2. TORTICOLIS
Es un torcimiento del cuello, en el cual la cabeza
apunta hacia un lado, mientras la barbilla o mentón
está volteada hacia el otro.
3. CAUSAS
La tortícolis puede ser:
Hereditaria: debido a cambios en los genes
Adquirida: se desarrolla como resultado del daño al
sistema nervioso, la parte superior de la columna o los
músculos
Si la afección ocurre sin una causa conocida, se
denomina tortícolis idiopática.
La tortícolis puede desarrollarse en la niñez o en la
adultez. La tortícolis congénita (presente al nacer)
puede ocurrir si la cabeza del feto estaba en posición
incorrecta mientras crecía en el útero o si hay una
lesión a los músculos o al riego sanguíneo al cuello del
feto
4. SINTOMAS
Rango de movimiento limitado de la cabeza
Dolor de cabeza
Temblor de la cabeza
Dolor cervical
Hombro más alto de un lado del cuerpo
Rigidez de los músculos del cuello
Hinchazón de los músculos del cuello
(posiblemente presente al nacer)
5. PRUEBAS Y EXAMENES
Se pueden realizar diversos exámenes o
procedimientos para descartar las posibles causas del
dolor de cuello y cabeza. Un examen físico mostrará:
La cabeza inclinada hacia el lado afectado, mientras
que la barbilla apunta hacia el lado contrario.
Acortamiento de los músculos del cuello.
Toda la cabeza tira y gira hacia un lado (en casos más
graves).
Los exámenes que se pueden hacer abarcan:
Tomografía computarizada del cuello.
Electromiografía (EMG) para ver cuáles músculos están
más afectados.
Resonancia magnética del cerebro.
6. TRATAMIENTO
El tratamiento de la tortícolis al nacer implica estirar el músculo del cuello
acortado. Los estiramientos y posicionamientos pasivos son los tratamientos
utilizados en bebés y niños pequeños. Estos tratamientos a menudo son eficaces,
especialmente si se inician dentro de los tres meses posteriores al nacimiento.
La cirugía para corregir el músculo del cuello se puede hacer en la edad
preescolar, en caso de que otros métodos de tratamiento fallen.
La tortícolis causada por daño al sistema nervioso, la columna o los músculos se
trata identificando la causa del trastorno.
La aplicación de calor, la tracción de la columna cervical y los masajes pueden
ayudar a aliviar el dolor de cuello y cabeza.
Los ejercicios de estiramiento y la utilización de un collarín pueden ayudar con los
espasmos musculares.
Se pueden usar medicamentos como el fármaco anticolinérgico baclofeno.
La inyección de la toxina botulínica puede aliviar temporalmente la tortícolis, pero
generalmente se requiere repetir las inyecciones cada tres meses.
La cirugía de la columna vertebral puede ser necesaria cuando la tortícolis se
debe a vértebras dislocadas. En algunos casos, la cirugía implica la destrucción
de algunos de los nervios de los músculos del cuello o la estimulación cerebral.