1. Para aquellos que sirven Lectura: Romanos 13:1-7 “Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar” — 1 Timoteo 5:17
2. Cuando mi hijo Esteban entra en alguna habitación, a menudo recibe el respeto inmediato de todos. La s personas quieren estrecharle la mano. Le sonríen. Le felicitan. Le agradecen. Sucede en la iglesia. Sucede en los restaurantes. Sucede dondequiera que vaya, siempre que lle ve puesto su uniforme de la Marina de los Estados Unidos. Mientras lleve el uniforme, Esteban recibe el respeto instantáneo porque todos saben que está sirv iendo. Él ha renunciado a muchas libertades y deseos personales para poder servir a su país. Las per sonas respetan el servicio. Honramos a los oficiales de la policía que están de servicio. Le rendimos homenaje al personal militar que sirve. Pero, ¿le damos la misma honra y respet o a aquellos que están prestando un servicio aún mayor -el servicio a Dios? ¿Les mostram os respeto a nuestros pastores, misioneros y maestros de escuela dominical? Las Esc rituras nos dicen que les demos honra a quienes se les deba dar honra (Romanos 13:7). D e manera específica, se nos dice que aquellos que dirigen los asuntos de la iglesia por medi o de la enseñanza y la predicación deben recibir doble honra (1 Timoteo 5:17). En vez d e criticar a tu pastor, maestro o líder espiritual, permite que los demás escuchen tus palabras de gratitud y alabanza por su servicio. Ora por ellos constantemente. Los siervos de Dios merecen nuestro respeto y nuestra honra.
4. Lectura Bíblica: Romanos 13: 1-7 Deberes cristianos 1 Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. 2 De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos. 3 Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; 4 porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo. 5 Por lo cual es necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia. 6 Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo. 7 Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. 1 Timoteo 5 Deberes hacia los demás 17 Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar. 18 Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el obrero de su salario. 19 Contra un anciano no admitas acusación sino con dos o tres testigos. 20 A los que persisten en pecar, repréndelos delante de todos, para que los demás también teman. Reina Valera Revisada (1960). 1998 (electrónica ed.) . Sociedades Bíblicas Unidas: Miami
5. Biblia del diario vivir . Romanos : 13.1ss Los cristianos interpretan Romanos 13 de diferentes maneras. Todos los cristianos estamos de acuerdo en que debemos vivir en paz con el estado, siempre y cuando este nos permita obrar de acuerdo a nuestras convicciones religiosas. Por cientos de años, sin embargo, ha habido al menos tres interpretaciones de cómo debemos hacerlo. (1) Algunos cristianos creen que el estado es demasiado corrupto y que por lo tanto deben relacionarse con él lo menos posible. Aunque deben ser buenos ciudadanos mientras puedan sin comprometer sus creencias, los cristianos no deben trabajar para el gobierno, ni votar en las elecciones, ni servir en el ejército. (2) Otros creen que Dios ha dado al estado autoridad en ciertos asuntos y a la iglesia en otros. Los cristianos pueden ser leales a ambos y pueden trabajar para cualquiera de los dos. Sin embargo, no deben confundirlos a los dos. La iglesia y el estado tienen intereses en esferas totalmente diferentes, la espiritual y la física, que se complementan pero no actúan juntas.(3) Otros creyentes piensan que los cristianos tienen la responsabilidad de lograr que el estado mejore. Lo pueden hacer desde el campo político, eligiendo cristianos u otros líderes con altos principios. También lo pueden hacer en lo moral, sirviendo de influencia positiva en la sociedad. Según este punto de vista, idealmente la iglesia y el estado han de trabajar juntos para el bien de todos. Ninguno de estos puntos de vista defiende la rebelión ni rechaza la obediencia a las leyes o regulaciones establecidas por las autoridades, a menos que estas demanden con claridad que se violen normas morales reveladas por Dios. Dondequiera que nos hallemos, debemos actuar como ciudadanos y cristianos responsables. 1 Timoteo 5.17 , 18 Líderes fieles de la iglesia deben ser respaldados y apreciados. Con demasiada frecuencia son blanco de críticas porque las congregaciones tienen expectativas irreales. ¿Cómo trata usted a los líderes de su iglesia? ¿Disfruta encontrándoles fallas o les muestra su aprecio? ¿Reciben un salario adecuado para que les permita vivir sin preocupaciones y proveer para las necesidades de sus familias? Jesús y Pablo enfatizaron la importancia de sostener a los que nos guían y enseñan (véase Gálatas 6.6 y las notas en Lucas 10.7 y 1 Corintios 9.4–10 ). 5.17 , 18 Predicación y enseñanza están íntimamente relacionadas. Predicación es proclamar la Palabra de Dios y confrontar a los oyentes con la verdad de la Escritura. Enseñar es explicar la verdad de la Escritura, ayudar a los principiantes a entender los pasajes difíciles, y ayudarles a aplicar la Palabra de Dios a la vida diaria. Pablo dice que estos ancianos son dignos de doble honor. Desafortunadamente, sin embargo, muchas veces lo damos por hecho y no suplimos adecuadamente sus necesidades o no nos controlamos de hacerles duras críticas. Piense en la forma en que puede honrar a sus predicadores y maestros.