LA aceptacion de herencia notarial se clasifica en dos tipos de testimonios c...
Inadaptación social y delincuencia juvenil
1. ¿Qué es la inadaptación social? ¿Es inadaptada la conducta o la persona? ¿Quién lo decide?
¿Quién es un delincuente juvenil?
¿Cuáles son los factores de riesgo?
¿Posible perfil del delincuente? ¿Cómo se debe prevenir y tratar?
Conclusiones
Sofía Álvarez García María Ruiz Herrera
Javier G. Barra Barra Ramón Sánchez Sánchez
Sandra Ramos Pérez CONTACTO: salvgar@alu.upo.es
Universidad Pablo de Olavide, Facultad de Ciencias Sociales, Sevilla
Hay que realizar un estudio exhaustivo de las necesidades
mentales, emocionales físicas y sociales del menor, a fin de
determinar los factores causantes y que las instituciones
sociales actúen en consecuencia (Kvaraceus, 1964).
Se debe buscar la responsabilización y la reflexión del joven
sobre sus actos y consecuencias, aumentando el autocontrol
y la prevención de la reincidencia (Germán y Ocáriz,2009).
Es necesario llevar a cabo programas de prevención
primaria, identificar poblaciones vulnerables y satisfacer las
necesidades básicas de niños y jóvenes. En la prevención
tienen un papel fundamental los agentes socializadores
(Rodríguez y Paíno, 1994).
Un delincuente es aquel que comete una violación
contra la ley y que se le sanciona por ello.
Sin embargo, también se consideran delincuentes
a aquellos jóvenes cuya conducta o gustos difieren
de la norma lo suficiente como para despertar
sospechas y temores en la sociedad.
Existe un debate sobre quién es un delincuente y
quién no, y de lo que debe hacerse al respecto. Es
difícil distinguir entre delincuente socializado,
joven perturbado emocionalmente y quién ha
cometido un solo delito por una necesidad.
(Kvaraceus, 1964)
La inadaptación social es la incapacidad para adaptarse a una situación que se refleja en conductas consideradas como desviaciones de “la normalidad”,
rechazadas por la sociedad y sancionadas por la vía de la exclusión. Es decir, la conducta es la inadaptada, pero la excluida y “etiquetada” por la sociedad
es la persona. En el caso juvenil expresa la imposibilidad de amoldarse de forma deseable a su contexto vital: la familia, la escuela, su grupo de iguales, etc.
Existen inadaptaciones “por defecto”, esto es, aquellas que implican retraimiento, pasividad, invisibilidad y aislamiento. Por otro, hay inadaptaciones
“por exceso”, es decir, las que ya suponen conductas agresivas (violencia) (Torres, De la Morena, Sánchez, 1999).
La desviación social es la respuesta al conflicto de un individuo en el seno de un contexto en el que no logra alcanzar las metas normalizadas desde el punto de vista de la sociedad
en la que se inscribe, la cual, sin embargo, no normaliza los medios para alcanzar esas metas. La inadaptación social parte pues, de un enfrentamiento entre la persona y su entorno,
retroalimentándose además de la marginación con la que la sociedad sanciona a los inadaptados, efecto pero también causa de estos comportamientos.
El perfil del menor ha evolucionado, ya
no sólo son menores no integrados
socialmente, sino también procedentes
de familias normalizadas. No obstante,
los primeros suelen realizar delitos más
graves (Germán y Ocáriz, 2009).
Entre los trastornos psicológicos destacan
los trastornos disociales (relacionados
con la dificultad del control de impulsos),
de ansiedad y, finalmente, la
farmacodependencia (Cartagena, Orozco
y Lara, 2010).
Desequilibrios sociales: como el paro o la inmigración. También suele
asociarse con la ruptura familiar, la pobreza, un bajo nivel de escolarización…
Desajuste personal: trastornos de personalidad
frutos de crisis de elementos sociales que producen
baja autoestima, impulsividad, bajo control, etc.
Otro factor clave desencadenante es la drogadicción.
Fracaso del proceso de socialización: cuando este proceso de transmisión de
normas, valores, creencias y actitudes no se produce de manera adecuada
aparecen conductas inadaptadas como la delincuencia. (Bueno y Moya, 1998)
Un inadaptado lo es porque es juzgado por la
sociedad como tal debido a sus conductas. Los
delincuentes juveniles son un tipo de inadaptados
que llegan a tales extremos debido a factores
individuales, pero sobre todo del entorno,
especialmente por no poder satisfacer necesidades
socialmente extendidas a través de métodos
aceptados. Para prevenirla hay que proveer este
tipo de métodos a toda la población, y en cuanto al
tratamiento y reinserción se deben realizar estudios
individuales de cada caso y trabajar los aspectos de
socialización, formación y comportamiento.Kvaraceus, W. 1964. La delincuencia de menores. Un problema del mundo moderno. ONU. París.
Torres, M. V; De la morena , M. L; Sánchez, A. 1999. Relaciones sociales y prevención de la inadaptación social y escolar.
Bueno, A.& Moya, C. 1998. “La delincuencia juvenil como síntoma: Perspectivas de intervención psicosocial”. Revista Alternativas: cuadernos de trabajo social. Nº6, pp. 151-159. ISSN 1133-0473 .
Cano, M.A. 2011. “¿Supresión, mantenimiento o reformulación del pensamiento educativo en el derecho penal juvenil?: Reflexiones tras diez años de aplicación de la Ley Penal del Menor”. Revista
Electrónica de Ciencia Penal y Criminología, Nº. 13, ISSN 1695-0194.
Cartagena, A., Orozco, A. y Lara, C. 2010. “Caracterización psicológica de menores condenados por homicidio doloso en Medellín y el Valle del Aburrá durante 2003 – 2007”. Revista CES Psicología,
Vol.3, Nº 1. ISSN 2011-3080.
¿Y su futuro? La reinserción
Los programas para jóvenes inadaptados son unas
de las instancias centrales donde se gestiona la
reinserción de éstos .Para ello se requieren
estrategias de control social, para evitar
comportamientos amenazantes, y estrategias de
inclusión social, basándose en la garantía de
derechos o en el acceso a recursos materiales.
Con estas estrategias se pretende socializar a los
jóvenes para generarles un proyecto de vida
futuro. (Cano,2011)