El documento presenta un taller de ética para sexto grado que incluye una lectura y reflexión sobre una carta de amor que nunca llegó a su destino y las consecuencias que tuvo, así como un análisis de texto sobre la compasión y la misericordia de Dios. El documento concluye reflexionando sobre la importancia de cultivar la compasión hacia los demás y ofrecer ayuda desinteresada a quienes lo necesitan.
A manera de resumen, que dice la moral católica sobre la sexualidad humana. Primero describe que es el amor verdadero, como entrega personal de uno mismo.
Cada persona a los ojos de Dios es importante y Tú le importas a Dios. Pregúntate: Porque estás aquí hoy?, quiero que sepas que Si, Tu le importas a Dios para un propósito. No es un simple destino para seguir irremisiblemente o aceptar dadas las circunstancias, es tu vida contando esta nueva historia que puedes caminar con Cristo en tu corazón y marcándote con esperanza para vivir hasta el final con trascendencia (entregar santidad/amor a otros).
A manera de resumen, que dice la moral católica sobre la sexualidad humana. Primero describe que es el amor verdadero, como entrega personal de uno mismo.
Cada persona a los ojos de Dios es importante y Tú le importas a Dios. Pregúntate: Porque estás aquí hoy?, quiero que sepas que Si, Tu le importas a Dios para un propósito. No es un simple destino para seguir irremisiblemente o aceptar dadas las circunstancias, es tu vida contando esta nueva historia que puedes caminar con Cristo en tu corazón y marcándote con esperanza para vivir hasta el final con trascendencia (entregar santidad/amor a otros).
Oración | Aprendamos a ser ricos delante de DiosJavier Balan
Oración basado en el Evangelio de Lucas (12, 13-21) y acompañado con textos de las meditaciones de San Juan Bautista De La Salle, así como con una reflexión del Papa Francisco.
Con ocasión de la Cuaresma el Papa Fransico nos propone algunas reflexiones, a fin de que nos sirvan para el camino personal y comunitario de conversión.
Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3.pdfsandradianelly
Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro Fase 3Un libro sin recetas, para la maestr
Las capacidades sociomotrices son las que hacen posible que el individuo se pueda desenvolver socialmente de acuerdo a la actuación motriz propias de cada edad evolutiva del individuo; Martha Castañer las clasifica en: Interacción y comunicación, introyección, emoción y expresión, creatividad e imaginación.
1. TALLER DE ÉTICA
Grado Sexto
(Semana del 09 al 13 de Marzo)
(Trabajo de Clase)
1- (Luegoderealizarlalecturadeltextoa continuaciónextraigatresconclusiones)
(Reflexión)
CARTAS QUE DEBEN ENVIARSE1
por Carlos Rey
Era una carta sencilla y sincera, una carta de amor. Tan pronto como llegara a su destino, esa
carta haría felices a dos personas: a Alcyra Almeida, que la escribió, y a Benjamín Soares, el
destinatario.
Lamentablemente, a Idaír Almeida, la hermana de Alcyra, se le olvidó echar la carta en el
buzón, y la carta nunca llegó a su destino. Treinta años después encontraron la carta en un
cajón, cuando Alcyra y Benjamín ya eran viejos.
Si la carta hubiera llegado, ellos se habrían casado. Como no llegó, los dos vivieron amargados
y desilusionados. Benjamín pensó que Alcyra no lo amaba, y Alcyra pensó que Benjamín no
tenía interés en ella.
Una carta que no llega, una palabra que no se pronuncia, un mensaje o recado que no se da, a
veces puede causar graves trastornos, provocar una tragedia o marchitar dos vidas para
siempre, como fue el caso de Alcyra y Benjamín, de São Pablo, Brasil.
Muchas veces una grave desavenencia entre novios, o lo que es peor, entre esposos, no se
soluciona porque nadie se atreve a pronunciar una palabra que, a pesar de ser breve y sencilla,
cuesta trabajo sacar de los labios: «Perdóname.» Esa sola palabra vale más que millares de
otras, y puede lograr mucho más que todo un discurso florido. Pero para pronunciarla, tenemos
que deponer nuestro orgullo, hacer a un lado nuestra terquedad y escribir la carta que
reconcilia, o hacer la llamada telefónica que restablece, o decir la palabra que reconforta. La
alternativa es no hacer nada; sólo que, cuando no hacemos nada, tampoco resolvemos nada.
Ahora bien, si no hacemos nada es porque nos conformamos con creer lo peor, aun cuando no
tengamos fundamento para eso, como hicieron Alcyra y Benjamín; o porque estamos
convencidos de que nuestras palabras o acciones no nos servirán de nada, como pensó Judas
Iscariote después de traicionar a Jesucristo. Lo cierto es que ninguno de esos motivos justifica
la falta de acción. Pues no ganamos nada en absoluto con creer lo peor acerca de los demás,
como tampoco ganamos nada con creer, como Judas, que todo está perdido. Lo más trágico
del caso de Judas no es que traicionó a su mejor amigo sino que, al igual que Simón Pedro
después de negar a Cristo, pudo haberse arrepentido, haber pedido perdón y haber sido
restaurado en lugar de suicidarse y echarlo todo a perder.
Así que no importa si tenemos o no la culpa de lo sucedido. Lo que importa es que hagamos lo
posible por superar todo obstáculo. Si nos cuesta trabajo reedificar los puentes rotos,
pidámosle esa fuerza a Dios. Él nos puso el ejemplo al enviar a su Hijo Jesucristo a morir por
nosotros en una cruz, que es el puente que construyó para reconciliarnos consigo. Pidámosle
que nos dé el ánimo, el deseo y el valor de enviar esa carta que hace falta.
1 http://www.conciencia.net/?ID=2005mar17
2. 2- Análisis de texto
Why Doesn't God2
Wipe Out All Evil?
Understanding God's Mercy
By J. Stephen Lang
CBN.com -- "Don't get mad -- get even." This
seems to be the usual way people view the
world nowadays. We should be thankful that
God takes a different view of things. Although
the Bible makes it clear that God is the Great
Judge who hates all evil-doing, he is also the
Merciful One, who forgives and accepts people
who turn to him.
Give thanks to the LORD, for he is good! His
faithful love endures forever.
1 Chronicles 16:34
Let the people turn from their wicked deeds. Let
them banish from their minds the very thought of
doing wrong! Let them turn to the LORD that he
may have mercy on them. Yes, turn to our God,
for he will abundantly pardon.
Isaiah 55:7
"As surely as I live, says the Sovereign LORD, I
take no pleasure in the death of wicked people. I
only want them to turn from their wicked ways so
they can live. Turn! Turn from your wickedness,
O people of Israel! Why should you die?"
~ Ezekiel 33:11
God is so rich in mercy, and he loved us so very
much,that even while we were dead because of
our sins, he gave us life when he raised Christ
from the dead. (It is only by God's special favor
that you have been saved!) For he raised us
from the dead along with Christ, and we are
seated with him in the heavenly realms -- all
because we are one with Christ Jesus.
~ Ephesians 2:4-6
Where is another God like you, who pardons the
sins of the survivors among his people? You
cannot stay angry with your people forever
because you delight in showing mercy. Once
again you will have compassion on us. You will
trample our sins under your feet and throw them
into the depths of the ocean! You will show us
your faithfulness and unfailing love as you
2
http://www.cbn.com/spirituallife/cbnteachingsheets/promises_god_mercy.asp
x
promised with an oath to our ancestors Abraham
and Jacob long ago.
~ Micah 7:18-19
"If a shepherd has one hundred sheep, and one
wanders awayand is lost, what will he do? Won't
he leave the ninety-nine others and go out into
the hills to search for the lost one? And if he
finds it, he will surely rejoice over it more than
over the ninety-nine that didn't wander away! In
the same way, it is not my heavenly Father's will
that even one of these little ones should perish."
~ Matthew 18:12-14
"Now turn from your sins and turn to God, so you
can be cleansed of your sins. Then wonderful
times of refreshment will come from the
presence of the Lord, and he will send Jesus
your Messiah to you again."
~ Acts 3:19-20
He saved us,not because of the good things we
did, but because of his mercy. He washed away
our sins and gave us a new life through the Holy
Spirit.
~ Titus 3:5
Let us come boldly to the throne of our gracious
God. There we will receive his mercy, and we
will find grace to help us when we need it.
~ Hebrews 4:16
3. La Compasión3
Por lo general, la capacidad de
conmovernos ante las circunstancias
que afectan a los demás se pierde
progresivamente, parecería ser que la
compasión sólo se tiene por
momentos aleatorios. En este sentido,
recuperar esa sensibilidad requiere
acciones inmediatas para lograr una
mejor calidad de vida en nuestra
sociedad.
La compasión supone una manera de
sentir y compartir, participando de los
tropiezos materiales, personales y
espirituales que atraviesan los demás,
con el interés y la decisión de
emprender acciones que les faciliten y
los ayuden a superar estos
problemas.
Los problemas y las desgracias
suceden a diario: las fuerzas
naturales, la violencia entre los
hombres y los accidentes. La
compasión, en estos casos tan
lamentables, nos lleva a realizar
campañas, colectas o prestar servicios
para ayudar en las labores
humanitarias.
Sin embargo, no debemos confundir
compasión con lástima, ya que no son
lo mismo. En este sentido, podemos
observar las desgracias muchas veces
como algo sin remedio y sentimos
escalofrío al pensar que sería de
nosotros en esa situación, sin hacer
nada, en todo caso, pronunciamos
unas cuantas palabras para aparentar
condolencia.
Por otra parte, la indiferencia
envuelve paulatinamente a los seres
humanos, los contratiempos ajenos
parecen distantes, y mientras no
seamos los afectados, todo parece
marchar bien. Este desinterés por los
demás, se solidifica y nos hace
3
http://www.portalplanetasedna.com.ar/compa
sion.htm
indolentes, egoístas y centrados en
nuestro propio bienestar.
No obstante, aquellas personas que
nos rodean necesitan de esa
compasión que comprende, se
identifica y se transforma en actitud
de servicio. Podemos descubrir este
valor en diversos momentos y
circunstancias de nuestra vida, quizás
resulten pequeños, pero cada uno
contribuye a elevar de forma
significativa nuestra calidad humana:
- Realizar una visita a un amigo o
familiar que ha sufrido un accidente o
padece una grave enfermedad: más
que lamentar su estado, debemos
estar pendientes de su recuperación,
visitarlo a diario, llevando alegría y
generando un clima agradable.
- Si somos padres, debemos tener
una reacción comprensiva ante las
faltas de nuestros hijos, ya sean por
inmadurez, descuido o una travesura
deliberada. Reprender, animar y
confiar en la promesa de ser la última
vez que ocurra...
- Si somos profesores, debemos ser
conscientes de la edad y las
circunstancias particulares de
nuestros alumnos, corrigiendo sin
enojo pero con firmeza la indisciplina,
y a su vez, poniendo todos los
recursos que se encuentran a nuestro
alcance para ayudar a ese joven con
las dificultades en el estudio.
- Toda persona en la oficina que roba
tiempo a sus ocupaciones para
explicar, enseñar y hacer entender a
sus compañeros las particularidades
de su labor, conocedor de su
necesidad de trabajo y de la
importancia del trabajo en conjunto.
Viviendo a través de la compasión
reafirmamos otros valores: como la
generosidad y el servicio por poner a
disposición de los demás el tiempo y
recursos personales; la sencillez
porque no se hace distinción entre las
personas por su condición; solidaridad
por tomar en sus manos los
problemas ajenos haciéndolos
4. propios; comprensión porque al
ponerse en el lugar de otros,
descubrimos el valor de la ayuda
desinteresada.
Aunque la compasión nace como una
profunda convicción de procurar el
bien de nuestros semejantes,
debemos crear conciencia y
encaminar nuestros esfuerzos a
cultivar este valor tan lleno de
oportunidades para nuestra mejora
personal:
- Evita criticar y juzgar las faltas y
errores ajenos. Procura comprender
que muchas veces las circunstancias,
la falta de formación o de experiencia
hacen que las personas actúen
equivocadamente. En consecuencia,
no permitas que los demás "se las
arreglen como puedan" y haz lo
necesario para ayudarles.
- Observa quienes a tu alrededor
padecen una necesidad o sufren
contratiempos, determina cómo
puedes ayudar y ejecuta tus
propósitos.
- Centra tu atención en las personas,
en sus necesidades y carencias, sin
discriminarlas por su posición o el
grado de efecto que les tengas.
- Rechaza la tentación de hacer notar
tu participación o esperar cualquier
forma de retribución, lo cual sería
soberbia e interés.
- Visita centros para la atención de
enfermos, ancianos o discapacitados
con el firme propósito de llevar
medicamentos, alegría, conversación,
y de vez en cuando una golosina.
Aprenderás que la compasión te
llevará a ser útil de verdad.
La compasión enriquece porque va
más allá de los acontecimientos y las
circunstancias, centrándose en
descubrir a las personas, sus
necesidades y padecimientos, con una
actitud permanente de servicio, ayuda
y asistencia, haciendo a un lado el
inútil sentimiento de lástima, la
indolencia y el egoísmo.
La compasión es el acto de abrir tu
corazón. Vivir en un estado de
compasión significa acercarse al
mundo sin obstáculos emocionales y
con la capacidad intacta de poder
conectar con los demás. La compasión
es el pegamento emocional que te
mantiene arraigado en la
universalidad de la experiencia
humana, en la medida que te conecta
con tu esencia y con la de quienes te
rodean.
Sin embargo, no todos caminamos
siempre con el corazón abierto de par
en par. Si lo hiciéramos así,
acabaríamos abrumados y
emocionalmente heridos. Si yo
mantuviera esa disposición de corazón
mientras veo los telediarios cada
noche, lo más seguro es que no
podría recuperarme de los
arrebatadores sentimientos de
impotencia y desesperanza suscitados
por todas esas trágicas historias que
aparecen en ellos. A veces es
necesario mantener bien altas tus
barreras emocionales para protegerte.
La clave para aprender la lección de la
compasión consiste en percatarse de
que eres tú quien tienes el control
para levantar o bajar esas barreras
que marcan las distancias entre tú y
los demás. Puedes optar por
suprimirlas cuando quieras conectar
con el corazón de otro ser humano o
puedes limitar el acceso de los otros a
tu corazón cuando lo necesites,
emitiendo valoraciones que te
distancien de aquello que estás
juzgando.
Los juicios no siempre son negativos.
Tus juicios son lo que evita que te
muevas por la realidad como si
tuvieras una membrana abierta,
expuesta a cualquier información con
la que entres en contacto. A veces
sirven para ayudarte a decidir qué
creencias y pensamientos incorporas
del mundo exterior para ayudarte a
discernir lo que, para ti, es verdadero.
Sin la capacidad de discernir, te verías
bombardeado por cientos de ideas
antagónicas sobre las que no tendrías
ningún poder discriminatorio.