decadencia de España y fortalecimiento de nueva españa

1. El papel económico de la
Iglesia y las grandes
fortunas mineras y
comerciales

2. El poder económico de la iglesia
durante el virreinato se explica porque
actuaba como prestamista de
particulares y corporaciones, y cobraba
cuantiosas rentas parroquiales y
diezmos; con ello acumuló muchos
bienes y posesiones territoriales.

3. La Iglesia, durante los siglos XVI y XVII, sufrió
importantes cambios con las reformas borbónicas
del siglo XVIII, pues éstas prohibían al clero regular
la construcción y fundación de nuevos conventos
en Nueva España, y en cambio permitieron que el
clero secular —formado por obispos y
sacerdotes— se fortaleciera.

4. Por su parte el clero
secular, formado por
obispos y sacerdotes que
no pertenecían a ninguna
orden religiosa y vivían
principalmente en las
ciudades, había logrado
inmiscuirse en asuntos
administrativos y
judiciales del gobierno
virreinal, y tener una
enorme influencia sobre
ellos.

5. Con la expulsión de los jesuitas, el clero secular se fortaleció, ya
que asumió la administración de parte de las iglesias, doctrinas y
conventos pertenecientes a esa orden religiosa, lo que acrecentó
su influencia y su poder. Otros sectores que acumularon riqueza
y poder fueron el minero, el agropecuario y el comercial; muchos
peninsulares y criollos —dueños de minas—, comerciantes y
grandes hacendados obtuvieron inmensas fortunas.

6. Para aumentar sus ingresos, la Corona implementó una
política de venta de cargos públicos y títulos de nobleza a
peninsulares acaudalados y esta situación fue otro de los
factores que incrementó en los criollos y los mestizos un
distanciamiento con los peninsulares y un sentimiento de
identidad nacional.

7. En el siglo XVIII solo los españoles peninsulares, algunos
criollos y mestizos ricos lograron amasar grandes
fortunas. La mayoría de la población —mestizos,
indígenas y castas— vivía en condiciones de pobreza y
marginación. La mayor parte de estos grupos había
mantenido esa situación durante siglos.