La moral, la ética y la conciencia están estrechamente relacionadas. La moral es el objeto de estudio de la ética y ambas se refieren a las costumbres. La conciencia nos permite reflexionar sobre nuestras acciones y decidir si son correctas o incorrectas, lo que es necesario para determinar qué es moral o inmoral. Estos tres conceptos solo pueden entenderse en relación los unos con los otros.