ordenar el embarque de los pacientes.
• Registrar a los pacientes evacuados.
• Informar al jefe médico del Puesto Sanitario
Avanzado de la evacuación.
321. En referencia a las funciones del director de
socorros médicos en la zona de salvamento,
estas son:
• Calcular el número de víctimas y situación
crítica de las mismas.
• Detección de problemas específicos de la zona
como desastre biológico, nuclear, químico, etc.
322. • Solicitar nuevos medios materiales y
humanos.
• Gestionar la medicación de la asistencia.
• Gestionar la evacuación de las camillas.
• Establecer comunicación por diversos medios
con el jefe médico del Puesto Sanitario
Avanzado.
323. Dotación general
En el Puesto Sanitario Avanzado se van a
controlar por parte de un médico
especializado en catástrofes las distintas
actividades asistenciales que se desarrollen en
la zona a asistir.
324. Al requerir una catástrofe equipos
multidisciplinares debido a las circunstancias
de esta, el Puesto Sanitario Avanzado podrá
coordinar los servicios contra incendios,
salvamento y Protección Civil, integrados por
personal sanitario cualificado para la atención
de emergencias a nivel extrahospitalario.
325. Otro de los instrumentos de los que debe estar
dotado un mando para poder realizar la
coordinación sanitaria es contar con un
manual de procedimientos para catástrofes,
donde queden recogidas todas las situaciones
posibles de la futura intervención.
326. El ser conocedores de lo que ocurre es
fundamental para poder optar a la resolución
del problema, sin dejar de tener en cuenta
que la mayoría de las catástrofes evolucionan
y requieren de la obtención de datos de forma
activa y contrastada. Solo de esta forma se
podrán establecer medidas paliativas a la
crisis.
327. La información más relevante debe estar
relacionada con:
• Tipo de catástrofe (terremoto, inundación,
incendio, explosión nuclear, etc.).
• Cálculo aproximado del número de
accidentados para poder establecer la
cantidad de recursos humanos y materiales de
los que se va a disponer.
328. • Tipología de las víctimas (politraumatizados,
quemados, embarazadas, pacientes
pediátricos, etc.).
• Localización de la zona asediada por la
catástrofe para poder determinar los recursos
de rescate más idóneos en la actuación
(aéreos, marítimos, terrestres, etc.).
329. • Disposición local de suministros médicos,
humanos y materiales.
• Condiciones climatológicas y su mejoría o
evolución desfavorable con respecto a la
población afectada.
330. Para poder resolver todas estas situaciones sin
obstáculos, hoy en día la mayoría de los
mandos ejercen su control desde puestos
móviles de mando avanzado de emergencias.
331. Estas unidades permiten el desplazamiento
rápido a la zona de la crisis a intervenir y
establecer un Puesto de Mando dotado de las
tecnologías más modernas de comunicación,
visualización, cartografías por GPS, cámaras,
radiocomunicaciones y telecomunicaciones en
sus vertientes aéreas, marítimas, analógicas o
digitales.
332. Resumen
Las distintas estructuras asistenciales eventuales
que van a proporcionar apoyo asistencial a las
víctimas de una catástrofe son los hospitales
de campaña, el Puesto Médico de Evacuación
y el Puesto Sanitario Avanzado.
333. Todas estas organizaciones, con sus despliegues
correspondientes, buscan un objetivo común:
rescatar a los lesionados con el mínimo de
secuelas posibles y generar su posterior
traslado a un centro sanitario en las mejores
condiciones posibles.
334. Cada una de estas estructuras intervinientes
junto con otras se concentrarán en este
esfuerzo, desempeñando cada una el rol que
en la planificación ya establecida se les haya
asignado. Estas estructuras serán las
encargadas de recepcionar los elementos
necesarios para gestionar la crisis.
335. La logística en catástrofes implica establecer un
puesto de mando inicial que sea el encargado
desde un principio de que el resto de
objetivos se vayan ejecutando según lo
previsto. El mando será el encargado de
ejecutar las acciones sobre el coordinador y
este las ejercerá sobre los jefes de cada una de
las instituciones representadas.
336. Las tareas de asistencia deben ser asimiladas
dentro de un esfuerzo coordinado entre las
diferentes instituciones actuantes que
intervienen en las emergencias colectivas o
catástrofes.
338. Introducción
El objetivo prioritario en la gestión de una
catástrofe no es disponer de un maletín de
urgencias a mano, sino desarrollar la
respuesta más adecuada ante desastres de
magnitudes importantes.
339. La atención médica en aquellas situaciones
donde se generan víctimas con multitud de
patologías requiere de la utilización de diverso
material de apoyo sanitario que preste
asistencia técnica a las víctimas que lo
requieran. Estos materiales van a ser de apoyo
respiratorio, circulatorio, de inmovilización, de
traslado de heridos, etc.
340. En los siguientes apartados se va a desarrollar
una relación aproximada del material
adecuado para conseguir prestar asistencia
prehospitalaria en situaciones de emergencia.
341. Material sanitario de primera intervención.
Relación de material
La víctima de una catástrofe por lo general es un
paciente con politraumatismo que va a
necesitar en su asistencia extrahospitalaria
material de apoyo destinado al rescate y a la
inmovilización, así como material de apoyo
respiratorio y circulatorio.
342. Material de apoyo al paciente politraumatizado
Férulas espinales
Inmovilizador de cabeza
Férulas simples
Férulas de tracción
Collarín cervical
346. Material sanitario de primera intervención.
Dotación tipo por área geográfica
Para dotar a los equipos en distintas áreas
geográficas se valorará el mapa crítico de la
zona afectada y se revisará la existencia o no
de desastres previos. Analizar diferencias
entre distintas regiones puede permitir
identificar diversas necesidades y conductas
sociológicas o psicológicas.
347. Para mayor eficacia en la asistencia médica, se
debe disponer por equipo de rescate de
material suficiente para asistir a pacientes con
compromiso vital de sus funciones. Alrededor
de unas 30 víctimas por cada equipo de
rescate.
Si la suma de víctimas aumenta
exponencialmente se recomienda multiplicar
de forma proporcional los distintos equipos de
rescate, adaptándose estos a la dimensión de
la catástrofe.
348. Algunas organizaciones e instituciones
dedicadas a las emergencias prehospitalarias
recomiendan tener organizado el material de
catástrofe a lo largo de los territorios
nacionales para poder ser usado en caso de
absoluta eventualidad.
349. Material sanitario de primera intervención.
Organización del material
La dotación sanitaria necesaria para atender una
catástrofe es transportada mediante arcones o
contenedores especiales. La organización
interna de este tipo de estructuras es a base
de separadores y dispositivos a modo de
bandeja, que posibilitan la agrupación
ordenada de los distintos materiales que
acoge.
350. En cada uno de estos arcones debe existir una
relación con el stock de material que cada uno
de estos contenedores presenta.
351.
352. La Organización Mundial de la Salud (OMS)
establece una codificación mediante letras y
colores a la hora de identificar los
contenedores y su contenido:
• Los contendores de color amarillo son de
exclusivo uso pediátrico.
• Los contenedores de color azul son los
encargados de acoger el material de apoyo
ventilatorio (mascarillas, bombonas de
oxígeno, respiradores, etc.).
353. Los contenedores de color rojo van a disponer
de material de apoyo circulatorio (vías
venosas de acceso periférico y centrales,
trocar óseos, material de extracción
sanguínea, etc.).
Los contenedores de color verde irán destinados
al transporte de material de inmovilización
como férulas, vendas, dispositivos de
inmovilización, etc.
354. Los contenedores deben estar organizados de
forman que puedan ser desplazados
fácilmente por dos personas y que la dotación
por unidad o equipo tenga cobertura para
unos 25 o 30 pacientes en la zona de la
catástrofe.
355. Material sanitario de primera intervención.
Contenedores de transporte:
características generales de los contenedores
Los contenedores que van a acercar el material
sanitario a la zona de la catástrofe están
diseñados para transportar y almacenar
material de primeros auxilios.
356. Su fabricación es 100% en aleación de aluminio
de gran resistencia. Deben ser ligeros y
resistentes a la corrosión y a los golpes. Han
de ser estancos al agua y al polvo,
impermeables e ignífugos.
357. La superficie no es lisa, debe estar adaptada
para permitir la apilación de distintos
contenedores mediante un sistema
macho/hembra. La tapa frontal puede ser
extraíble y los cierres giratorios deben estar en
un número de cuatro y asegurar una fácil y
cómoda apertura. Las asas deben presentar
un resorte por cada lateral; en total, cuatro
asas.
358. Relación de material de uso individual
El material de uso individual en la prestación
sanitaria va a ser el de apoyo circulatorio,
respiratorio, de estabilización y de
diagnóstico.
359. Material de apoyo circulatorio
El objetivo de este material es poder obtener
rápidamente un acceso venoso periférico o
central, y así administrar fluidoterapia
correctora y tratamiento médico de diversa
índole.
360. • Jeringas
• Agujas
• Gasas y vendas
• Apósito adhesivo
• Pistola de punción
intraósea
• Catéteres venosos
periféricos
• Catéter venoso central
• Compresor venoso
• Llave de tres vías
• Fluidoterapia
• Desinfectantes
• Esfigmomanómetro
• Contenedores para
objetos punzantes
• Caja de medicación
361. Material de apoyo respiratorio
El objetivo fundamental de los siguientes
dispositivos es proporcionar oxígeno para
poder manejar aquellas situaciones donde se
evidencie un déficit del aporte de oxígeno a
los tejidos (hipoxia).
362. • Resucitador ventilatorio manual
• Botellas de oxígeno
• Mascarillas y gafas de oxígeno
• Material para intubación
• Trocar torácico
• Kit cricotiroideo
• Cánula orofaríngea
• Sondas de aspiración
363. • Material de control de hemodinámica
El empleo de los siguientes dispositivos permite
obtener parámetros esenciales para la ayuda
del diagnóstico y tratamiento de diversas
patologías.
365. Relación de elementos de protección individual
Para prevenir accidentes relacionados con la
asistencia sanitaria en catástrofes se han de
cumplir una serie de recomendaciones que
van a minimizar o anular el riesgo de padecer
algún tipo de incidente.
366. Elementos de protección
Los elementos de protección individual más
usados en el medio extrahospitalario son:
guantes, gafas, cascos y mascarillas.
367. Indumentaria
La uniformidad y los EPI están sujetos en su
fabricación a unas normas tecnológicas
creadas por Comités Técnicos de
Normalización, con el objetivo final de otorgar
seguridad a los productos y establecer
obligatoriedad de cumplimiento a dichas
normas.
368. • Chaleco acolchado de alta visibilidad con
colores llamativos y bandas reflectantes
• Cazadora y pantalón bicolor con cintas
reflectantes de 6 cm a la altura del tórax y
cintura.
• Calzado de seguridad con membrana
impermeable y transpirable.
• Riñonera de emergencias para albergar todos
los accesorios que necesita el personal de
emergencias para la práctica asistencial.
369. Resumen
La atención sanitaria en aquellas situaciones
donde se generan víctimas con multitud de
patologías requiere de la utilización de diverso
material de apoyo sanitario que preste
asistencia técnica a aquellas víctimas que lo
requieran.
370. Estos materiales van a ser de apoyo respiratorio,
circulatorio, de inmovilización, de traslado de
heridos, diagnostico, etc.
Como característica general este material ha de
ser altamente tecnológico, fácilmente
transportable a través de los distintos medios,
sencillo y versátil.
371. Para poder utilizarlos de forma correcta se
recomienda el uso de estos en la práctica
sanitaria diaria y la realización de simulacros
periódicos que proporcionen información
sobre los errores cometidos.
372. Para evitar accidentes profesionales tanto en el
uso de estos materiales de apoyo como en el
resto de la atención sanitaria, se hace
necesario trabajar de forma complementaria
con unos Equipos de Protección Individual
(EPI) que protejan o al menos minimicen las
posibles consecuencias derivadas de las
actividades sanitarias de riesgo.
373. Estos equipos van a ser desde la propia
uniformidad de los rescatadores hasta los
guantes, gafas y cascos protectores,
mascarillas, etc.
375. Introducción
Un desastre natural pone en peligro la salud del
hombre y del medioambiente. La escasez de
alimentos y agua en el periodo posterior al
desastre se debe principalmente a la
destrucción de los almacenes distribuidores
de comestibles en la zona afectada
376. a la fractura de las estructuras locales y, de
manera muy importante, a los trastornos
ocasionados en las cadenas de distribución,
que impiden la llegada de alimentos y
suministros asistenciales.
La actuación tardía en una catástrofe de grandes
dimensiones puede resultar perjudicial para el
estado nutricional e higiénico de una
población.
377. Para evitar la aparición de enfermedades en la
población originadas por este tipo de
fenómenos se torna necesario contar con
unos equipos logísticos encargados de
proporcionar el abastecimiento de agua de
forma controlada, estableciendo un
procedimiento de calidad para el agua a
ingerir y para la destinada a la higiene
personal.
378. De igual forma, es imprescindible hacer llegar a
la población alimentos básicos, controlando
en todo momento su procedencia, almacenaje
en condiciones adecuadas y posterior
distribución a la población.
379. Es fundamental que la empresa o institución
encargada de suministrar y gestionar estos
bienes en la zona de la catástrofe los reparta
en un volumen adecuado y con la suficiente
calidad como para garantizar la supervivencia
y el bienestar de la población.
380. Gestión del agua
En las zonas cercanas a la catástrofe es
imprescindible poder contar con agua potable
para la bebida, la cocina y el lavado. Para
evitar enfermedades y posteriores epidemias,
se deben promover medidas de higiene
mediante mensajes claros y comprensibles.
381. La planificación, coordinación, puesta en marcha
y mantenimiento de este tipo de proyectos
suele ser a través de una organización
humanitaria especializada.
Estas organizaciones utilizan unos estándares de
aprovisionamiento a nivel internacional donde
se establece que el estándar hídrico de más
adecuado es el de 15 a 20 litros de agua al día
para beber, cocinar y realizar la higiene
personal.
382. Técnicamente se establece un caudal de agua de
0’125 l/s en cada punto de abastecimiento,
existiendo uno de estos puntos por cada 250
personas.
383. Para abastecer a la población de agua se deben
entregar y disponer enseres y bidones para
poder recogerla y almacenarla. Así, se debe
entregar a cada familia dos recipientes de 10-
20 litros para recoger el agua y de mayor
volumen para poder almacenarla. Estos deben
ser higiénicos y ergonómicos.
384. Cuando la necesidad de agua es para realizar la
higiene y aseo personal, esta debe conducirse
a zonas donde los damnificados puedan
disponer de cierta intimidad. Es probable que
este tipo de instalaciones estén centralizadas
para todo el campamento de refugiados junto
con las instalaciones dedicadas al lavado de
utensilios de cocina.
385. El diseño, número y la ubicación de estas instalaciones
estará relacionado en función de la magnitud de la
catástrofe.
El agua que va a ser suministrada puede proceder de:
• Aguas superficiales (ríos, lagos, estanques, embalses,
etc.).
• Aguas subterráneas (pozos, manantiales,
perforaciones, etc.).
• Aguas de lluvia.
386. Salvo que el agua sea transportada por gravedad
como en el caso de los manantiales, la
mayoría de las veces se va a requerir el
empleo de bombas manuales o automáticas, y
así poder extraer el agua de pozos o
excavaciones con el fin de llevarla hasta
contenedores desde donde será distribuida.
387. Existe gran variedad de ellos en el mercado,
pero uno que se emplea con bastante
frecuencia, sobre todo en las primeras horas
del siniestro, son los denominados burbujas o
bladders, que son bolsas plásticas de gran
flexibilidad y muy resistentes a las
perforaciones y con capacidad de almacenaje
desde 500 a 50000 litros.
388. Para conseguir unas características
fisicoquímicas y microbiológicas aceptables
del agua se han de cumplir los siguientes
indicadores:
Calidad microbiológica del agua.
Desinfección del agua.
Sabor del agua.
389. Para conseguir unos niveles óptimos de calidad
en las características fisicoquímicas y
microbiológicas del agua a distribuir, se debe
hacer un exhaustivo análisis del agua.
Turbidimetría
Clorimetría
PH-metría
Análisis bacteriológicos
390. Gestión de alimentos
Evaluar la situación alimentaria de la población
que ha sufrido la catástrofe es fundamental
para poder establecer el tiempo de respuesta
y distribución de los alimentos. Este tiempo
deberá ser precoz si se detectan núcleos
poblacionales con malnutrición.
391. Los objetivos prioritarios en la solución de
problemas nutricionales van a ser suministrar
los alimentos de forma inmediata en aquellas
situaciones de urgencia, hacer un cálculo
inicial de las necesidades nutricionales de la
zona y localizar almacenamientos para los
alimentos y poder distribuirlos
posteriormente.