El niño le escribe una carta a su padre para contarle las lecciones de vida que aprendió al observarlo cuando su padre pensaba que no lo veía, incluyendo aprender sobre la existencia de Dios, la importancia de cuidar a los demás, compartir con los necesitados, sentirse amado, ser responsable y aprender sobre el dolor y la importancia del esfuerzo. El niño expresa su gratitud por todas las lecciones aprendidas.