La depresión es una problemática multicausal que en los últimos años ha venido
aumentando en todo el mundo, afectando a personas de todas las edades en los ámbitos
educativo, familiar y social; encontrándose la población adolescente mayormente afectada
por sus síntomas y consecuencias, deteriorando su rendimiento académico y su calidad de
vida.
6. Factores que provocan depresión infantil
Situaciones traumáticas o
estresantes, como maltrato
físico o abuso sexual, la
muerte o la pérdida de un
ser querido, una relación
difícil o problemas
económicos. Familiares
consanguíneos que tienen
antecedentes de depresión,
trastorno bipolar,
alcoholismo o suicidio.
7. Como se inicia la depresión
• Dolores y molestias, dolor de cabeza, calambres o problemas
digestivos sin una causa física aparente, o que no se alivian ni con
tratamiento; intentos de suicidio o pensamientos sobre la muerte o el
suicidio.
8. Indicadores emocionales de depresión en los adolescentes
• Experimentar sentimientos de tristeza (que incluye llanto sin motivo aparente), frustración, ira o un estado de
ánimo irritable, culpa, desesperanza o vacío.
• Perder el interés o placer en las actividades que disfrutaba habitualmente.
• Sentirse en conflicto con familiares y amigos, perdiendo el interés en las relaciones.
• Falta de valoración de sí mismos y autocrítica excesiva.
• Pensamientos frecuentes sobre la muerte y el suicidio.
• Dificultad para concentrarse, tomar decisiones o recordar información, entre otros.
• Indicadores comportamentales
• Sentirse cansado o sin energía todo el tiempo.
• Dificultad para dormir o hacerlo de manera excesiva.
• Pérdida o aumento del apetito y peso.
• Un comportamiento inquieto, agitado o ansioso.
• Bajo rendimiento académico.
• Quejas sobre frecuentes dolores de cabeza.
• Descuido en su apariencia personal e higiene.
• Autolesionamiento e intentos de suicidio.
9.
10. Síntomas de depresión infantil
• En este punto, hay que decir bien alto un asunto importante a tener en
cuenta: la depresión infantil, puede estar enmascarada. Por eso,
debemos estar atentos a los comportamientos de nuestros hijos. Te
aconsejamos fijarte en los siguientes síntomas:
• Irritabilidad. Tu hijo de molesta en cualquier situación, mucho más que
antes. Si lo hace de forma repetida, puede tratarse de comienzo de
depresión o de depresión avanzada.
• Aislamiento social. Los niños con depresión dejan de lado las amistades y
las relaciones sociales. Tienden a estar solos.
• Trastornos del apetito. ¿Has observado un cambio a la hora de
alimentarse? Bien por defecto o por exceso, si los hábitos alimenticios
han cambiado, puede ser un síntoma de que tu hijo tiene depresión.