Las principales funciones de la respiración son la ventilación pulmonar, la difusión de oxígeno y dióxido de carbono entre los alvéolos y la sangre, y el transporte de gases a las células de los tejidos. La respiración se regula a través del centro respiratorio en el tronco encefálico y por quimiorreceptores que detectan los niveles de oxígeno y dióxido de carbono en la sangre.