La prueba chi-cuadrado compara las frecuencias observadas en los datos con las frecuencias esperadas según una distribución de probabilidad nula. Se calcula un estadístico basado en las diferencias entre las frecuencias observadas y esperadas, que sigue una distribución chi-cuadrado si la hipótesis nula es cierta. Un valor alto del estadístico lleva a rechazar la hipótesis nula de que la distribución de los datos coincide con la distribución teórica.