La autoestima se refiere a la valoración subjetiva que una persona tiene de sí misma. Una autoestima alta se caracteriza por la autoconfianza, aceptación, autovaloración y apasionamiento, mientras que una baja se caracteriza por la autocrítica constante, hipersensibilidad a la crítica, deseo compulsivo de complacer, perfeccionismo y culpabilidad constante. La autoestima es importante porque afecta los resultados que se pueden lograr en la vida y la capacidad de asumir riesgos y enfrentar nuevos retos.