Los padres recuerdan cómo se celebraba tradicionalmente el 25 de Mayo en las escuelas y en las familias, con actos en los que los estudiantes actuaban y bailaban, desfiles patrios, y reuniones familiares con comidas típicas como locro y empanadas. Luego de los actos escolares, el ejército repartía chocolate caliente y bollitos a los estudiantes.
Planificación Sobre el Virreinato del Rio de la PlataPriscila Pontetto
planificacion para didáctica de las ciencias sociales sobre el virreinato del rio de la plata. para trabajar con primer grado de la primaria. esta planificacion desarrolla el contenido: diferencias en las sociedad colonial.
Presentación elaborada por los estudiantes de la EGB UNS de Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, para la edición 2010 de Aulas Unidas Argentina, un proyecto colaborativo de Educared.
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Instrucciones del procedimiento para la oferta y la gestión conjunta del proceso de admisión a los centros públicos de primer ciclo de educación infantil de Pamplona para el curso 2024-2025.
Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3.pdfsandradianelly
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1. Colegio
La Inmaculada
Los papás
nos cuentan . . .
2. Mi mamá me contó que a la mañana iban al acto y al mediodía comía toda la familia junta en la casa de su
abuelo. Ella actuó y me dijo que una vez le tocó hacer de negrita a pesar de que es rubia. Felicitas, 6º Año.
Esta es una foto de mi mamá cuando tenía 11 años. En la escuela San Vicente de Paul hizo una coreografía con
palos y vestidas de celeste y blanco. Según mi abuela le salió muy bien y según ella también. Tomás, 6ºAño
3. Era por el año 1975, iba al Instituto Canossiano de Punta Alta, ese día concurríamos al colegio para el acto, yo
estaba en el coro de la escuela y cantábamos todas las canciones desde el Himno hasta las canciones que preparábamos
para ese día. Tres semanas antes del evento todos los días nos citaba la profesora de Música y practicábamos y, hasta que
no salía bien no nos dejaba ir. Pero después todos nos aplaudían emocionados. Ese día el 25 venía el intendente, los
padrinos, y terminado el acto nos repartían bollitos con chocolate caliente. Otro recuerdo que tengo es que cuando el
colegio participaba en el desfile cívico-militar nos sacaban a practicar por las calles del colegio y hacía frío y teníamos el
uniforme del colegio que era una jumper gris, medias y una camisa blanca y teníamos mucho frío. Pocas veces me podía
disfrazar ya que siempre el coro participaba de los eventos, pero cuando mi grado le tocó actuar, mi mamá me hacía los
trajes y todos era festejo, la nena actuaba.
Mi papá recuerda haber actuado de French y Berutti, alguna vez. Recuerda haberse puesto alguna galera alta tipo caballero
de época. Agustín, 6º Año.
Lo que recuerdan mis padres, tal vez no está tan cargado de pasión. Mi mamá recuerda haber actuado muchas veces de
negrita mazamorrera, de haber leído textos patrios y de haber desfilado junto a todos sus compañeros por las calles de la
ciudad con sus escarapelas y banderas recordando esa fecha. Matías, 6º Año.
Mi papá (1944) recuerda que cuando llegaba el día había que levantarse temprano porque era un acontecimiento
tan importante para el alumno que nuestras mamás nos vestían para que luciéramos impecables, y obviamente jamás nos
olvidábamos de colocarnos la escarapela, que cuanto más grande era más nos gustaba. Al llegar a la escuela era como
compararla como un ejército: todos los alumnos muy bien formados y alineados, nuestra señorita observaba que
estuviéramos bien parados y que no conversáramos; luego venía el Himno y a cantarlo con orgullo, y con el corazón porque
así nos enseñaron en nuestra escuela día a día y así lo aprendimos a sentir. Después recuerdo los actos donde observaba
como mis compañeros actuaban, también ver como lucían los abanderados y escoltas en el escenario.
Por último, venía la premiación para todos aquellos que habían concurrido al acto…. A la salida de la escuela, nos esperaba
una cocina de campaña con soldados del ejército, que gentilmente nos ofrecían a cada chico un bollito y un vasito de
chocolate que contento nos sentíamos cuando todo esto concluía y regresábamos caminando a casa para contarles a
nuestros padres todo lo acontecido en el acto.
Mi mamá (1971): recuerdo con nostalgia los días vividos en mi escuela primaria, era la escuela de mi barrio…. Cuando se
celebraba una fiesta patria, así como el 25 de Mayo, todos concurríamos con mucho respeto y patriotismo al Acto de
Celebración. En aquella época todos los actos se hacían el mismo día, no importaba si era sábado o domingo.
Un 25 de Mayo, tuve el honor de representar a mi querida escuela, dado que había sido elegida escolta de la Bandera. Esa
vez, tuvimos que ir a una plaza, y compartimos una mañana al aire libre. Al finalizar el acto, el Batallón del Ejercito
repartió a los presentes chocolate caliente!
También llega a mi memoria, como nos disfrazábamos para aquellos actos… algunos de dama antigua, otros de negritas, era
muy divertido ver cómo nos “ensuciábamos” la carita con corcho quemado!
En otra ocasión de desfile… en una mañana muy fría, festejamos el “25 de mayo”, desfilando por “la Avenida Alem”,
concurrió muchísima gente! En el desfile participaban muchos sectores de la ciudad: las escuelas, las peñas folclóricas,
entidades civiles, y por supuesto era emocionante ver marchar a nuestros soldados, con sus uniformes impecables,
acompañados de la banda y mostrándonos sus vehículos y armamentos.
Fue muy lindo recordar los días de mi infancia. ¡Gracias por permitirnos volver a esos momentos! Fiorella, 6º Año.
4. Mi mamá de mazamorrera y de dama antigua, en el acto del 25 de mayo, así los alumnos de las
escuelas festejaban el 25 de Mayo, el acto se realizaba el mismo 25 de mayo, siempre a la mañana, los
alumnos que iban a la tarde, también iban a festejar a la mañana les daban “bollitos” y chocolate.
Abril, 6º Año.
El quinto cuerpo de ejército era el padrino de la escuela de mi papá escuela Nº1 “Nicolás Avellaneda”.
Iban con una olla gigante con ruedas con adentro el chocolate, era como él de la foto. Lara, 6º Año.
5. Mi mamá recuerda que iba a los actos del 25 de mayo a la mañana temprano en la escuela y cuando terminaban
les ofrecían chocolate caliente y para comer bollitos.
Mi papá recuerda que los actos se hacían a la mañana temprano en el patio. Había que ir impecablemente vestidos, el
guardapolvo planchado, peinados y con la escarapela. Y a la hora que terminaba, el Ejército regalaba chocolate caliente y
bollitos. También fue a ver desfiles militares y cívicos en la avenida Alem de Bahía Blanca, se reunían muchas personas y
todos con banderas Argentinas.
Mi mamá vivía en el campo e iba a una escuela rural. Un 25 de mayo fue la banda y el ejército militar. La banda
tocó marchas, himnos y canciones patrias. También los militares y otras personas llevaban ollas gigantes llenas de
chocolatada que iban repartiendo a la gente…con bollitos para comer… Además, se acuerda de haber participado en un
desfile por el pueblo con todas las demás escuelas e instituciones cuando iba a secundaria; y de haber bailado en algún
acto. Camila, 6º Año.
6. Mis padres: Recordamos de los actos del 25 de Mayo de!810 tantos en las Escuelas Nº 6 y Nº 62 como que se
participaba en el escenario representando los hechos de la época colonial. Se cantaba el Himno Nacional respetándose el día
de fiesta Patria. La directora y maestra decían el discurso alusivo al festejo del 25 de Mayo de 1810. Actuaban distintos
grados refiriéndose todo sobre la fecha Patria. Algunos recitaban versos y otros cantaban disfrazados con ropa de la época.
Luego con la colaboración de las cooperadoras preparaban empanaditas de dulce de membrillo y chocolate. ¡Qué rico!
Facundo, 6º Año.
Mi mamá y mi papá me cuentan que en la escuela primaria se festejaba el 25 de Mayo con grandes actos. En ellos
se recreaban situaciones de la vida en la época colonial. Los chicos actuaban mostrando las costumbres de la época, las
vestimentas, las comidas y las distintas clases sociales. En todos los actos estaba el negrito, el vendedor de velas, el
vendedor de escobas, la señora con la ropa para lavar que llevaba en la cabeza, la vendedora de pasteles y mazamorra.
Además de actuar, algunos chicos leían poesías y pregones (que eran los más divertidos). También en los actos se
mostraban las danzas típicas de la época como el pericón, el gato y la chacarera. Generalmente, al final de los actos, los
chicos repartían a la gente presente pastelitos y empanaditas de dulce de membrillo. Mi papá cuenta que como su escuela
estaba apadrinada por la Marina, al finalizar el acto le daban a todos los alumnos bollitos y chocolate caliente, que
generalmente, lo repartían las mamás que formaban parte de la cooperadora de la escuela. Los actos se realizaban el día 25
de mayo, aunque fuera sábado o domingo todos concurrían a la escuela. En la escuela secundaria los actos eran más
sencillos y mi mamá tuvo que desfilar junto a sus compañeros en un desfile cívico militar que se realizó en la Avenida
Alem. Gianfranco, 6º Año.
Mi mamá recuerda haber actuado varios 25 de mayo en la escuela, representando a negritas sin dientes y
vendedores ambulantes. El SUM del colegio se decoraba con mucha anticipación con palomitas celestes y blancas que
hacían previamente. Ese día no había clases pero igual se concurría al acto escolar, y al igual que mi abuela, celebraban con
chocolate caliente al finalizar. En esos días recordaban en la escuela como se vivía en ese entonces, como se vestían, que
profesiones tenía la gente. A mi mamá le fascinaba la vestimenta de las damas de ese momento. En varias oportunidades se
pedía previamente llevar ese día pastelitos para compartir y ella le pedía a su abuela que se los preparara. También, ya más
grande, recuerda que en su casa se encargaba locro (comida típica) para almorzar ese día. Mi papá también tiene recuerdo
de los actos del 25 de mayo, ya que me cuenta que él siempre estaba listo para bailar el pericón (danza tradicional de la
época) y según cuenta todas las nenas querían ser su pareja de baile. Recuerda que se disfrazaba con galera y pantalón
negro, camisa blanca y bastón, muy elegante. Imanuel, 6º Año
7. Mi mamá Mabel iba a la escuela nº9 José Manuel estrada de la ciudad de Pehuajó es una escuela estatal. Allí los actos
se celebraban en el patio y cada grado preparaba su número. En esta foto mi mama está bailando el chamamé en la escuela
primaria. Juliana, 6º Año
En el acto del 25 de mayo todo el grado caracterizó a los vendedores ambulantes. Mi mamá tuvo que hacer de
negrita que vendía empanadas, le pintaron la cara con un corcho quemado, se puso una pollera roja a lunares blancos que
cosió su abuela y el peinado fue un rodete con un pañuelo de lunares. Brenda, 6º año
Mi mamá: “Durante toda mi etapa de la escuela primaria en los actos del 25 de Mayo me elegían para actuar. Recuerdo que la
escuela se decoraba con guirnaldas celestes y blancas y se le repartía escarapelas a la gente. En primer grado me disfrace de dama
antigua con una pollera, camisa con puntilla y peinetón. En otros años baile los bailes típicos, de esa época, el minué y el pericón.
Después de cada acto el ejército que también participaba de estos nos repartían bollitos con crema pastelera y chocolate caliente.
¡Riquísimo! Lourdes, 6º Año
8. Jorge, papá: “Yo me acuerdo que estaba vestido con un traje. Había compañeras vestidas de vendedoras de
mazamorras y otras vestidas de vendedoras de empanadas. “
Carina, mamá: “Yo me acuerdo que ensayaba para los bailes como el Pericón. Después del acto vendían empanadas y
dulces.”Agustina, 6º Año
Mis padres, me contaron que cuando ellos eran niños, esta fiesta la celebraban de forma distinta a la actualidad, mi
mama con sus hermanas desfilaban con ropa de época, y mis abuelos cocinaban asado, mi abuela preparaba pastelitos, para
la tarde. Además no faltaba una bandera Argentina en cada casa colgada.
En la escuela donde concurría mi papa tiene como padrinos el batallón de comunicaciones nº181, de Bahía Blanca y
recuerda con alegría que en esos años después del acto, invitaban con chocolate caliente y bollitos, preparados por los
soldados en las carpas de campaña en esas ollas gigantes. Recuerdo cuando en mi jardín
Actuaba y bailaba una danza folclórica muy alegre. Y en el feriado mi papá hacía asado y venían mis tíos mis abuelos y
primos.
Antes se hacían importantes desfiles callejeros, todos los chicos iban al colegio y hacían el acto ese mismo día.
En mi familia, todos nos juntábamos en la casa de mi abuela a comer comidas típicas por ejemplo el locro, asado o unas
ricas empanadas. Belén, 6º Año
En la época que mi mamá iba a la escuela primaria, el 25 de Mayo se festejaba en la escuela de la siguiente manera:
repartía chocolate caliente y pastelitos o facturas a todo el colegio. A veces iba a la escuela la banda militar a tocar los
himnos y canciones patrias. Había sorteos de tortas y de plantas. Les repartían alfajores y golosinas para llevar a la casa.
Francisco, 6º Año
9. Hace muchos años atrás el 25 de Mayo, era una fiesta patria muy celebrada. La plaza se llenaba de gente que asistía
al desfile cívico-militar con gran entusiasmo. Allí las familias concurrían desde temprano, a pesar de las altas temperaturas,
para disfrutar una jornada muy especial. Era característico escuchar a la banda del Ejército y saborear un rico y humeante
chocolate con bollitos. Era una cita obligada para toda la familia. La gente asistía con entusiasmo, luciendo ``con
orgullo´´ la escarapela celeste y blanca que no podía faltar.
En las escuelas los actos también tenían un gran despliegue: los niños asistían ``impecables´´ en compañía de su familia
.Al concluir estos era común participar de una ``feria de platos típicos de la época ´´: pastelillos, empanadas, tortas
fritas, entre otros. Con el tiempo este entusiasmo se fue perdiendo y los festejos pasaron a ser menores. Sería bueno que a
partir del Bicentenario se retomara la antigua costumbre de darle a esta fecha patria el lugar que merece y que las nuevas
generaciones aprendan a recordarla con patriotismo y entusiasmo. Daniel, 6º Año
Gastón, mi marido y yo íbamos a la misma escuela primaria, la N° 22 “España” de ésta ciudad. Allí el 25 de mayo
se hacía primero el acto académico tradicional y luego empezaba el verdadero festejo! Los papás de la Asociación
Cooperadora y las maestras organizaban una “feria criolla”, en donde se vendían platos típicos: choripán, empanadas,
pasteles, churros, tortas fritas, etc. El dinero que se recaudaba servía para mantener el edificio de la escuela. En esta
celebración también participaban peñas y grupos de la comunidad que mostraban su arte con bailes y cantos.
Aunque todo esto se hacia el mismo día del feriado (el 25), padres y chicos concurríamos en su totalidad al festejo, y lo
hacíamos con nuestras mejores ropas, las maestras de tacos altos, las mamas de peluquería, los papás de pantalones bien
planchados y los niños y niñas de guardapolvos y escarapelas impecables. Todos participábamos porque lo sentíamos
importante, no porque fuera una obligación, íbamos a una fiesta: el cumpleaños de la patria! Alejo, 6º Año.
Mi mamá Mirta, recuerda que en los años de su etapa escolar, concurría a los festejos patrios, el mismo día en que se
conmemoraba, sea sábado o domingo. Ella me cuenta que le encantaba actuar de mazamorrera, recuerda con nostalgia
como le pintaban la cara con corcho quemado para actuar de “negrita”. Al final de cada acto los adultos repartían
empanaditas de dulce de membrillo, pasteles y el tradicional chocolate. Sofía, 6º Año
10. Mi familia el 25 de Mayo se reunía a comer siempre un rico asado con empanadas criollas de entrada y
pastelitos de membrillo. Ellos se divertían festejando juntos, pero esta tradición se fue perdiendo cuándo mis tíos y mi
mamá se fueron independizando. Ahora no lo festejamos, solo recordamos que el 25 de Mayo es una fecha patria de
nuestro país. Camila, 6º Año.
Cuando mi mamá era chica los actos patrios se celebraban como el 25 de mayo con un acto. Este se realizaba en
la plaza principal de la ciudad donde se reunían las diferentes escuelas con sus abanderados y los dirigentes políticos más
importantes. Todo luego del desfile .Esta era la forma en la que celebraba las escuelas, si bien la familias también
concurrían. En las casas se realizaban comidas típicas de la época como por ejemplo: locro, empanadas, pastelitos etc.
Ahora es muy diferente prácticamente no se recuerdan las fechas patrias importante. De esta manera perdemos nuestra
identidad nacional.
Mi papá, cantó y zapateó malambo.
Braian, 6º Año.
11. Cuando mis papás eran chicos el 25 de mayo se festejaba haciendo actos en el colegio. Generalmente en el colegio
hacían pastelitos fritos y los papas compraban para llevar a la casa después del acto. En los actos se bailaba el minué y se
decoraba el patio del colegio con banderas de Argentina.
Mi papá me contó que cuando era chico las fiestas patrias eran inamovibles. El 25 de mayo solía haber desfiles
cívico – militares y tocaba la banda en la plaza. Marina, 6º Año.
Mis padres me cuentan que el 25 de mayo se festejaba colocando banderas argentinas en los edificios, plazas, con
actos conmemorativos a ese día. El 25 de mayo también se reunían en familia a comer pasteles, empanadas y locro, el cual
era traído por los militares en los tanques del ejército y era vendido a las familias. Facundo, 6º Año.
Mi mamá y mi Papá nacieron en el año 1973. Ellos recuerdan que asistían al colegio para celebrar el Acto, en el
mismo generalmente se representaba la sociedad de esa época e iban disfrazados de personajes como “dama antigua”,
“caballeros”, “vendedor de velas” o “vendedor de empanadas”. En algunas ocasiones, el colegio participaba del desfile cívico-
militar de la ciudad. En sus casas se comía Locro o comidas típicas argentinas. Sofía, 6º Año.
Mi papá y mamá celebraba el 25 de Mayo participando del acto escolar, donde se hacia un breve homenaje en el que
los alumnos actuaban representando algunos momentos ocurridos en la revolución de mayo. Luego compartían con las
familias empanadas, pastelitos. Al finalizar el escolar iban al acto central en la plaza principal de su ciudad
y luego desfilaban junto a los otros Colegios, Boy Scout, Bomberos Voluntarios, etc. Lo presenciaban el
Intendente junto a las autoridades civiles y militares de la ciudad. Lucas, 6º Año.
12. Mi mamá: Yo recuerdo los 25 de mayo como una gran fiesta. Debía ir a la escuela ese mismo día. Toda la familia
podía participar de los festejos porque ese día nadie trabajaba. Los negocios y almacenes permanecían cerrados.
Íbamos vestidos con el guardapolvo bien limpio y planchado, medias blancas tres cuartos, zapatos bien lustrados , el
pelo atado o con una vincha blanca y recuerdo que no podíamos llevar campera aunque hiciera mucho frio.
Cuando llegábamos a la escuela formábamos muy derechos y cantábamos el himno con mucho respeto. Después algunos
grados participaban con poesías, canciones, representaciones y bailes. La cooperadora organizaba venta de platos para
recaudar dinero para hacer obras en la escuela.
Mi papá: Recuerdo los actos del 25 de mayo que comenzaban muy temprano en la mañana, en la escuela nº 6 de la calle
Caronti. Se formaba en el salón de actos y los alumnos nos poníamos de menor a mayor formando largas filas. Debíamos
asistir con guardapolvo blanco y con escarapela. Después de izar la bandera y cantar el Himno Nacional las maestras leían
palabras alusivas. Luego había representaciones de la época colonial donde los alumnos se disfrazaban de vendedores
ambulantes y de damas antiguas. Terminado el acto volvíamos a nuestras casas para almorzar en familia y por la tarde
salíamos a pasear en auto. Francisco, 6º Año.
Mi papá como abanderado en el acto del 25 de
Mayo de 1974. Escuela N º 6 “Julio Argentino Roca” de Bahía Blanca.
Se puede observar la correcta vestimenta.
13. Billiken 1.970 EGB Primer Ciclo 1997
Mi papá vivía en Adolfo González Chávez. Iba a un acto de conmemoración en la escuela nº 20.Luego concurrían al
Tedeum (Conmemoración religiosa). Después asistían a la plaza e izaban el pabellón nacional y hacía uso de la palabra el
señor intendente y alguna docente. Una vez terminado el acto de la plaza, se dirigían a la municipalidad donde les servían
una taza de chocolate caliente.
Cuando mi mamá todavía era niña, festejaba el 25 de mayo yendo a la plaza. En la plaza, el intendente de la ciudad hacía
un discurso y luego hacían desfiles en la calle. Las colectividades extranjeras, pasaban con sus trajes típicos. Luego de ir a
la plaza ellos hacían un acto en su colegio. Allí bailaban el pericón, zambas y chacareras. Mi mamá tenía un vestido de
paisana. Después de la fiesta, les repartían bollitos y chocolate caliente. En la ciudad, todas las ventanas lucían la bandera.
Lucía, 6º Año.
Mi papá Martín: “Iba a todas las fiestas que se hacía en el colegio y en la ciudad, y me ponía escarapela, y algunas
veces para los actos iba disfrazado de gaucho”.
Mi mamá:“Al colegio íbamos todos disfrazados para el acto, y llevábamos comida para actuar y después comerla en el
aula”. Ailén, 6º Año.
14. Mi mamá de chica festejaba el 25 de Mayo yendo a un festival militar; también en el colegio su maestro buscaba
una foto en un manual y ella la dibujaba en el pizarrón.
Mi papá cuando era chico festejaba el 25 de Mayo yendo a un desfile donde le daban chocolate caliente con facturas;
también en uno de ellos, él dijo un poema para la Patria. Solana, 6º Año
Mi mamá cuenta que en los actos del 25 de mayo se reunían en la puerta del Teatro Municipal. Allí se realizaba el
acto conmemorando la fecha patria. La Banda del Ejército tocaba el Himno Nacional y todos lo cantaban con orgullo. Luego
desfilaban por la Avenida Alem.
Mis papás recuerdan que el 25 de mayo era un día muy especial. Durante toda la semana se trabajaba en la
escuela para el acto. Porque aunque no les tocar actuar, ensayaban cómo iban a desfilar dentro de la escuela cada uno de
los grados. También se preparaban láminas y adornos para decorarla, sobre todo el salón de actos. Ese día, el 25 de mayo,
iban al acto aunque fuera sábado o domingo. Les resulta inolvidable… las calles desiertas por el feriado, muchísimo frío. No
les permitían llevar campera, así que debajo del guardapolvo llevaban mucha ropa, (camiseta, polera, sweater), las nenas
tenían que ir con pollera y medias tres cuarto blancas. Y cintas blancas para el pelo. El guardapolvo impecable, sus mamás
se lo lavaban y planchaban el día anterior y ellos mismos se lustraban bien los zapatos. Y tenían que tener mucho cuidado
de no olvidarse la escarapela, no los dejaban entrar a la escuela sin ella, si no la llevaban tenían que volver a sus casas o
comprar una en el kiosco. Lo que más les gustaba del acto era que al finalizar, los padrinos de la escuela (que eran
militares) les servían chocolate con facturas. Después del acto iban al desfile que se hacía en el centro de la ciudad. Y
siempre alguien de la familia se quedaba para preparar el asadito. Ellos no tienen fotos de ningún acto, porque a ninguno
de los dos les gustaba actuar. Tobías, 6º Año.
El 25 de Mayo iban a la fiesta con sus padres, al acto que empezaba a las 9 hs. una vez formados los alumnos y
con la presencia de seis soldados y un músico que tocaba el clarinete, entraban, el abanderado y sus escoltas e izaban el
Pabellón Nacional. A continuación se entonaban las estrofas del Himno Nacional, después la directora y un alumno de sexto
grado, decían palabras alusivas. Luego los alumnos actuaban, leyendo poesías, bailando el Pericón y el Minué. Una vez
finalizado, los maestros, alumnos y familiares, eran invitados por los padrinos, de la Escuela nº 23 Juan Bautista Alberdi,
el Batallón dos de Infantería de Marina, al tradicional chocolate, con bollitos. Así lo festejaba mi papá Norberto Oscar; y mi
mamá Nelly en su escuela Nº San Martín de Mayor Buratovich. Sin la presencia de los soldados, y si la cooperadora del
colegio también servían el tradicional chocolate con bollitos. María Belén, 6º Año.
15. Cuando mi mamá y mi papá eran chicos y todavía concurrían a la escuela primaria, el 25 de Mayo se festejaba el
mismo día. Generalmente hacía mucho frío y se hacían desfiles Cívicos - Militares en el centro de la ciudad,(sobre Avenida
L. N. Alem).Iban al colegio con el uniforme pero sin abrigo, a pesar del frío, porque no se podía llevar camperas el día del
acto. Las nenas además iban con polleras y medias tres cuartos. Al finalizar el acto, ambos recuerdan que los padrinos de
las escuelas (generalmente eran miembros de las Fuerzas Armadas Argentinas) les servían un riquísimo chocolate caliente
que acompañaban con apetitosos y sabrosos bollitos. Ignacio ,6º Año.
A mi mamá siempre le tocaba hacer de dama antigua, entonces tenía que disfrazarse con un vestido largo hasta los
pies y se peinaba de una forma rara, con un peine grandote en la cabeza que le decían “peinetón”, también le pintaban la
carita, la maquillaban toda y quedaba muy linda. A mi papá le tocaba de granadero, porque era muy alto para su edad, le
ponían un pantalón azul, una camisa con cosas amarillas en los hombros y un casco azul con una espada para completar el
traje. Quedaba bien, también le hacían poner unas botas negras. Algunas veces tuvieron que hacer de French y Berutti,
quienes repartían escarapelas el día de la revolución de Mayo. Hacían escarapelas de papel crepe de color celeste y blanco.
También bailaron el pericón, que era un baile típico de ésa época. Me gustó mucho saber cómo festejaban ellos éste día tan
importante, y saber que se divertían bastante cuando actuaban. Ramiro, 6º Año.
Cuando era chico, mi papá actuó de vendedor de velas con un poncho y un palo. Y en otro 25de Mayo, tocó el
tambor Camila, 6º Año.
16. Mi papá me contó, que se usaba para actuar en el colegio, un sombrero de paja y en un palo de escoba llevaba
atadas velas para vender. Cuándo mi mamá era chica se vestía con pollera larga, delantal y pañuelo en su cabeza y llevaba
una canasta con pastelitos para vender. Renata, 6º Año.
Papá me cuenta cómo eran los actos del 25 de Mayo en su escuela. “Yo iba a la escuela N°1 de Tres Arroyos.
En la escuela teníamos un escenario muy grande que se decoraba con afiches del 25 de Mayo y cintas celestes y blancas.
Cuando nos tocaba tomar parte para el 25 de Mayo, las chicas se disfrazaban de mazamorreras. Para ello se pintaban la
cara de negro con corcho quemado y llevaban una canasta en la cabeza. Otras iban vestidas de damas de época.
Los chicos nos disfrazábamos de vendedores de vela, llevábamos un palo de escoba y le colgábamos algunas velas. Otros
iban vestidos de militares o señores de la época. También leíamos versos alusivos a la fecha. Por último nos regalaban un
alfajor a cada alumno que había ido al acto.”
Así recuerdan mis padres sus primeras fiestas patrias… En aquellas épocas y no hace tanto tiempo, (unos 30 y tantos
años) el 25 de Mayo se festejaba el mismo día con un acto en el colegio. Dichos actos se caracterizaban porque se
organizaban bailes típicos de la época colonial, nos disfrazábamos de caballeros o de damas antiguas, de negrito vendedor
de velas o negrita lavandera, aguatero, etc. Tomábamos chocolate y comíamos pastelitos. Además teníamos que participar
del desfile que se organizaba en la ciudad. Abril, 5º Año.
Cuenta mi madre que cuando era chica el acto se realizaba si o si el día 25 de mayo (sin importar qué día caía).
Ese día los alumnos que no actuaban asistían al acto con sus guardapolvos blancos impecables, luciendo la escarapela en su
pecho. Los niños que actuaban lucían los trajes acordes a su personaje (farolero, mazamorrera, velero, integrante de la
Junta, etcétera). Y cuenta además que ese día repartían entre todos los alumnos pastelitos, que comían con mucho gusto.
17. En la época de mis papás, se realizaba los actos escolares en la escuela, en una oportunidad mi mamá hizo de
negrita que vendía empanadas, la anécdota es que lloró todo el tiempo pensando que se iba a quedar negra para siempre.
Tomás, 5º Año.
PAPÁ: Los actos escolares eran muy parecidos a los de ahora. En la ciudad se hacían desfiles en los que
participaban todas las escuelas desde 2º hasta el último año de secundaria. MAMÁ: Las fiestas de mamá eran muy
parecidas a las de papá con los actos y los desfiles. Franco, 5º Año
1983 Mi mamá recuerda que en los actos de la escuela que algunos niños se disfrazaban de aguatero,
vendedoras de empanadas y pastelitos, de velero, para representar las costumbres de la época. También se representaba lo
sucedido en el Cabildo Abierto cuándo se declara la independencia. Cuando mi mamá era chica el himno lo tocaba la
profesora de música en el piano, no había micrófono y los alumnos decían fuerte los versos y poesías, por ejemplo:
“pastelitos calientes que queman los dientes”. Los niños y maestras llevaban escarapela, el guardapolvo muy blanco y bien
planchado y la niñas iban con peinados muy prolijos porque era un día de fiesta.1980 Mi papá recuerda que cuando era
chico en los actos de 25 de Mayo se realizaban desfiles militares en la plaza del centro del pueblo. Los niños de la escuela
de mi papá vestían los uniformes de gala, agregando al uniforme habitual guantes blancos. En los actos escolares los
nenes recreaban los episodios del 25 de Mayo de 1810 disfrazándose de los distintos personajes de aquella época. En la
escuela además se vendían empanadas y pastelitos y se solía, en el almuerzo, comer el tradicional locro del 25.
Delfina, 5º año.