Los cuatro poemas tratan sobre temas de amor y pérdida. El primer poema describe recordar a un amor entre las estrellas. El segundo expresa el dolor de perder a un amor de la vida. El tercero describe un corazón roto y sentirse solo sin ese amor. El cuarto celebra la libertad y alegría de un ruiseñor al cantar.

1. Cuando el viento toca mi piel es cuando suelo recordarte,
tu recuerdo en mi mente siempre tan hermoso, tan presente.
Entre las estrellas y galaxias siempre suelo encontrarte,
con el mundo a nuestros pies es donde acostumbro a amarte.
—Anel Ovando Santín
Son lágrimas las que corren por mis mejillas sin razón,
una vida a tu lado fue lo que siempre imaginé.
El insistente eco de tu voz en mi mente, es la más hermosa canción.
Amor mío, si la muerte me arranca la vida, no olvides que te amé.
Ojalá esta realidad fuera algo más que una ilusión,
algo más que un espejismo, al cual me aferré.
Y aún así te seguiré amando con cada latido de mi corazón.
—Gabbie Jonas
Mi corazón triste
Y ahora tan solo
que solo sin tenerte
Lo he perdido todo.
Me perdiste;
Y de mi amor tonto
Solo te reíste.
— Voon Cruz
—Canto a un Ruiseñor
"Libertad en tu espíritu gozas,
Dueño de los roces del viento.
Tu alegría al ver crecer las rosas,
La arrogancia de resplandecer en el firmamento;
Con letal lucidez a la humanidad obsequias
La fiera dulzura de un nuevo canto
Devolviendo cálida placidez a las vidas"
— Daniel Rodríguez