Twitter busca establecer un modelo de negocios rentable. Podría generar ingresos a través de publicidad, servicios premium de suscripción, o cobrando a empresas por la atención y seguidores de sus usuarios. Sin embargo, una alta tasa de cancelación de cuentas reduciría la credibilidad de Twitter con las empresas anunciantes y podría poner en riesgo los esfuerzos por hacer que la plataforma sea financieramente sostenible.