1. ++ LA ORACIÓN / TEFILOT ++
Parte 1
Por Erick Vivanco
www.dabarqodesh.com
¿Por qué debemos dirigir la oración al Padre?
Todos sabemos que debemos orar a Elohim, pero no todos sabemos
porque nuestras oraciones deben ir dirigidas al Padre. Por eso, es que
veremos cómo es que la Biblia nos enseña clara y abiertamente que
nuestras oraciones deben ir dirigidas al Padre YHWH, y además
responderemos el porqué, es que al Padre debemos dirigir nuestras
oraciones:
Para sentar la base del porque debemos orar al Padre YHWH, usaremos
el verso más importante de la biblia y otros que transmiten la misma
enseñanza:
“Escucha Israel YHWH, Uno es”… (Deuteronomio 6:4)
El primer mandamiento, es sin duda la base para toda enseñanza, sobre
todo para un tema tan importante como lo es el de la oración. ¿Pero
cómo es que podemos relacionar este gran mandamiento, con la
oración? La respuesta que vincula al “Shema”, con la “oración” son las
primeras demandas del primer mandamiento. En él leemos dos cosas
muy importantes que nos servirán para explicar este gran vínculo,
veamos:
1.- Al comenzar a leer el primer mandamiento, lo primero que leemos
es: “Escucha Israel”, ¿Cuál es la enseñanza de esto? en hebreo la
palabra para “escucha” es “shema” y quiere decir; “Escuchar
obedientemente”. YHWH no solo quiere que Israel oiga como alguien
que oye algo y luego se va, no, lo que él quiere es que Israel escuche
para luego obedecerle, por eso es que el primer mandamiento comienza
2. con esta palabra que demanda, ATENCION OBEDIENTE. Esto es muy
importante que lo tengamos en mente y que lo sepamos para entender
lo que explicaremos seguidamente.
Nota: El primer mandamiento es conocido como: “El shema”, y se debe
a que comienza con la palabra: “Shema”.
2.- Como resultado del primer requerimiento, (que YHWH quiere que su
pueblo escuche obedientemente), tenemos ahora que el Eterno quiere
que su pueblo sepa que él es UNO, y es aquí donde me quiero detener
aun más. La palabra hebrea que está en el texto hebreo de la Toráh
(instrucción), en el primer mandamiento (Shema) para la palabra “UNO”
es “EJAD”. Esta palabra hebrea significa literalmente “1”, como UNO en
numeral “1” y también significa ÚNICO.
Nota: Toráh: quiere decir: “instrucción, enseñanza, guía, camino”. Por lo
que la Toráh es la enseñanza, instrucción divina para su pueblo.
Por lo que al unir estas dos enseñanzas tenemos que YHWH quiere que
escuchemos obedientemente que él es UNO y ÚNICO.
¿Pero cómo podríamos aplicar en nuestras vidas el saber y el
creer que él es UNO? O mejor dicho aún: ¿Cómo es que escuchamos
obedientemente al conocimiento que YHWH nos da de él en el primer
mandamiento, cuando nos dice que él es UNO?
Aquí es donde comenzamos a entender cómo es que aplicamos
obedientemente el conocimiento que YHWH nos da sobre él, pues una
de las muchas formas de aplicar este hermoso conocimiento es en la
oración, ya que es a él a quien debemos de dirigir nuestra
oración.
Muchas personas en la religión, oran a “santos”, oran a
“INTERMEDIARIOS”, u oran a otras “personas”, pero YHWH
quiere que usted sepa que para orar solo debemos hacerlo a él,
pues él es UNO y ÚNICO. De esta manera estaremos cumpliendo con
el primer mandamiento y aplicando obedientemente el conocimiento que
YHWH nos da sobre él.
3. Si echamos una mirada a las enseñanzas de Yeshúa el Mesías,
encontraremos que sus enseñanzas están directamente relacionadas con
el Shema. Es decir; el Mesías enseño siempre que su Elohim y Padre es
Uno y Único, lo mismo que YHWH quiere que Israel escuche
obedientemente:
“Y esta es la vida eterna, que te conozcan a ti, el Único Elohim
Verdadero, y a Yeshúa a quien has enviado” (Juan 17: 3)
Entonces vemos como es que Yeshúa baso todas sus enseñanzas en el
primer mandamiento de la Toráh, el Shema. ¿Pero y respecto de la
oración, enseño Yeshúa que es al Padre a quien debemos dirigir
nuestras oraciones? Si Yeshúa hubiese enseñado que las oraciones no
tienen que ir necesariamente dirigidas al Padre YHWH, entonces sus
enseñanzas no estarían en armonía con el primer mandamiento, pero
como Yeshúa si enseño que es al Padre a quien debemos orar, es que
también todas sus enseñanzas están en armonía con este conocimiento
que nos transmite YHWH en el primer mandamiento: “Escucha Israel
YHWH es UNO”.
Veamos entonces las hermosas enseñanzas de Yeshúa, respecto de que
la oración debe ir dirigida al Padre:
“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora
a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te
recompensará en público” (Mateo 6:6)
“No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe
de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis” (Mateo
6:8)
“Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre” (Mateo 6:9)
“Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también
a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres
sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
(Mateo 6:14-15)
4. “Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros
hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas
cosas a los que le pidan? (Mateo 7:11)
En aquel tiempo, respondiendo Yeshúa, dijo: Te alabo, Padre, Señor
del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de
los entendidos, y las revelaste a los niños. Sí Padre, porque así te
agrado. (Mateo 11:25-26)
“Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros
hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el espíritu santo a los
que se lo pidan? (Lucas 11:13)
“Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y
Yeshúa, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por
haberme oído” (Lucas 11:41)
“Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto
de rodillas oró, diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa;
pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. (Lucas 22:41-42)
“Estas cosas habló Yeshua, y levantando los ojos al cielo, dijo:
Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo
te glorifique a ti; (Juan 17:1)
Como hemos podido ver Yeshúa está aplicando el orden establecido en
las escrituras, es al Padre a quien él dirige sus oraciones, dándonos
ejemplo, para que también nosotros sus alumnos oremos dirigiendo
nuestras oraciones al Padre. En palabras concretas el Mesías está
aplicando el conocimiento que recibió del primer mandamiento, pues él
sabe que Elohim Padre es UNO, y que por lo tanto es a él a quien se
debe orar.
Pero no solo debemos orar al Padre porque él es UNO y UNICO, hay algo
aun que debemos saber respecto de este conocimiento que nos entrega
el mismo Elohim en el primer mandamiento. Y es que dentro de la
afirmación: “YHWH Uno es”, se esconde una segunda enseñanza muy
5. hermosa que transmitió un alumno del Mesías, llamado Shaúl o conocido
en el mundo occidental como “Pablo”.
Es muy interesante el pasaje de que escribe el Apóstol Shaúl a la
congregación residente en Corinto, veamos:
“Para nosotros, sin embargo, sólo hay un Elohim, el Padre, del
cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un
Señor, Yeshúa el Mesías, por medio del cual son todas las cosas, y
nosotros por medio de él. (1Cor. 8:6)
Shaúl como buen hijo de Israel que fue, tenia totalmente claro que la
base de la fe bíblica, era y es el primer mandamiento, por eso, es que el
afirma en su carta a los hermanos de la congregación de Corinto: “Para
nosotros, solo hay un Elohim, el Padre”, esa afirmación de Shaúl es
una enseñanza directamente extraída del Shema, y por lo tanto, lo que
dirá seguidamente es también resultado de su interpretación del primer
mandamiento. Seguidamente leemos; “Del cual proceden todas las
cosas” Shaúl está enseñando que de Elohim Padre, que es UNO, es de
de quien PROCEDEN TODAS LAS COSAS. Esta enseñanza es sumamente
importante para el tema que estamos tratando, el de la oración. Pues de
aquí se desprende una segunda razón del porque es que debemos dirigir
al Padre todas nuestras oraciones, y la razón es que de él PROCEDEN
TODAS LAS COSAS.
Por lo que, cuando leemos: “YHWH UNO es” estamos leyendo
implícitamente, que solo de él proceden todas las cosas, y por eso que a
él deben ir dirigidas nuestras oraciones.
Por lo tanto, según lo que hemos aprendido hasta ahora, en el primer
mandamiento se nos pide que escuchemos con obediencia el
conocimiento que Elohim nos da acerca de él, esto es que sepamos que
él es UNO y ÚNICO, y una de las mejores formas de aplicar y practicar
ese conocimiento obedientemente es dirigiendo nuestras oraciones a él.
Y además sabemos que según la interpretación que hace Shaúl del
primer mandamiento, hay una enseñanza hermosa implícita en la frase:
“YHWH Uno es”, y esta enseñanza es la que el transmite
6. inmediatamente después de la declaración que hace; respecto de que
solo tenemos un Elohim el Padre, “Del cual proceden todas las
cosas”. Por lo cual haremos muy bien, si entendiendo aquello, oramos
sabiendo que lo hacemos a aquel Elohim, que es el origen y el sustento
de todo lo que existió, existe y existirá.
Si leemos las enseñanzas de los alumnos más directos del Mesías
Yeshúa, veremos que ellos enseñaron y practicaron exactamente lo
mismo que su Maestro, pues lo que enseño el Mesías está en el primer
mandamiento y en todas las escrituras, y lo que los alumnos del Mesías
enseñaron está en el primer mandamiento y en todas las escrituras, es
decir, tanto Yeshúa como sus alumnos fueron totalmente fieles a lo que
las escrituras enseñan respecto de la oración.
Veamos entonces ahora como es que en las cartas y los escritos de los
alumnos del Mesías, enseñan clara y abiertamente que la oración debe ir
dirigida al Padre:
“Y orando, dijeron: Tú, YHWH, que conoces los corazones de todos,
muestra cuál de estos dos has escogido (Hechos 1:24)
“Así que, Pedro era guardado en la cárcel; mas la iglesia hacía oración
a Elohim sin cesar por él” (Hechos 12:5)
“Primeramente doy gracias a mi Elohim mediante Yeshúa el Mesías
con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el
mundo” (Romanos 1:8)
“Porque testigo me es Elohim, a quien sirvo en mi espíritu en el
evangelio de su Hijo, de que sin cesar hago mención de vosotros
siempre en mis oraciones (Romanos 1:9)
“Hermanos, ciertamente el anhelo de mi corazón, y mi oración a
Elohim por Israel, es para salvación” (Rom 10:1)
“Gracias doy a mi Elohim siempre por vosotros, por la gracia de
Elohim que os fue dada en el Mesías Yeshúa” (1Cor. 1:4)
7. “No ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en
mis oraciones, Para que el Elohim de nuestro Señor Yeshúa el
Mesías, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación
en el conocimiento de él (Efesios 1:16- 17)
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones
delante de Elohim en toda oración y ruego, con acción de gracias
(Filipenses 4:6)
“Siempre orando por vosotros, damos gracias a Elohim, Padre de
nuestro Señor Yeshúa el Mesías” (Colosenses 1:3)
“Damos siempre gracias a Elohim por todos vosotros, haciendo
memoria de vosotros en nuestras oraciones Acordándonos sin
cesar delante del Elohim y Padre nuestro de la obra de vuestra fe,
del trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en
nuestro Señor Yeshúa el Mesías. (1 Tesalonicenses 1:2-3)
“Doy gracias a Elohim, al cual sirvo desde mis mayores con limpia
conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche
y día (2Timoteo 1:3)
“Doy gracias a mi Elohim, haciendo siempre memoria de tí en mis
oraciones (Filipenses 1:4)
Sin duda alguna son muchos más los pasajes que demuestran
fehacientemente que los discípulos del Mesías Yeshúa, como Israelitas
conocedores del primer mandamiento, aplicaron obedientemente el
conocimiento que tenían de su Elohim, orando dirigidos a él, con la fe y
certeza de que serian oídos.
Por último permítanme demostrar con algunos pasajes cómo es que
TODA la escritura enseña uniformemente que las oraciones deben ir
dirigidas al Padre, y esto se debe a la sencilla pero maravillosa razón,
que todos los que en las escrituras elevaron oraciones, sabían de la
existencia del conocimiento que Elohim entrega acerca de él en el
primer mandamiento. Es decir, todos los personajes bíblicos que oran,
saben que el Padre YHWH es UNO, y que por lo tanto es a él a quien
8. deben dirigirse en oración. Como buenos hijos de Israel que eran, lo
oradores que están registrados en el “Antiguo Testamento” mejor:
“Santas Escrituras”, nos enseñan con sus oraciones, esta hermosa regla
de orden oracional, que solo a Elohim el Padre oramos pues de él, para
él y por él son todas las cosas, veamos:
“Y Samuel dijo: Reunid a todo Israel en Mizpa, y yo oraré por
vosotros a YHWH” (1Samuel 7:5)
“Con mi voz clamé a YHWH, Y él me respondió desde su monte
santo. Selah (Salmos 3:4)
“Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Elohim mío Porque a ti
oraré.” (Salmos 5:2)
“En mi angustia invoqué a YHWH, Y clamé a mi Elohim. El oyó mi
voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.
(Salmos 18:6)
“Busqué a YHWH, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores.
(Salmos 34:4)
Toda la escritura, Yeshúa, y sus alumnos, enseñan armoniosamente que
la oración debe ir dirigida al Padre YHWH, porque él es UNO (Deut. 6.4)
y de él emanan todas las cosas y por el subsisten (1Cor.8:6).
Próximo comentario sobre LA ORACIÓN, trataremos la respuesta a la
pregunta: ¿Por qué debemos orar en el Nombre de Yeshúa?