1. Palacio Real El Palacio Real de Madrid es la residencia oficial del rey de España. Su construcción comenzó en 1738 según planos del arquitecto Filippo Juvara y de la adaptación que de estos hizo su discípulo Juan Bautista Sachetti. Francesco Sabatini se encargó de su conclusión, así como de obras de reforma, ampliación y decoración. Está considerado como el mayor palacio real de Europa Occidental en cuanto a extensión, con 135.000 m² y más de 3.418 habitaciones. Además de ser la residencia oficial del monarca actual, fue asimismo la morada habitual de los reyes de España hasta 1931. En el edificio continúan celebrándose recepciones, actos oficiales y grandes ceremonias de estado, si bien la residencia privada de la familia real es el palacio de la Zarzuela, donde los actuales monarcas se instalaron tras su matrimonio en 1962, renunciando el rey Juan Carlos I a vivir en el Palacio Real.
2. El último monarca que vivió en palacio de manera continua fue Alfonso XIII, aunque Manuel Azaña, presidente de la Segunda República, también habitó en el mismo, siendo por tanto el último jefe de Estado que lo hizo. Durante ese periodo fue conocido como Palacio Nacional. Actualmente Patrimonio Nacional, organismo autónomo dependiente del Ministerio de la Presidencia, gestiona los bienes de titularidad pública puestos al servicio de la Corona, entre ellos el Palacio Real.
3. Antecedentes El antiguo Alcázar de los Austrias a finales del siglo XVII La primera construcción en el lugar se remonta al siglo IX, cuando el emir cordobés Muhammad I mandó construir un alcázar de carácter defensivo en un altozano desde el que se dominaba el valle del río Manzanares. Tras la conquista cristiana del enclave por parte del rey Alfonso VI en 1085, el primitivo alcázar fue ampliado y reformado sucesivamente a lo largo de los siglos por las diferentes dinastías reinantes, conservando el término de origen árabe de alcázar. En tiempos de Felipe II sería la sede de la corte imperial, una vez que el monarca convirtiese a Madrid en capital del imperio en 1561. El antiguo Alcázar de los Austrias sucumbió en la Nochebuena de 1734, reinando Felipe V, a causa de un incendio originado en las habitaciones de un criado del pintor francés Jean Ranc.
4. Filippo Juvara En 1735 Juvara recibió una invitación del rey borbón de España, Felipe V. El rey quiso que se erigiese su nuevo palacio en el mismo lugar del destruido Alcázar de los Austrias, simbolizando así la continuidad de la monarquía española con la recién instaurada Casa de Borbón. En 1735, una vez instalado en Madrid. Su grandioso palacio de masas horizontales y cuya planta hubiera duplicado a la de Versalles, estaba destinado para los "altos de San Bernardino", actual barrio de Argüelles. En efecto se trataba de un monumental proyecto que hubiese contado con 1700 pies de fachada (480 metros); 34 entradas, 23 patios y diversas dependencias anejas.
5. Juan Bautista Sacchetti Juan Bautista Sacchetti de nacimiento (Turín, 1690 - Roma, 1764) fue un arquitecto italiano. Cuando Juvara fallece en 1736 y después de las gestiones realizadas en Italia para encontrar un sustituto, finalmente se optó por un discípulo de Juvara, Sachetti, como el encargado de dirigir las obras. Este se vio obligado a modificar los planos de su maestro debido al emplazamiento definitivo escogido por el rey, asimismo tendría en cuenta las sugerencias del propio monarca y de la junta de obras y mantendría otras soluciones de Juvara. Proyectó en vertical lo que Juvara había planeado en horizontal, para lo cual amplió a seis los tres pisos propuestos por Juvara, recurriendo para ello a los entrepisos, frecuentes en la arquitectura italiana. Discípulo de Filippo Juvara, llegó a España en 1736 para trabajar en el Palacio de La Granja de San Ildefonso, pero poco después fue llamado por el rey Felipe V de España a la corte, para continuar con las obras del Palacio Real tras la muerte de Juvara. Por este motivo, fue nombrado maestro mayor de las obras reales, cargo que desempeñó entre 1736 y 1760.
6. A partir de 1760 Francisco Sabatini sustituye a Sachetti en la dirección de las obras del palacio, después de que Carlos III ascendiese al trono de España, y que dará el impulso definitivo a las obras. Sabatini, recibió el encargo de ampliar el edificio. Su idea original era encuadrar la plaza de la armería con una serie de galerías o arcadas donde alojar las diferentes dependencias, así como la construcción de dos alas a lo largo de la citada plaza, de las cuales solo se concluyó la prolongación de la torre sureste conocida como "ala de San Gil" (hecha a partir de 1772), quedando la suroeste por hacer. Por otra parte, también planeó extender la fachada norte mediante una gran edificación que repetía el mismo estilo del edificio y que incluía tres patios cuadrados de dimensiones algo menores que el gran patio central. El palacio no pudo ser habitado hasta 1764, reinando Carlos III, Sabatini
7. Jardines Jardines El palacio está rodeado por los jardines del Campo del Moro, al oeste, situados entre el edificio principal y la calle de la Virgen del Puerto y cuyos orígenes se remontan a la Edad Media, los jardines de la Plaza de Oriente en frente de la fachada este y por último los jardines de Sabatini al norte, que se extienden hasta la cuesta de San Vicente, de menor extensión y creados en el siglo XX.
8. Jardines del Campo del Moro Estos Jardines deben su nombre a que supuestamente en este lugar acamparon las tropas del caudillo musulmán Alí ben Yusuf en 1109 durante un intento de reconquista de la plaza de Madrid. Las primeras obras para acondicionar la zona se deben a Felipe IV, durante cuyo reinado se construyeron fuentes y se plantaron diferentes tipos de vegetación, aunque el aspecto general del lugar siguió bastante descuidado. Durante la construcción del nuevo palacio se realizaron diversos proyectos de ajardinamiento basados en los jardines del Palacio de la Granja, pero no se llegó a realizar nada por la falta de fondos, no siendo hasta el reinado de Isabel II en que se comienza un ajardinamiento más serio. En esta época se diseña un gran parque de tipo romántico y se instalan fuentes traídas desde el palacio de Aranjuez. Con la caída de Isabel II los jardines sufren un periodo de abandono y descuido en el que se pierde una parte del diseño y no es hasta la Regencia de María Cristina cuando se inician una serie de obras de recuperación, otorgándole el diseño actual, que sigue el trazado de los parques ingleses del siglo XIX.
9. Al este del palacio se halla la Plaza de Oriente, surgida en el siglo XIX tras los derribos de casas promovidos por José Bonaparte con el afán de proporcionar mayor espacio alrededor del edificio y dignificar sus accesos. De ella precisamente toma su nombre informal el palacio. Destaca sobremanera en esta plaza el monumento ecuestre de Felipe IV, quizá la escultura ecuestre más hermosa del mundo, situado en el centro de los jardines. Es famosa esta estatua de bronce fundido por la dífícil y acrobática postura del caballo, en corveta, y por la nómina de genios que colaboraron en su elaboración: Velázquez dio el modelo general, Montañés hizo el boceto de la cabeza del monarca, Galileo Galilei se dice que calculó los contrapesos, y fue fundida por Pietro Tacca. Las estatuas de reyes que ornamentan la plaza son algunas de las que estaban pensadas para decorar la cornisa superior del palacio y que acabaron distribuidas por éste y otros lugares de la geografía madrileña y española, Jardines de la Plaza de Oriente
10. Jardines de Sabatini Situados en la parte norte, entre el Palacio Real, la calle de Bailén y la cuesta de San Vicente. De diseño francés, son unos jardines de carácter monumental, creados en los años treinta del siglo XX. Reciben la denominación de Sabatini debido a que en este lugar se ubicaron las caballerizas construidas por este arquitecto para servicio del Palacio. Estos jardines están adornados con un estanque a cuyo alrededor se sitúan algunas de las estatuas de los reyes españoles que en un principio estaban destinadas a coronar el Palacio Real. Situadas de modo geométrico entre sus paseos, se encuentran varias fuentes.
11. TRABAJO REALIZADO POR: Diego Vega Loro. Felipe Fernández de Campos. Pablo Clavería Herraiz. VictorMarchalIrigaray.