El poema "La Placeta de San Marcos" forma parte del libro "El coleccionista" escrito por María Victoria Atencia en 1979. El poema expresa el enamoramiento de la autora por la ciudad de Venecia, describiendo cómo desea sujetarse a una columna de mármol para escuchar el rugido del león de bronce que se encuentra en la famosa Plaza de San Marcos de Venecia. Utiliza recursos literarios como la anáfora y la personificación para transmitir estas imágenes de la ciudad.