El documento define la obligación como la relación jurídica entre un acreedor y un deudor donde el deudor está obligado a cumplir con una prestación a favor del acreedor. Originalmente, la obligación implicaba la automancipación del deudor al acreedor como garantía, pero luego evolucionó a una responsabilidad patrimonial donde los bienes del deudor respondían por el cumplimiento de la obligación. Las fuentes de las obligaciones en derecho romano incluyeron contratos, delitos, cuasicontratos, cuasidelitos y la ley.