3. Señales que denuncian la existencia de
violencia sexual:Cambios de
comportamiento en la
escuela o en el contexto
familiar.
Disminución del
rendimiento escolar.
Rehusarse a
permanecer a solas con
un adulto o tener
miedo de hacerlo.
Perturbaciones del
sueño.
Problemas con los
esfínteres
Depresión, ansiedad,
alejamiento, apatía o
Indiferencia.
Automutilación.
Fuga.
Problemas con alcohol o
drogas.
En el orden físico,
irritación en la boca,
vagina o ano.
4. Señales de violencia doméstica y sexual en
niños y adolescentes:Cambios bruscos,
aparentemente inexplicables,
de comportamiento del
niño/adolescente.
Cambios súbitos de humor,
comportamientos regresivos
y/o agresivos, somnolencia
excesiva, pérdida o exceso de
apetito.
Baja autoestima, inseguridad,
comportamientos sexuales
Inadecuados para la edad,
búsqueda de aislamiento. Lesiones, hematomas y
otros moretones sin
explicación clara.
Embarazo precoz.
Enfermedades de
transmisión sexual.
Fugas de casa o evasión
escolar.
Temor a los adultos
extraños, a la oscuridad, a
permanecer solo y a ser
dejado cerca del potencial
agresor.
5. Comportamiento del niño:
Teme exageradamente a
sus padres.
Sufre de baja autoestima.
Falta constantemente a la
escuela debido al período de
convalecencia y el proceso de
cicatrización por los maltratos
sufridos.
Generalmente, es un niño
nervioso y en constante
estado de alerta.
Presenta un bajo
rendimiento escolar.
Intenta ocultar las lesiones
sufridas por temor a represalias
por parte del agresor.
Puede desarrollar un
comportamiento
extremamente agresivo con
otros niños.
Puede volverse depresivo,
aislado y muy triste.
Problemas con alcohol o
drogas.
Cuando es sometido a un
examen médico, manifiesta
indiferencia, apatía o
tristeza.