La investigación social sigue un proceso de varias etapas que incluye: 1) definir un problema de investigación basado en fenómenos sociales observados y el marco teórico disponible, 2) diseñar la investigación para recopilar datos empíricos que ayuden a resolver el problema, y 3) analizar los resultados de la investigación para contribuir a la teoría sociológica existente.