El documento describe tres formas en las que un docente puede funcionar como mediador del aprendizaje: 1) mediador del aprendizaje mismo, 2) mediador de la cultura social e institucional, y 3) arquitecto del conocimiento. Como mediador del aprendizaje, el docente investiga cómo aprende cada estudiante y selecciona contenidos y métodos adecuados para desarrollar sus capacidades. Al hacer que los estudiantes reflexionen sobre su propio aprendizaje, se mejora el aprendizaje y se fomenta la autoestima.