2. Para tus exposiciones orales presentes
y futuras debes tener en cuenta una
premisa fundamental: “Hablando para
que te escuchen se aprende a hablar”.
RECUERDA SIEMPRE
3. Por tanto, acostumbrarte a leer en voz alta
un texto, a recitar una poesía y a contar un
cuento. Si puedes, graba tu voz, pues la
grabación tiene la ventaja de poder ser
repetida cuantas veces sea necesario,
pudiendo así advertir los defectos o errores
que hemos cometido y corregirlos.
SERÁ IMPORTANTE
4. – Ejercicios de respiración: hacer una serie de
inspiraciones profundas y expiraciones con la
misma duración aproximada.
– Ejercicios de relajación corporal y de garganta.
– Ejercicios de vocalización: movilización de los
labios, forzando expresiones.
– Ejercicios de variación del tono y el timbre de
nuestra voz.
– Ejercicios de velocidad lectora dentro de un
mismo texto (leyendo de forma rápida y
frenando en los aspectos más significativos).
¿Qué ejercicios puedes hacer
antes de una exposición oral?
5. ¿Qué debes tener presente a la hora de
exponer en voz alta tu trabajo escrito?
La exposición oral de un trabajo exige
tener las ideas tan claras como si
estuvieran escritas en nuestra mente,
debemos expresar a los demás con
exactitud lo que queremos decir.
6. Puedes organizar tus ideas
ofreciendo una visión completa
sobre lo que vas a hablar y
escribiendo previamente una serie
de TARJETAS que serán tu soporte y
podrás utilizarlas en tu charla.
UNA GUIA ES IDEAL
7. Que tu exposición debe tener siempre un buen principio
y un buen final.
Puedes preparar un pequeño GUIÓN fotocopiado con las
ideas fundamentales del tema y repartirlo entre tus
compañeros para que puedan seguir tu exposición.
Al final de la exposición puedes comentar al profesor la
bibliografía que has utilizado para preparar el trabajo
por si él quiere tratar el tema de una manera más
amplia.
Recuerda
8. – Empezando con una idea o frase que atraiga a tus
oyentes.
– Señalando brevemente el tema del que vas a
hablar y cuánto tiempo vas a utilizar.
– Mirando a tus oyentes lo máximo posible.
– Controlando tu voz.
– Cuidando tu postura: debes respirar
profundamente antes de empezar, te ayudará a
controlar los nervios.
– Preparando los soportes que necesitas
(diapositivas, fotografías en el ordenador…)
¿Cómo debes exponer tu
trabajo?
9. – Cuando hablas en voz alta debes cuidar no sólo la
información, sino el tono de voz y la vocalización.
– Debes prestar atención a las reacciones de tus compañeros
con respecto a los contenidos de tu exposición, adáptala lo
máximo posible a sus gustos e intereses.
– Si utilizas un guión general del tema, todo resultará más fácil
y ameno.
– Los instrumentos audiovisuales y las fotografías ilustrarán tu
exposición y harán que esta sea más brillante.
– Un diálogo final después de tu exposición ayudará a asimilar
más fácilmente el aprendizaje del tema.
Recuerda que:
10. Recuerda que debes tener en cuenta tu tono de voz,
tu vocalización, tu volumen, hablar despacio y que se
entienda bien toda la información que trasmites.
¡ÉXITOS Y HABLEMOS BIEN!