Este documento describe una noticia sobre cuatro jóvenes ciclistas que fueron detenidos injustamente por la policía y el alcalde de Miraflores y presentados como "Los Malditos de Larcomar", una banda de ladrones. Las familias de los jóvenes pudieron demostrar su inocencia, y que los objetos que supuestamente habían robado en realidad les pertenecían. Finalmente, fueron liberados luego de varios días de detención sin pruebas contundentes en su contra.