Saussure y Peirce coinciden en que el pensamiento humano es sígnico, los signos constituyen hechos sociales, y los signos forman cadenas o sistemas de signos. Sin embargo, se diferencian en que Saussure se cuestiona cuál es el objeto de la lingüística y tiene una perspectiva lingüística dicotómica, mientras que Peirce se cuestiona cómo conocemos la realidad y tiene una perspectiva lógico pragmática tricotómica que le interesa la materialidad del signo.