El documento describe cómo el aprendizaje se está convirtiendo en un proceso más personal y autodirigido debido a la abundante información y recursos disponibles. Aprender depende menos de un profesor y más de la capacidad de una persona para seleccionar recursos y desarrollar estrategias por su cuenta. Los expertos señalan que esto implica ver al estudiante como el diseñador de su propio aprendizaje, mientras que el profesor diseña procesos de enseñanza pero no puede diseñar el aprendizaje de cada estudiante.