El documento clasifica las fuentes del derecho en cuatro categorías: históricas, materiales, formales y auxiliares. Las fuentes materiales son los factores históricos, políticos, sociales y económicos que influyen en el contenido de las normas legales. Las fuentes formales son la legislación, la jurisprudencia y la costumbre, que son donde se recoge el derecho. Las fuentes auxiliares son la costumbre, los principios generales del derecho y la doctrina.