1. TAREA EXTRACLASE
NOMBRE: TATIANA MONTALVO BARRERA
CURSO: PRE- UNIVERSITARIO V-08
FECHA: LUNES, 20 DE ENERO DEL 2014
SEGUNDA PARTE
REFORMAS DEL PENSAMIENTO Y DE LA EDUCACION
CAPITULO 1
LA CRISIS DEL CONOCIMIENTO
En la medida en que son mal percibidas, infravaloradas y separadas
unas de otras, todas las crisis de la humanidad planetaria son, al
mismo tiempo, crisis cognitivas.
Nuestro modo de conocimiento no ha desarrollado suficientemente la
aptitud para contextualizar la información e integrarla en un conjunto
que le dé sentido. Nuestro conocimiento parcelado produce
ignorancias globales. Nuestro pensamiento mutilado conduce a
acciones mutiladoras. A ello se añaden las limitaciones 1) del
reduccionismo, que reduce e! conocimiento de unidades complejas al
de los elementos, supuestamente simples, que las constituyen; 2) de!
binarismo, que descompone en verdadero/falso lo que es parcialmente
verdadero o parcialmente falso o, a la vez, verdadero y falso; 3) de la
causalidad lineal, que ignora los bucles retroactivos; 4) del
maniqueísmo, que no ve sino oposición entre el bien y el mal.
Finalmente, también debemos disipar la ilusión según la cual nuestro
conocimiento, incluido el científico, es plenamente racional. De hecho,
existen diversas formas de racionalidad: la racionalidad crítica, que
utiliza la duda; la racionalidad teórica, que edifica teorías estudiando
de forma coherente los fenómenos; la racionalidad autocrítica,
consciente de sus límites y de la degradación de la racionalidad en
2. racionalizaciones (concepciones intrínsecamente lógicas, pero que no
corresponden a ninguna base empírica); la razón instrumental,
denunciada por Adorno y Horkheimer, que está al servicio de
empresas nocivas, criminales o dementes, como los campos de
concentración nazis.
Una tradición de pensamiento bien arraigada en nuestra cultura y que
forma las mentes desde la escuela elemental nos enseña a conocer el
mundo a través de «ideas claras y distintas»; nos insta a reducir lo
complejo a lo simple, es decir, a separar lo que está ligado, a unificar
lo que es múltiple, a eliminar todo lo que aporta desorden o
contradicciones a nuestro entendimiento.
El
conocimiento
debe
saber
contextualizar,
globalizar,
multidimensional, es decir, debe ser complejo. Sólo un pensamiento
capaz de captar la complejidad de nuestras vidas, nuestros destinos y
la relación individuo/sociedad/especie, junto con la de la era
planetaria, puede intentar establecer un diagnóstico del curso actual
de nuestro devenir, y definir las reformas vitalmente necesarias para
cambiar de vía. Sólo un pensamiento complejo puede darnos armas
para preparar la metamorfosis social, individual y antropológica.
El pensamiento complejo también debe servirnos para tomar
conciencia de las contradicciones lógicas que debemos afrontar:
El orden también comporta desorden;
La ciencia ilumina y ciega;
La civilización contiene la barbarie;
La razón pura es sinrazón; la razón y la pasión se necesitan
mutuamente;
El uno comporta su propia multiplicidad.
Como ya hemos dicho, <<los analfabetos del siglo XXI no serán los
que no sepan leer ni escribir, sino los que no puedan aprender,
desaprender y reaprender».
EL NUEVO CONOCIMIENTO CIENTIFICO
Hasta el siglo XIX, la ciencia se construyó sobre tres pilares de
certidumbre. El primero es la creencia en el determinismo absoluto,
que hizo decir a Laplace que un demonio dotado de un espíritu
3. superior podría conocer los acontecimientos del pasado y también los
de! futuro. El segundo pilar es la separabilidad: la convicción de que
para conocer mejor un objeto, basta aislarlo de su medio de origen
colocándolo en un medio artificial. El tercer pilar radica en el
razonamiento por inducción y deducción, que proporciona un método
de prueba, así como el rechazo a la contradicción.
La segunda revolución científica, en la segunda mitad de! siglo
xx,establece relaciones entre disciplinas hasta entonces separadas.A
estas dos revoluciones complejizadoras, que aún no han terminado,
cabe añadir la revolución epistemológica, anticipada por los
pensamientos de Heráclito «<despiertos duermen>, «vivir de muerte,
morir de vida»), de Pascal (sobre el tejido de contradicciones que es el
ser humano), de Hegel«<nuestro pensamiento debe abrazar a los
contrarios»), de Marx «<las ciencias de la naturaleza abrazarán las
ciencias del hombre, las ciencias del hombre abarcarán las ciencias de
la naturaleza»).
La revolución se introdujo en las ciencias con Niels Bohr, que defendió
que la naturaleza compleja de las partículas comprendía dos nociones
contradictorias: ondas y corpúsculos. Esta concepción surge, así, en la
física y en la cosmología, para considerar elorigen de! universo y la
naturaleza de lo real, está en el corazón de la relación espacio-in
dividuo-sociedad, en la biología y la antropología.
En efecto, el científico, como ser humano, es un individuo-sujeto
inmerso en una cultura que le influye, aunque haya desarrollado los
medios más sutiles y refinados para conocer el mundo exterior, es
ciego sobre sí mismo y sobre el propio devenir de la ciencia. Sería
necesario, pues, proporcionar a los científicos una cultura que
englobase los trabajos de filosofía de la ciencia (deBachelard y Popper
a Lakatos y Kuhn), así como una cultura en ciencias humanas que les
permitiese concebir, no sólo la penetración de las ciencias en las
sociedades y en la historia humana, sino también las prodigiosas
transformaciones que aportan a las sociedades y a la historia de la
humanidad.
CAPITULO 2
REFORMA DE LA EDUACION
4. No se puede reformar la institución sin haber reformado antes las
mentes, pero no se pueden reformar las mentes si antes no se han
reformado las instituciones.No existe una respuesta propiamente
lógica a esa contradicción, pero la vida es capaz de aportar soluciones
a problemas lógicamente irresolubles.
La reforma de la educación debe partir de las palabras del Émilede
Jean-Jacques Rousseau, cuando el educador dice refiriéndose a
sualumno: «Quiero enseñarle a vivir>. La fórmula es excesiva, pues
sólo se puede ayudar a aprender a vivir.