El documento describe la evolución del arte desde sus orígenes hace 40000 años hasta la actualidad. Explica que el Homo sapiens desarrolló un sentido mágico del arte y utilizó las paredes de las cuevas y su propio cuerpo como los primeros soportes para la pintura. También menciona algunas de las cuevas más importantes que contienen ejemplos del arte rupestre prehistórico, como Altamira y Lascaux.