Este documento explica el modelo de oferta y demanda agregada. 1) Describe las curvas de oferta agregada a corto y largo plazo y cómo se relacionan con los precios y la producción. 2) Explica la curva de demanda agregada y cómo se ven afectadas por la política monetaria y fiscal. 3) Muestra cómo el modelo se usa para analizar fluctuaciones económicas a corto plazo como la recesión y la estanflación.
Curvas de OA y DA: Análisis de fluctuaciones económicas
1. En este tema aprenderemos:
●Cómo la curva de demanda agregada (DA) muestra la relación entre el
nivel de precios agregado y la cantidad de bienes y servicios demanda
por la economía.
●Cómo la curva de oferta (OA) muestra la relación entre el nivel de
precios agregado y la cantidad de bienes y servicios ofertada por la eco-
nomía.
●Por qué la curva de oferta agregada es diferente a corto plazo respecto
de la de largo plazo.
●Cómo el modelo de OA–DA se usa para analizar las fluctuaciones eco-
nómicas.
●Por qué la política monetaria a largo plazo sólo afecta al nivel de pre-
cios y no a la producción agregada de bienes y servicios.
●Como la política monetaria y la política fiscal se usan para estabilizar la
economía a corto plazo.
TEMA 10: EL MODELO DE OFERTA Y DEMANDA
AGREGADA.
2. A. La Curva de Oferta Agregada.
Definición.
La curva de oferta agregada (OA) muestra la rela–
ción entre el nivel de precios agregado y la cantidad de
bienes y servicios ofertada por las empresas de la econo
mía.
–
La curva de oferta agregada es diferente según el hori–
zonte temporal que se considere: corto o largo plazo.
3. A. La Curva de Oferta Agregada.
La Curva de Oferta a Corto Plazo.
La curva de oferta agregada a corto plazo tiene pendien
te positiva porque los salarios nominales son rígidos a
corto plazo.
Los salarios nominales (o monetarios) es la cantidad de
euros pagada como retribución al factor trabajo.
Un mayor nivel general de precios hace que las empresas
tengan mayores beneficios: el precio de su producción es
mayor y el coste de la mano de obra no ha cambiado, de
modo que contratarán más trabajadores y aumentarán su
producción a corto plazo.
–
5. A. La Curva de Oferta Agregada.
Desplazamientos de la Curva de Oferta a Corto Plazo.
Cambios en:
● Los precios de las materias primas,
● Los salarios nominales, y
● La productividad de los trabajadores
provocan cambios en los beneficios de las empresas y
desplazan la curva de oferta agregada a corto plazo.
8. A. La Curva de Oferta Agregada.
La Curva de Oferta a Largo Plazo.
La curva de oferta agregada a largo plazo muestra la re–
lación entre el nivel general de precios y la cantidad de
producción agregada ofertada que se daría si todos los
precios, incluidos los salarios nominales, fueran comple–
tamente flexibles.
9. 2. La Curva de Oferta Agregada.
La Curva de Oferta a Largo Plazo.
La curva de oferta agregada a largo plazo es vertical
sobre el nivel de producción potencial, YP , porque a largo
plazo los cambios en el nivel general de precios no afectan
a la cantidad ofertada de producción agregada.
El nivel de producción potencial, Yp, dependerá de la pro–
ductividad del trabajo pero no de los precios de los bienes
y servicios nacionales (incluidos los salarios nominales).
Esto significa que los factores que hacen crecer la produc
tividad del trabajo harán crecer también el nivel de pro–
ducción potencial.
–
12. PIB real
(miles de
millones
de
dólares de
2000)
PIB
potencial
PIB
real
Año
Producción real y producción potencial de 1989 a 2004
La producción potencial
es mayor que el PIB real
El PIB real es mayor que
la producción potencial
El PIB real es aproxima–
damente igual a la pro–
ducción potencial
La gráfica muestra la producción real y la producción potencial de los Estados Unidos de 1989 a 2004. La línea negra corresponde
Al cálculo del PIB potencial de Estados Unidos, elaborado por la Oficina Presupuestaria del Congreso, mientras que la línea azul
corresponde al PIB real. Loa años señalados en morado son aquellos en los que el PIB real se mantuvo por debajo del PIB poten–
cial y los señalados en verde son aquellos en los que el PIB real fue mayor que el potencial. Como se puede apreciar, en las rece
siones de principios de los noventa y de después de 2000 se produjeron sensibles disminuciones del PIB real. El PIB real se en–
contraba significativamente por encima de la producción potencial en el ‘boom’ de finales de los noventa.
13. A. La Curva de Oferta Agregada.
Del Corto al Largo Plazo.
Cuando, al nivel inicial de precios, P1, la cantidad oferta–
da de producción agregada, Y1, es mayor que la produc–
ción potencial, YP, la oferta agregada a corto plazo, OACP
,
tenderá a desplazarse hacia la izquierda.
La razón es que, en algún momento, el bajo desempleo
presionará al alza a los salarios monetarios. Es el alza en
los salarios monetarios la que hará que la curva de oferta
agregada a corto plazo se desplace de OACP
a OACP
.1 2
15. A. La Curva de Oferta Agregada.
Del Corto al Largo Plazo.
Cuando, al nivel inicial de precios, P1, la cantidad oferta–
da de producción agregada, Y1, es menor que la produc–
ción potencial, YP, la oferta agregada a corto plazo, OACP
,
tenderá a desplazarse hacia la derecha.
La razón es que, en algún momento, el alto desempleo
presionará a la baja a los salarios monetarios. Es la baja
en los salarios monetarios la que hará que la curva de
oferta agregada a corto plazo se desplace de OACP
a
OACP
.
1
2
17. B. La Curva de Demanda Agregada.
Definición.
La curva de demanda agregada (DA) muestra la re–
lación entre el nivel de precios agregado y la cantidad de
bienes y servicios demanda por familias, empresas y sec–
tor público.
La demanda agregada es la suma de demanda de consu–
mo (C), demanda de inversión (I) y gasto público (G).
DA = C + I + G
18. B. La Curva de Demanda Agregada.
Pendiente de la Curva DA.
La curva de demanda agregada (DA) tiene pendiente
negativa por dos razones:
Efecto riqueza: Cambios en P modifican el valor real de la
riqueza de las familias y, por tanto, modifican su gasto de
consumo;
Efecto tipo de interés: Cambios en P modifican el valor
de los saldos reales mantenidos por familias y empresas,
alterando el tipo de interés de equilibrio del mercado mone-
tario y, por tanto, el gasto de inversión (y de consumo).
20. B. La Curva de Demanda Agregada.
Desplazamientos de la Curva DA: La Política Macroeco–
nómica.
La curva DA se desplazará como consecuencia de cambios
en la demanda agregada que no tengan su origen en cam-
bios en los precios. En particular, por cambios en las varia-
bles de política fiscal (G, TR y T) y de política monetaria
(M).
Una política fiscal o monetaria expansiva desplazará DA a
la derecha. Una política fiscal o monetaria contractiva des-
plazará DA a la izquierda.
23. B. La Curva de Demanda Agregada.
Otras Causas de Desplazamientos de la Curva DA.
● Variaciones en las expectativas.
● Variaciones en la riqueza no debidas a cambios en el
nivel general de precios, como un aumento en el valor
nominal de las acciones en bolsa.
● Variaciones en la cantidad de capital físico.
24. Un cambio autónomo en el gasto agregado conlleva a una
reacción en cadena: los gastos de unos son los ingresos de otros
que gastan parte de sus ingresos y proporcionan ingresos a otros…
Al final, el cambio en el PIB es igual al multiplicador
multiplicado por el cambio inicial en el gasto agregado (A).
La magnitud del multiplicador, 1/(1 − PMC), depende de la
propensión marginal al consumo, PMC, es decir: cuanto
gastan los hogares de cada Euro de ingresos extras.
Lo más alto la PMC, lo mayor el cambio en el PIB real
La propensión marginal al ahorro, PMA, es igual a 1−PMC.
B. Demanda Agregada y el Multiplicador.
El Multiplicador.
∆Y = ·∆A
1 – PMC
1
25. El Multiplicador
El multiplicador es el ratio entre (1) el cambio total en el PIB
causado por un cambio autónomo en el gasto agregado y (2) el
importe de este mismo cambio autónomo .
26. D. El Modelo DA–OA.
El modelo DA–OA emplea las curvas de demanda y oferta
agregadas para explicar las fluctuaciones económicas a
corto plazo.
El modelo DA–OA combina la curva de oferta agregada a
corto plazo con la curva de demanda agregada. El punto
donde se cortan, ECP , es el punto de equilibrio macroeco-
nómico a corto plazo pues la cantidad demandada de pro-
ducción agregada es igual a la cantidad ofertada.
El Equilibrio Macroeconómico a Corto Plazo.
28. El nivel general de precios de equilibrio a corto plazo es el
nivel general de precios en el equilibrio macroeconómico a
corto plazo, PE.
El nivel de producción agregada de equilibrio a corto plazo
es la cantidad de producción agregada en el equilibrio ma–
croeconómico a corto plazo, YE.
D. El Modelo DA–OA.
El Equilibrio Macroeconómico a Corto Plazo.
29. D. El Modelo DA–OA.
Perturbaciones Negativas de Oferta: La Estanflación.
Una perturbación de oferta desplazará la curva de ofer-
ta agregada a corto plazo. Esto moverá al nivel general de
precios y la producción agregada en direcciones opuestas.
La siguiente figura muestra las consecuencias de una per–
turbación negativa de oferta, que desplaza OACP hacia la
izquierda, de OACP
a OACP
. Como resultado, el equilibrio
de la economía pasa de E1 a E2, produciéndose una situa–
ción de estanflación —un menor nivel de producción
agregada (cae de Y1 a Y2) y un mayor nivel general de
precios (sube de P1 a P2).
1 2
32. D. El Modelo DA–OA.
Perturbaciones Negativas de Demanda: La Recesión.
Una perturbación de demanda desplazará la curva de
demanda agregada. Esto moverá al nivel general de pre–
cios y la producción agregada en la misma dirección.
La siguiente figura muestra las consecuencias de una per–
turbación negativa de demanda, que desplaza DA hacia la
izquierda, de DA1 a DA2 . Como resultado, el equilibrio de
la economía pasa de E1 a E2, produciéndose una situación
de recesión —un menor nivel de producción agregada
(cae de Y1 a Y2) y un menor nivel general de precios (cae
de P1 a P2).
34. D. El Modelo DA–OA.
El Equilibrio Macroeconómico a Largo Plazo.
La economía estará en equilibrio macroeconómico
de largo plazo cuando el punto de equilibrio macro–
económico a corto plazo esté sobre la curva de oferta
agregada a largo plazo.
Esto supone que el nivel de PIB real es igual al producto
potencial, YP.
36. D. El Modelo DA–OA.
Efectos a Largo Plazo de una Perturbación Negativa de
Demanda.
A largo plazo la economía se autoregula: las perturbaciones
de demanda tienen sólo efectos temporales sobre el PIB real.
Un empeoramiento de las expectativas de consumidores y
empresas reducirán DA, desplazándola a la izquierda.
A corto plazo aparecerá una brecha recesiva: el nivel general
de precios y el PIB real caerán, el desempleo aumentará.
Como resultado de ello, los salarios nominales tenderán a
caer haciendo que se restablezca el equilibrio a largo plazo.
39. D. El Modelo DA–OA.
La Neutralidad de la Política Monetaria a Largo Plazo.
Una política monetaria expansiva aumentará DA, despla–
zándola a la derecha.
A corto plazo aparecerá una brecha inflacionista: el nivel
general de precios y el PIB real subirán, el desempleo
disminuirá.
Como resultado, los salarios nominales tenderán a crecer,
elevando el nivel general de precios y reduciendo el PIB real
de manera que se restablezca el equilibrio a largo plazo.
42. E. La Política de Estabilización.
El Argumento a Favor de la Política de Estabilización.
El alto coste — en términos de desempleo — de una brecha
recesiva y las negativas consecuencias futuras de una bre–
cha inflacionista, hacen que muchos economistas sean par-
tidarios de una política de estabilización activa que use la
política fiscal y/o la política monetaria para compensar las
perturbaciones de demanda.
43. La política fiscal afecta a la demanda agregada directa–
mente a través del gasto del gobierno e indirectamente a
través de cambios en los impuestos y en las transferencias
que afectan al gasto de los consumidores.
La política monetaria afecta a la demanda agregada in–
directamente a través de cambios en el tipo de interés que
modifican el gasto de inversión (y de consumo).
E. La Política de Estabilización.
Política Fiscal y Política Monetaria.
44. E. La Política de Estabilización.
¿Qué Hacer ante una Perturbación de Oferta?.
Las perturbaciones negativas de oferta suponen un dile–
ma para la política económica:
• una política que busque estabilizar el PIB real incremen-
tando la producción agregada conducirá a una mayor
inflación,
• pero una política que busque estabilizar el nivel general
de precios reduciendo la demanda agregada aumentará
la brecha del PIB real.
45. Tan sólo dos de las nueve recesiones habidas en Estados Unidos tras la II Guerra Mundial encajan con el
perfil de la recesión provocada por una perturbación negativa de oferta: La recesión que siguió al incre–
mento del precio del petróleo tras la IV guerra árabe-israelí de 1973 y la que se conoció tras otra subida
de precios del petróleo como consecuencia de la Revolución iraní. Sin embargo, estas dos recesiones han
sido las peores en lo referente a las tasas de desempleo
Tasa de
desempleo
Año
1979
Revolución Iraní
1973
Guerra árabe-israelí
46. Política Fiscal Expansiva y Contractiva.
Una política fiscal es expansiva cuando aumenta la demanda
agregada y, por tanto, el nivel de producción y renta.
Una política fiscal es contractiva cuando reduce la demanda
agregada y, por tanto, el nivel de producción y renta.
Una política fiscal expansiva desplaza la curva DA a la derecha
porque eleva la demanda agregada.
Una política fiscal contractiva desplaza la curva DA a la
izquierda.
Politica Fiscal
47. La Política Fiscal y el Multiplicador.
Un aumento en las compras del sector público G
(o una reducción de impuestos T, o un aumento de
transferencias TR) tiene un efecto sobre la demanda
agregada mayor que el propio aumento en las compras G
(o que el aumento inducido en el gasto de consumo al
caer los impuestos T o aumentar las transferencias TR).
∆Y = ·∆A
1 – PMC
1
∆A = ∆G
∆A = –PMC · ∆T
∆A = PMC · ∆TR
Politica Fiscal
48. La Política Fiscal y el Multiplicador.
El efecto sobre la demanda agregada de un cambio en el
gasto público es mayor que el efecto de un cambio en los
impuestos (o transferencias):
Un aumento de 50 millones de euros en G aumenta la
demanda en 50 millones.
La misma reducción en T (el mismo aumento en TR)
aumenta menos la demanda agregada ya que las familias
sólo gastan una fracción (PMC por 100).
El resto se destina al ahorro (PMA por 100).
Politica Fiscal
49. Los Retardos de la Política Fiscal.
Una advertencia acerca del uso de la política fiscal con
fines de estabilización: existen importantes retardos en su
uso.
● Identificar la existencia de una brecha recesiva o una
brecha inflacionista mediante la recogida y análisis de
datos económicos requiere tiempo;
●Diseñar un plan de actuación por parte del gobierno
requiere tiempo;
●Implementar el plan de actuación requiere tiempo.
Politica Fiscal
50. Impuestos y Transferencias como Estabilizadores Automá
ticos.
–
El diseño de ciertos impuestos (sobre la renta y el gasto) y
de ciertas transferencias (subsidios al desempleo) actúan
como estabilizadores automáticos reduciendo las fluctua
ciones del ciclo económico.
La política fiscal discrecional, por el contrario, supone la
toma deliberada de decisiones por partes de los responsa
bles de política económica a fin de estabilizar el ciclo eco–
nómico y están sujetas a los retardos descritos anterior–
mente.
–
–
Politica Fiscal
51. El Saldo Presupuestario.
El Saldo Presupuestario como Medida de la Política Fiscal.
Dado todo lo demás, la política fiscal discrecional expan–
siva —aumento en el gasto público, mayores
transferen– cias a familias o menores impuestos—
reducen el saldo presupuestario para ese año.
Es decir, políticas fiscales expansivas reducen el superá–
vit presupuestario o aumentan el déficit público.
Viceversa, políticas fiscales contractivas —menor gasto
público, menores transferencias, o mayores impuestos—
aumentan el saldo presupuestario de ese año, aumentan
do el superávit presupuestario o reduciendo el déficit pú–
blico.
53. El Saldo Presupuestario.
El Ciclo Económico y el Déficit en Función del Ciclo.
Como consecuencia de la actuación de los estabilizadores
automáticos, parte de las fluctuaciones en el saldo presu–
puestario se deben a los efectos del ciclo económico.
54. -5,0
0,0
5,0
10,0
15,0
20,0
25,0
1970 1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006
Tasa de desempleo (%);
Déficit presupuestario (% del PIB)
Tasa de desempleo
Déficit Presupuestario y Tasa de Paro. España.
Déficit presupuestario
55. El Saldo Presupuestario.
¿Debería Haber Equilibrio Presupuestario?
La mayoría de los economistas no creen que el gobierno
deba de estar obligado a mantener un presupuesto equili–
brado anualmente, ya que esto restaría eficacia a los im–
puestos y las transferencias como estabilizadores automá–
ticos.
Pero los responsables de política, preocupados por los défi
cits excesivos, en ocasiones opinan que son necesarias unas
normas rígidas que los prohíban o que al menos se establez
ca un límite máximo.
–
–
56. El Saldo Presupuestario.
Implicaciones a Largo Plazo de la Política Fiscal.
Déficit presupuestarios persistentes tienen consecuencias a
largo plazo porque producen aumentos de la deuda pública.
Esto puede ser un problema por dos razones:
●La deuda pública puede expulsar gasto de inversión, lo que
reduce el crecimiento económico a largo plazo, y
●En casos extremos, una deuda creciente puede llevar a la
suspensión de pagos por parte del gobierno, lo que puede
llevar al caos económico y financiero.
57. El Saldo Presupuestario.
Implicaciones a Largo Plazo de la Política Fiscal.
Las inquietudes con relación a los efectos a largo plazo de los
déficits no deben impedir el uso de la política fiscal para
estimular la economía cuando ésta está deprimida.
Sin embargo, los Estados tienen que esforzarse en compensar
los déficits de los años de recesión con los superávits de los
años de expansión, de manera que, a largo plazo, el presu-
puesto esté equilibrado.
¿Es ese el comportamiento habitual?
58. El Saldo Presupuestario.
Los Déficits y la Deuda en la Práctica.
Una medida ampliamente usada de la salud fiscal de un
país es su coeficiente de deuda pública sobre el PIB.
Este coeficiente es la deuda pública como porcentaje
del PIB.
Este coeficiente puede permanecer estable o incluso caer
en presencia de déficits moderados si el PIB crece a lo lar–
go del tiempo.
59. (a) El déficit federal de EE.UU. desde 1939 (b) El coeficiente de la deuda de EE.UU. con respecto
al PIB desde 1939
Año Año
Deuda
pública
(% del PIB)
Déficit pre-
supuestario
(% del PIB)
El Déficit y la Deuda Federal de Estados Unidos.
La gráfica (a) muestra el déficit presupuestario federal de
EE.UU. Desde 1939 expresado como porcentaje del PIB.
El gobierno de Estados Unidos tuvo grandes déficits
durante la II Guerra Mundial y, en general, ha tenido
déficit desde entonces, aunque menores. La gráfica (b)
muestra que el coeficiente de la deuda con respecto al
PIB ha disminuido a
pesar de los déficits. Lo que parece una paradoja refleja el
hecho de que el coeficiente de la deuda con respecto al PIB
puede disminuir, aunque la deuda aumente en términos ab–
solutos, si el PIB crece más de prisa que dicha deuda.
Fuente: Economic Report of the President (2005)
60. (a) El déficit presupuestario japonés desde 1991
(b) El coeficiente de la deuda japonesa con respecto
al PIB desde 1991
Deuda
pública
(% del PIB)
Déficit pre-
supuestario
(% del PIB)
Año Año
La gráfica (a) muestra el déficit japonés a partir de 1991 y
la gráfica (b) muestra el coeficiente de la deuda japonesa
con respecto al PIB, ambos indicadores expresados como
porcentaje del PIB. Los grandes déficits que el Estado ja–
ponés comenzó a generar a principios de los noventa han
provocado un rápido aumento del coeficiente de la deuda
japonesa con respecto al PIB, ya que la deuda ha crecido
con mucha más rapidez que el PIB.
Fuente: OCDE
El Déficit y la Deuda Pública en Japón.
61. 0
10
20
30
40
50
60
70
80
1980
1982
1984
1986
1988
1990
1992
1994
1996
1998
2000
2002
2004
2006
-4,00
-2,00
0,00
2,00
4,00
6,00
8,00
1980
1982
1984
1986
1988
1990
1992
1994
1996
1998
2000
2002
2004
2006
(a) El déficit público de España desde 1980
(b) El coeficiente de la deuda de España con respecto
al PIB desde 1980
Deuda
pública
(% del PIB)
Déficit pre-
supuestario
(% del PIB)
Año Año
El Déficit y la Deuda Pública en España.
La gráfica (a) muestra el déficit presupuestario del conjunto
de las administraciones públicas españolas como
porcenta– je del PIB desde 1980. Las exigencias del
tratado de Maas– tricht para la incorporación al euro,
llevaron a un proceso de contención del déficit público a
partir de 1994, de modo que en 1997 ya se cumplía el
requisito de estar situado por
debajo del 3 por 100 del PIB. La gráfica (b) muestra que
un proceso similar para reducir el coeficiente de la deuda
con respecto al PIB por debajo del 60 por 100. En este
caso, la caída se debe tanto a la reducción del déficit
como al fuerte crecimiento del PIB.
Fuente: Banco de España
Notas del editor
Lo más alto la PMC, lo mayor el cambio en el PIB real, dado el cambio autónomo en el gasto agregado.
La propensión marginal al ahorro, PMA, es igual a 1−PMC
Government spending and tax revenue are represented as a percentage of GDP. Sweden has a particularly large government sector, representing nearly 58% of its GDP. The U.S. government sector, although sizable, is smaller than most European countries, except Spain. Source: OECD.