Las rampas son planos inclinados que conectan superficies a diferentes niveles para permitir el acceso de todas las personas. Deben tener un ancho mínimo de 0.90 m y una pendiente máxima del 12%, determinada por la longitud de la rampa. Además, se especifican las pendientes máximas según la longitud de la rampa, entre 8% y 14%, y cómo calcular la altura correspondiente a cada pendiente y longitud.