3. ¿Qué son las obras de misericordia?
Las obras de misericordia son acciones caritativas mediante las
cuales ayudamos a nuestro prójimo en sus necesidades
corporales y espirituales. Instruir, aconsejar, consolar, confortar,
son obras espirituales de misericordia, como también lo son
perdonar y sufrir con paciencia. Las obras de misericordia
corporales consisten especialmente en dar de comer al
hambriento, dar techo a quien no lo tiene, vestir al desnudo,
visitar a los enfermos y a los presos, enterrar a los muertos.
Entre estas obras, la limosna hecha a los pobres es uno de los
principales testimonios de la caridad fraterna; es también una
práctica de justicia que agrada a Dios
4. Han sido tomadas por la Iglesia de otros textos
que están a lo largo de la Biblia y de actitudes y
enseñanzas del mismo Cristo: el perdón, la
corrección fraterna, el consuelo, soportar el
sufrimiento, etc. Son:
1) Enseñar al que no sabe
2) Dar buen consejo al que lo necesita
3) Corregir al que se equivoca
4) Perdonar al que nos ofende
5) Consolar al triste
6) Sufrir con paciencia los defectos del prójimo
7) Rezar a Dios por los vivos y por los difuntos.
5. Consolar al triste
Enseñar al que no sabe
Dar buen consejo al que lo necesita
Rezar a Dios por los vivos y por los difuntos
6. Sufrir con paciencia los
defectos del prójimo
Conforme se crece en la vida uno se ve a sí mismo con mayor realismo. Nos
damos cuenta de nuestros defectos: somos impacientes, celosos,
envidiosos… En algunos momentos parece que hemos superado estos
vicios, pero la realidad es que siempre vuelven, convirtiéndose en la cruz
que debemos cargar. Una cruz que hace sufrir no sólo a los demás, sino
también a nosotros mismos.
En estas situaciones, cuánto agradece nuestro corazón el que una persona
soporte con paciencia la manifestación de nuestros defectos. ¿Verdad que
esto provoca un dulce consuelo para nuestra alma? Es con estas personas,
las que saben soportarnos, con las que más queremos estar, porque nos
quieren como de verdad somos.
Esta es una de las obras de misericordia espirituales propuestas por la
Iglesia.
7. Perdonar al que nos ofende:
Hoy reflexionaremos sobre una de las obras de misericordia espirituales:
Perdonar al que nos ofende. El tema del perdón es algo que nos cuesta
trabajo comprender. Y es que entre más grande es la ofensa, más difícil
resulta el poder perdonar.
Todos los días en nuestra vida cotidiana vemos cómo personas se ofenden,
desde salir de casa nos encontramos con problemas de vecinos,
automovilistas que se gritan estresados por el tránsito y aunado a eso, las
noticias de las que nos enteramos de los hechos violentos que se originan
en nuestra ciudad.
8. En su mayoría salen de una lista hecha por el Señor en su
descripción del Juicio Final. Son:
1) Visitar a los enfermos
2) Dar de comer al hambriento
3) Dar de beber al sediento
4) Dar posada al peregrino
5) Vestir al desnudo
6) Visitar a los presos
7) Enterrar a los difuntos
9. Visitar a los enfermos
Debemos visitar a los enfermos ya que es bueno, porqque
les llevamos esperanza, le transmitamos que Dios lo ama y
que no es un castigo de Dios su enfermedad, sino que más
bien es un hacerse corredentor con Cristo, llevando una
partecita de la Cruz de Cristo, para colaborar con la obra
redentora del Señor.
10. Dar de comer al hambriento y Dar de beber al sediento
Se refieren a la ayuda que debemos procurar en alimento y otros
bienes a los más necesitados, a aquellos que no tienen lo
indispensable para poder comer cada día.
11. En la antigüedad el dar posada a los
viajeros era un asunto de vida o muerte, por
lo complicado y arriesgado de las travesías.
No es el caso hoy en día. Pero, aún así,
podría tocarnos recibir a alguien en nuestra
casa, no por pura hospitalidad de amistad o
familia, sino por alguna verdadera
necesidad.
Dar posada al peregrino:
Vestir al desnudo:
Esta visión que podríamos llamar más
espiritual no solo ratifica la exigencia de
vestir a los que no tienen con qué hacerlo,
sino que también nos invita a mirar más
profundo, es decir, a revestir a nuestro
prójimo con la dignidad que Cristo, con su
desnudez, nos ganó en la cruz, por la cual
todos somos hermanos.
12. Visitar a los presos
Consiste en visitar a los presos y prestarles no sólo
ayuda material sino una asistencia espiritual que les
sirva para mejorar como personas, enmendarse,
aprender a desarrollar un trabajo que les pueda ser útil
cuando terminen el tiempo asignado por la justicia, etc.
13. Enterrar a los difuntos
Enterrar a los muertos es una obra de misericordia corporal
que posee una fuerte dimensión espiritual porque implica,
necesariamente, el acto de rezar por los difuntos. Desde
esta perspectiva, nos sentimos interpelados a reflexionar,
además, sobre la muerte y sobre el sentido de la vida