La ciencia y la tecnología juegan un papel importante en el desarrollo de un país al permitir la comunicación, aumentar la productividad económica, y fomentar el aprendizaje y las habilidades. Sin embargo, también pueden conllevar menor seguridad y adicción al uso inadecuado de herramientas tecnológicas. Los gobiernos usan ministerios, leyes y planes para promover la investigación científica y tecnológica y así estimular el crecimiento industrial y mejorar los niveles de vida.