Para establecer un diagnóstico de epilepsia, es necesario diferenciar los ataques epilépticos de otros eventos paroxísticos no epilépticos a través de un diagnóstico diferencial. Un gran número de estos eventos son erróneamente diagnosticados como epilépticos, con aproximadamente el 20-30% de los pacientes remitidos a especialistas sin un diagnóstico real de epilepsia. Las causas más comunes de error de diagnóstico son los síncopes, trastornos psiquiátricos, espasmos del sollo