El documento analiza la identidad del Estado paraguayo y las desigualdades en los servicios sociales. Señala que a pesar de los avances en la democracia desde 1989, persisten las desigualdades y la pobreza. El gasto social es insuficiente en áreas como educación y salud, con brechas según la ubicación, ingresos e idioma. Los sectores más vulnerables como los pobres, indígenas y personas con discapacidad tienen un acceso limitado a los servicios. El documento argumenta que el Estado necesita adoptar una