El documento presenta una propuesta para que las escuelas puedan prevenir el suicidio entre niños y adolescentes. Explica que la escuela debe estar preparada para abordar este tipo de situaciones y trabajar de forma articulada con otras instituciones. También destaca el rol de los "Entrenadores de Vida Junior" como agentes apropiados para brindar apoyo a sus pares y fortalecer la prevención del suicidio.