Los padres de un niño de 9 años denuncian que la maestra le ha prohibido salir al patio de recreo durante 7 meses por no entregar un trabajo de música. Consideran que es un castigo excesivo y humillante. Han presentado una queja a la Consellería de Educación y afirman que otros padres también están afectados por la conducta de esta maestra.
1. El castigo de la maestra impide a un niño salir al patio durante 7 meses
Vicente Tafaner
LEVANTE, EL mercantil valenciano
5.06.18
El castigo de la maestra impide a un niño salir al patio durante 7 meses
Los padres denuncian que su hijo lleva desde octubre sin recreo por no
entregar un trabajo de música - Aseguran que tiene miedo y han
presentado una queja ante la Consellería de Educación
Llega el momento más esperado: la hora del recreo. Al son del timbre,
niños y niñas salen disparados de sus clases e inundan el patio para
disfrutar del único momento del día que les dejan a su libre albedrío.
Bajan todos menos uno. Es el mismo de siempre. Siete meses sin poder
jugar ni relacionarse con sus compañeros y todo, según relatan los
afectados, por no entregar un trabajo de música. «Es una medida
humillante, degradante y vejatoria». Así describieron los padres los
patrones de conducta de una profesora de un colegio ribereño tras
impedir a su hijo el derecho de saltar al patio. «Parece que sea un criminal.
Esto es maltrato infantil. La situación se está haciendo complicada y
nosotros lo estamos pasando muy mal. Si mi hijo ha hecho una cosa mala
que yo tenga que saber, me gustaría que me lo dijeran para corregirlo en
casa, pero en este caso es por no entregar unos deberes que no sabe hacer.
No se puede tolerar», señalaron.
La pareja se enteró del castigo a través de terceros y tras corroborarlo
con demás alumnos del centro escolar, decidieron enviar un escrito a la
maestra con el objetivo de encontrar una solución. «Sabíamos que era una
educadora que tenía rabietas, pero no que podía llegar a estos límites.
Esta reacción no es normal. Mi hijo lleva desde octubre sin saber lo que es
el recreo. En casa no había dicho nada porque tiene miedo y además, con
el tiempo, lo veía como una práctica normal. A través de la agenda, le
pusimos que si no levantaba la sanción iríamos a la Fiscalía de Menores a
denunciarla», aseguran.
Más afectados
Los progenitores afirman que hablaron por teléfono con la profesora y
apuntan que les explicó que se trataba de una técnica educativa para
corregir su postura. Una contestación que rechazaron tras considerar que
pueden adoptarse otras medidas antes de dejar sin recreo a un niño de 9
años. «La labor del profesor es enseñar. Es mérito suyo estimular a los
jóvenes y lograr que entiendan lo que explica. Pero parece que no lo sabe.
Tiene que tener claro que la prolongación en el tiempo de esta
penalización no va a tener ningún efecto», declararon.
2. Al final, han decidido ir más allá y han presentado una queja ante la
Consellería de Educación en busca de una solución. Asimismo, apuntan al
«miedo» existente entre otras familias que, supuestamente, también se
han visto afectadas por esta profesora. De hecho, según manifestó,
algunos ya han optado por solicitar el cambio de centro ante la posibilidad
de que este conflicto no se resuelva. «Temen que haya represalias. En mi
caso, me he puesto en contacto con otros padres y muchos quieren
presentar formalmente su queja. Pensamos que todo esto se hubiera
podido evitar si desde un primer momento se hubieran puesto en contacto
con nosotros. Para algo está la agenda, que los padres y los niños sí
utilizamos. El problema es que allí se van tapando unos a otros y es difícil
sacar algo. No vamos a quedarnos parados mientras nuestro hijo sufre de
este modo. Es el mejor de su clase», sentenciaron.