Los consumidores se sienten cada vez más agotados por un mundo cambiante e hiperactivo. Los minoristas responden creando una sensación de urgencia para llamar la atención de los consumidores. Ahora, las tiendas físicas se han convertido en "ediciones limitadas" que duran sólo unos días, ya que los minoristas adoptan con entusiasmo el concepto de tiendas pop-up que abren temporalmente en espacios vacíos.