El documento analiza la situación de las cooperativas mineras en Bolivia y las medidas recientes del gobierno para regular este sector. Señala que tratar de imponer controles estrictos de forma repentina mediante decretos draconianos no es realista y podría tener consecuencias negativas. También discute la importancia económica de la minería cooperativa para regiones como Potosí y Oruro, y sugiere que en lugar de medidas punitivas se requiere una política de fortalecimiento empresarial a largo plazo para formalizar este sector.