Este documento narra cómo el autor llegó a decidir darle un millón de dólares a cada uno de sus hijos menores de edad. Comenzó con una conversación telefónica con un amigo que había leído el libro "Padre Rico Padre Pobre" y quedó impactado. Más tarde, el autor leyó este libro y otro del mismo autor. Luego, durante una conversación con sus hijos en un bar, uno de ellos le preguntó sobre la herencia que les dejaría. El autor, en un impulso, les dijo que les daría un millón de