Este documento presenta la historia de las esclavas Nathan y Jonatás, quienes fueron regaladas de niñas a Manuela Sáenz. Crecieron juntas y aprendieron a leer y actuar. Más tarde, fueron instruidas por la esclava Antonia en el "arte de no parir esclavos". De adultas, Manuela las entrenó en el espionaje para la causa independentista, aprovechando sus habilidades para la observación, conversación e indagación. Finalmente, el documento describe la vida itinerante y sacrificada de