El documento resume las características principales del arte románico en Europa entre los siglos IX y XII. Se desarrolló como la primera manifestación artística común en Occidente después de la caída del Imperio Romano. La arquitectura románica se centró en la construcción de grandes catedrales y basílicas con bóvedas de cañón y contrafuertes. La escultura y la pintura se usaron principalmente para decorar el interior de los templos y transmitir mensajes religiosos.