A través de este libro hemos visto dos conceptos que son muy relevantes, no solo para las personas, sino, también para las empresas, el gobierno y principalmente la sociedad ya que hoy en día estamos inmersos en una extraordinaria necesidad de liderazgo. Pero hablar solamente de liderazgo es como hablar de un tema aislado que se maneja de forma unilateral y que tiene consecuencias muy particulares, pero la realidad de hoy en la segunda década del SXXI es necesario complementar un tema que durante muchos años ha sido relevante y necesario y que no es privativo de las grandes empresas o de las personas con una educación universitaria o peor aún, que el liderazgo es exclusivo de una parte de la sociedad que puede tener acceso a ello a través un poderío económico, no hay peor justificación ante ti mismo y una pobreza mental que demostrarías al negarte al desarrollo de tan grandes capacidades que tienes y que no has tenido la “decisión de desarrollarlas”, y obtener lo que todo ser humano se merece, que es la extraordinaria satisfacción de lograr todo lo que te propongas a través de un liderazgo emocional.
El perfecto complemento del líder del SXXI, es y seguirá siendo por más de 50 años la inteligencia emocional, concepto poco conocido, poco valorado y por tanto poco utilizado, tanto es así, que hoy existe una extraordinaria discapacidad emocional en miles de millones de personas, reflejado en cosas como el bullying infantil, el acoso sexual, el abuso de autoridad, el incremento de los divorcios en el mundo, la poca educación de valores familiares, la disociación del núcleo de la sociedad que es la familia, con padres que no tienen el compromiso y responsabilidad para educar y formar a niños con inteligencia emocional alta, la gente no toma compromisos y responsabilidad para evitar el esfuerzo de cumplirlos, cada vez más la comunicación es más fría e impersonal, no solo en las amistades, sino dentro de la familia misma y sin fin de problemas que han existido siempre, pero hoy en día se han incrementado y empiezan a ser crónicos ante la sociedad necesitada de valores familiares. La inteligencia emocional, su educación, su enseñanza y su crecimiento es una de las herramientas que responde a la gran necesidad y problemática que vive la sociedad, pero complementado con el tema de liderazgo, el liderazgo emocional o transformacional se vuelve la respuesta para las grandes necesidades y retos que enfrentan las empresas, el gobierno y la sociedad.
Pero el liderazgo emocional o transformacional es un camino que todos debemos tomarlo con consciencia, compromiso y completa responsabilidad de lo que hagamos y dejemos de hacer, porque los resultados son grandiosos posterior a llevar el camino hacia tu éxito a través del liderazgo emocional.
La decisión de llevar este libro a la práctica es únicamente una alternativa de tu consciencia, tomando una decisión lógica de adoptar los conceptos y ejercicios, si existe un im
4. Resumen del libro
A través de este libro hemos visto dos conceptos que son muy relevantes, no solo para las personas, sino, también para las empresas, el gobierno y principalmente
la sociedad ya que hoy en día estamos inmersos en una extraordinaria necesidad de liderazgo. Pero hablar solamente de liderazgo es como hablar de un tema
aislado que se maneja de forma unilateral y que tiene consecuencias muy particulares, pero la realidad de hoy en la segunda década del SXXI es necesario
complementar un tema que durante muchos años ha sido relevante y necesario y que no es privativo de las grandes empresas o de las personas con una educación
universitaria o peor aún, que el liderazgo es exclusivo de una parte de la sociedad que puede tener acceso a ello a través un poderío económico, no hay peor
justificación ante ti mismo y una pobreza mental que demostrarías al negarte al desarrollo de tan grandes capacidades que tienes y que no has tenido la “decisión
de desarrollarlas”, y obtener lo que todo ser humano se merece, que es la extraordinaria satisfacción de lograr todo lo que te propongas a través de un liderazgo
emocional.
El perfecto complemento del líder del SXXI, es y seguirá siendo por más de 50 años la inteligencia emocional, concepto poco conocido, poco valorado y por tanto
poco utilizado, tanto es así, que hoy existe una extraordinaria discapacidad emocional en miles de millones de personas, reflejado en cosas como el bullying infantil,
el acoso sexual, el abuso de autoridad, el incremento de los divorcios en el mundo, la poca educación de valores familiares, la disociación del núcleo de la sociedad
que es la familia, con padres que no tienen el compromiso y responsabilidad para educar y formar a niños con inteligencia emocional alta, la gente no toma
compromisos y responsabilidad para evitar el esfuerzo de cumplirlos, cada vez más la comunicación es más fría e impersonal, no solo en las amistades, sino dentro
de la familia misma y sin fin de problemas que han existido siempre, pero hoy en día se han incrementado y empiezan a ser crónicos ante la sociedad necesitada de
valores familiares. La inteligencia emocional, su educación, su enseñanza y su crecimiento es una de las herramientas que responde a la gran necesidad y
problemática que vive la sociedad, pero complementado con el tema de liderazgo, el liderazgo emocional o transformacional se vuelve la respuesta para las grandes
necesidades y retos que enfrentan las empresas, el gobierno y la sociedad.
5. Resumen del libro
Pero el liderazgo emocional o transformacional es un camino que todos debemos tomarlo con consciencia, compromiso y completa responsabilidad de
lo que hagamos y dejemos de hacer, porque los resultados son grandiosos posterior a llevar el camino hacia tu éxito a través del liderazgo emocional.
La decisión de llevar este libro a la práctica es únicamente una alternativa de tu consciencia, tomando una decisión lógica de adoptar los conceptos y
ejercicios, si existe un impedimento para llevarlo a la práctica en tu vida diaria, solo es una de tantas justificaciones que tienes para evitar llegar a los
resultados que mereces, aplica “un solo” concepto de este libro pero hazlo con todo el compromiso y responsabilidad que conlleva ser mejor persona,
toma la oportunidad de llevar a cabo el proyecto de ser mejor tú mismo para llegar a ser líder transformacional y te aseguro que el resultado es un
futuro mucho mejor de la vida que hoy tienes.
El liderazgo transformacional es un reto para cualquier persona que tenga el interés de cambiar su vida y sus resultados, pero el verdadero reto no solo
es cambiar tu vida, es cambiar la vida de mucha gente, cambiar su calidad de vida, modificar sus pensamientos que impacten en la vida de sus familias
y más allá de ellos, crear una sinergia de transformación, una cadena en la que líderes estemos enseñando a líderes que transformen las vidas de
millones de personas y éstas cambien un pequeño pedazo de su historia, de tal forma que su legado no es dinero, educación universitaria, bienes,
empresas, sino, la extraordinaria capacidad de lograr todo lo que nos propongamos, para ser felices y completamente satisfechos con lo que tenemos,
hacemos y somos. Nunca te rindas para alcanzar lo propuesto, porque solo así la mediocridad habrá vencido y tú seguirás en tu zona de confort. Tú
puedes, porque no tienes nada que perder y algo extraordinario que ganar: tu futuro realizado, ¿hay algo más importante en tu vida terrenal que esto?
6. Resumen del libro
“No reconocer tus Fracasos y tus errores es no reconocer que puedes ser mejor
persona mañana.”
“El camino del éxito es un precio que tú vas a pagar, pero tú eres el que fijas el precio
por él.”
“Cuando te decides a cambiar tus pensamientos, entonces todo será diferente.”
“Nunca te rindas en lo que te propongas, tu actitud ante los obstáculos es la
verdadera herramienta que te llevará hasta tu éxito”.
“Nunca dejes de perseguir tus sueños, porque sino, nunca vas a dormir”.
7. Resumen del libro
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8. 1. Qué modelos de liderazgo existen?
2. Qué habilidades son las que hacen a un líder?
3. Un directivo debe ser un líder?
4. Un líder debe ser un directivo?
Modelos de liderazgo
9. El liderazgo es el conjunto de capacidades que una persona
tiene para influir en la mente de las personas o en un grupo
de personas determinado, haciendo que este equipo
trabaje con entusiasmo, en el logro de metas y objetivos.
También se entiende como la capacidad de tomar la
iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar
y evaluar a un grupo o equipo
Modelos de liderazgo
Think different
10. LIDERAZGO
AUTCRÁTICO PARTICIPATIVO DEMOCRÁTICO
Es el proceso de dirigir las actividades
laborales de los miembros de un grupo y de
influir en ellas. "Liderazgo es influencia"
Liberar el potencial de las personas, para
que puedan llevar su rendimiento al
máximo. Consiste en ayudarlas a aprender
en lugar de enseñarles
Modelos de liderazgo
11. LIDERAZGO
De la
información
Del cambio
El líder de la información es la persona que
mejor la procesa, la interpreta más
inteligentemente y la utiliza en forma
creativa.
Modelos de liderazgo
15. 1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o
líder de equipo
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el
equipo u organización.
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros
para ser líderes.
5. Personalidad
Desarrollo de personas y produce un impacto increíble por
largo PLAZO.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
16. 1. Posición
El nivel de los derechos: La gente le sigue porque tiene que
hacerlo. Es el nivel más bajo de liderazgo para cualquier persona,
se basa en un título o descripción de trabajo. Si la gente sigue a un
líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es
un líder por posición.
La gente sólo lo sigue –o piensa que lo sigue– porque tiene que
hacerlo. La mejor prueba para saber si usted es un líder de
posición, es pedir a la gente que le siga más allá del límite de
autoridad establecida. Si no quieren, el líder está en nivel 1 de
dicha escalera.
El liderazgo que se queda en este nivel por largo tiempo se debilita
en vez de fortalecerse. El líder que quiere que otros lo sigan
simplemente porque es el jefe, pronto pierde el respeto de la
gente.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
17. 1. Posición
El jefe maneja a sus trabajadores. El líder los capacita.
El jefe depende de la autoridad. El líder, de la buena voluntad.
El jefe inspira temor. El líder inspira entusiasmo.
El jefe dice «yo». El líder dice: «nosotros».
El jefe arregla la culpa por el fracaso. El líder arregla el fracaso.
El jefe sabe cómo se hace. El líder muestra cómo se hace.
El jefe dice «vayan». El líder dice «¡vamos!».
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
1. La seguridad se basa en el título, no en el talento.
2. Este nivel se obtiene, frecuentemente, por nombramiento.
3. Las personas no seguirán a un líder posicional más allá de
su autoridad establecida.
4. Los líderes posicionales tienen más dificultad para trabajar
con voluntarios, empleados y gente joven.
18. 2do. Nivel: Permiso
El nivel de las relaciones: La gente le sigue porque quieren
hacerlo. Este nivel de liderazgo se basa en la relación de un
líder con sus seguidores. Cuando estos últimos comienzan
a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle
porque quieren. Los seguidores respetan y admiran mucho
al líder y éste gana facultad para influir sobre ellos.
Cuando el líder tiene el beneplácito de la gente para dirigir,
todo el proceso de liderazgo se hace más grato para todos.
Pero sólo las relaciones positivas no son suficientemente
fuertes para crear un liderazgo duradero. Para cosechar las
recompensas de un liderazgo positivo, tiene que subir al
siguiente nivel.
.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
19. 2do. Nivel: Permiso
1. En este nivel, el tiempo, la energía y el enfoque se centran en
las necesidades y deseos del individuo.
2. Las personas incapaces de construir relaciones sólidas y
duraderas, pronto descubrirán que son incapaces de sostener
un liderazgo efectivo y permanente.
3. Sabemos que usted puede amar a las personas sin dirigirlas,
pero no puede dirigir a las personas sin amarlas
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
20. 3er. Nivel: Producción
El nivel de los resultados: La gente le sigue por lo que ha
hecho por la organización –grupo, iglesia o empresa. En
este nivel de producción, la influencia se cimenta y el
respeto crece por lo que el líder y sus seguidores logran
juntos. La gente comienza a seguir por lo que el líder ha
hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es
beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la
organización.
Todo el mundo quiere resultados. En especial las personas
gozan de los resultados cuando participan en su creación.
En este nivel, el líder y los seguidores empiezan a disfrutar
juntos del éxito. Si el líder alcanza este nivel, apoyado por
los seguidores… se logran muchas de las metas propuestas.
Pero para alcanzar un impacto que cambia vidas y un éxito
duradero, tiene que dar el salto al siguiente nivel.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
21. 3er. Nivel: Producción
En el nivel de «relaciones» las personas se reúnen
solamente para estar juntas. No hay otro objetivo. En el
nivel de los «resultados» las personas se reúnen para
lograr un propósito.
«Si el nivel 1, Posición, es la puerta al liderazgo,
entonces el nivel 2, Permiso, es el cimiento»
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
22. 4to. Nivel: Desarrollo de Personas
El nivel de la reproducción: La gente le sigue por lo que ha
hecho por ellos. El llamado más alto de todo líder es
ayudar a las personas a desarrollar su potencial. Los
mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los
otros para que también lleguen a ser líderes. El líder que
avanza hacia el nivel de facultar personas cambia su
enfoque.
De inspirar y dirigir seguidores, pasa a desarrollar y a dirigir
líderes. Cuando se convierte en un líder que desarrolla
personas, se esfuerza por reproducir su liderazgo en otros
y ayudar a la gente a alcanzar el desarrollo de su potencial.
El tiempo que pase con personas es una inversión. Como
resultado, le respetan no sólo por lo que haya hecho por el
equipo, sino también por lo que ha hecho por ellos como
personas.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
23. 4to. Nivel: Desarrollo de Personas
1. La principal responsabilidad de un líder es capacitar a
otros para hacer el trabajo
2. La lealtad al líder alcanza su nivel más alto cuando el
que le sigue ha crecido personalmente gracias a la
dirección del líder
3. En el nivel 2, el seguidor ama al líder; en el nivel 3, el
seguidor admira al líder; en el nivel 4, el seguidor es
leal al líder.
Las siguientes sugerencias le ayudarán a ser un
capacitador de personas:
Aprender nombres
• Escribir recados
• Leer y contestar cartas.
• Asistir al evento social.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
Prepare líderes clave. Sistemáticamente me reúno y asesoro a los que tienen influencia,
dentro de la organización. Ellos, a su vez, transmiten a otros lo que les he dado
24. 4to. Nivel: Desarrollo de Personas
Las siguientes sugerencias le ayudarán a ser un
capacitador de personas:
Aprender nombres
• Escribir recados
• Leer y contestar cartas.
• Asistir al evento social.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
Prepara líderes clave. Sistemáticamente reúnete y asesora a los que tienen influencia, dentro
de la organización. Ellos, a su vez, transmiten a otros lo que les he dado
25. 5to. Nivel: Personalidad
El nivel del Respeto: La gente le sigue por lo que es y lo
que representa. El quinto y más elevado nivel de liderazgo
es la personalidad. Es el verdadero nivel de respeto. El líder
que dedica su vida al desarrollo de personas y
organizaciones produce un impacto tan increíble por tan
largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo
que representa. Es el mejor de los mejores.
Como líder, no puede aspirar a alcanzar el nivel cinco. Lo
más que puede tratar es trabajar para abrirse paso a través
de los primeros cuatro niveles con tantas personas como
las que pueda con el propósito de agregar valor a sus vidas.
Haga de eso el todo de su vida como líder y, el resto
llegará solo.
.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
26. 5to. Nivel: Personalidad
Únicamente una vida entera de liderazgo probado nos
permitirá llegar al nivel 5 y cosechar las recompensas
satisfactorias por la eternidad.
Sólo sé esto: algún día alcanzaré este nivel. Es posible
lograrlo.
5 niveles de liderazgo
Modelos de liderazgo
27. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según
Maxwell
Modelos de liderazgo
1. Carácter Hay que ser un pedazo de roca, firmes.
2. Carisma La primera impresión puede ser determinante.
3. Compromiso Es lo que se necesita para hacer de los soñadores en hacedores.
4. Comunicación Sin ella, viajas solo.
5. Capacidad Si la desarrollas, ellos vendrán.
6. Valentía Una persona con valentía es mayoría
7. Discernimiento Pone fin a los misterios no resueltos
8. Concentración Mientras más aguda sea, más agudo serás tú.
9. Generosidad Tu vela no pierde nada cuando alumbra a otros.
10. Iniciativa No deberías salir de casa sin ella.
11. Escuchar Para conectarte con sus corazones, usa tus oídos.
12. Pasión Toma la vida y ámala.
13. Actitud positiva Si crees que puedes, puedes.
14. Solución de problemas No puedes dejar que tus problemas sean un problema.
15. Relaciones Si tomas la iniciativa, te imitarán.
16. Responsabilidad Si no llevas la bola no puedes dirigir un equipo.
17. Seguridad La competencia nunca compensa la inseguridad.
18. Autodisciplina La primera persona a la que tienes que dirigir es a ti mismo.
19. Servicio Para progresar pone a los demás primero.
20. Aprender Para mantenerte dirigiendo mantente aprendiendo.
21. Visión Puedes conseguir solo lo que puedes ver.
28. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según Peter
Drucker
Modelos de liderazgo
Qué debe hacerse: "Los líderes exitosos no empiezan preguntando "¿Qué quiero hacer?",
preguntan: "¿Qué debe hacerse
Verifica tu actuación: "Los líderes efectivos verifican su actuación. Escriben "¿Qué espero
lograr si tomo este proyecto
Guíate por la misión: "Los líderes comunican de manera que la gente a su alrededor
entiendan lo que están tratando de hacer
Abandono creativo: "Una pregunta crítica para los líderes es "¿Cuándo paras de asignar
recursos a actividades que ya lograron su objetivo?”
Cómo caen las organizaciones: "Asegurate que la gente con la que hablas entienda tus
prioridades.
Las lecciones que se desprenden de todo esto no son ambiguas. El liderazgo debe
aprenderse y puede aprenderse.
La segunda lección importante es que no existe la “personalidad para el liderazgo”, ni
los “rasgos de liderazgo”.
29. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según Jack
Welch
Modelos de liderazgo
1. Los líderes consiguen que su equipo mejore continuamente: aprovechan cualquier
encuentro para evaluar, aleccionar y otorgar confianza a sus empleados.
2. Los líderes no sólo se aseguran de que el personal entienda la visión de la empresa, sino
de que la viva y la respire.
3. Los líderes se meten en la piel de su personal e irradian energía positiva y optimismo.
4. Los Líderes establecen la confianza mediante la sinceridad, la transparencia y el honor.
5. Los Líderes tienen el valor para tomar decisiones impopulares y confían en su instinto.
6. Los Líderes lo cuestionan todo insistentemente, con una curiosidad que raya en el
escepticismo, para asegurarse de que sus preguntas tienen unas respuestas plausibles.
7. Los líderes inspiran, con su ejemplo, la toma de decisiones arriesgadas y el aprendizaje
continuado.
8. Y por último, un líder siempre celebra los triunfos.
Existen diferentes tipos de líderes: unos son tímidos, otros pedantes, analíticos o impulsivos,
severos o protectores con el equipo..
Son personas que se sienten bien consigo mismas: realistas, sinceras, íntegras, optimistas y
humanas.
30. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según Steve
Jobs
Modelos de liderazgo
1. Haz lo que amas
2. Hacerse un hueco en el universo
En 1976 la visión de Jobs era poner un ordenador en las manos de la gente común.
3. Enciende tu cerebro
Para Steve Jobs, “la creatividad es conectar las cosas” y conectar las cosas significa buscar
inspiración en otras industrias.
4. Venta de sueños, no productos
5. Di no a 1.000 cosas
Estoy tan orgulloso de lo que no hacemos como de lo que hacemos
6. Crear experiencias increíblemente grandes
No hay cajeros, sino expertos, consultores e incluso genios. ¿Por qué? Apple está en el
negocio de enriquecer la vida
7. Maestro del mensaje
Uno puede tener la idea más innovadora del mundo, pero si no puede entusiasmar a la
gente con ella, no importa.
31. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según Sam
Walton
Modelos de liderazgo
1.- Comprométase a triunfar y sea entusiasta
2.- Comparta el éxito con quienes lo han ayudado
3.- Motive a los demás a hacer sus sueños realidad
4.- Comuníquese con la gente y muestre interés
5.- Aprecie y reconozca el esfuerzo y los resultados
6.- Celebre sus propios logros y los de su equipo
7.- Escuche a los demás y aprenda de sus ideas
8.- Busque la manera de superar las expectativas
9.- Controle los gastos y procure prosperar
10.- Nade siempre a contracorriente
32. LIDERAZGO ES INFLUIR
Liderazgo según
Stephen Covey
Modelos de liderazgo
1. Continuo aprendizaje
Buscar entrenamiento, tomar clases, escuchar, preguntar
2. Orientación al servicio
Ver la vida como una misión, no como una "carrera"
3. Radiar energía positiva
Mostrarse entusiasta, optimista, positivo, esperanzado
4. Creer en otros
No exagerar sobre las conductas negativas, no etiquetar, no crear estereotipos, no crear prejuicios
5. Seguir una vida balanceada
Moderado, "sabio", sensible, simple, directo, no manipulador, activo físicamente, activo socialmente,
bien leído. No fanático, no mártir, no adicto. Sentirse realmente bien por el éxito de otros
6. Vivir la vida como una aventura
Alguien que "saborea" la vida
7. Sinergia
Trabajar inteligentemente, eficaz y eficiente, integrar, catalizar el cambio
8. Compromiso en la físico, mental, emocional; ejercicio en lo espiritual y en la continua renovación
Comprometerse en aerobics. Gustar de la lectura, la escritura, la solución creativa de problemas.
Emocional pero paciente. Escuchar con empatía. Mostrar amor incondicional. Orar, meditar
34. Inteligencia emocional
1. Qué habilidades requiere un líder de transformación?
2. Cuáles son las características de un líder?
3. Qué tipo de habilidades se requieren para mantener el rumbo de una
organización?
4. Nos sirve la Inteligencia emocional en el papel de líder?
5. Qué hacer para ser un visionario?
Reflexión
1. Cuántas habilidades se adquieren?
2. Cuántas habilidades se tienen?
3. Los líderes son una especia en extinción?
35. LIDERAZGO
De la información Del cambio
Habilidades
Pensamiento
estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de presión)
Inteligencia emocional
37. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
La habilidad que las cosas sucedan en calidad, tiempo
y forma, enfrentar la realidad y realizar ajustes.
Percerverancia, persistencia y disciplina
Inteligencia emocional
38. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
Es de las pocas competencias que puede visualizar en
un Currículo de vida. Significa cuántas veces te haz
levantado
Inteligencia emocional
39. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
El líder motiva y crea una atmósfera que invita a la
gente a querer ser parte del equipo. Genera relaciones
basadas en la confianza y apertura
Inteligencia emocional
40. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
Se conoce a si mismo y es sensible a la diversidad de
hábitos, valores y personas. Conoce sus debilidades y
las sustituye con otras personas.
Inteligencia emocional
41. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
Proporciona nuevos retos, dedican tiempo a las
personas y su retroalimentación. Prepara al personal
para suplirlo.
Inteligencia emocional
42. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la
cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de presión)
Fortaleza emocional que hace enfrentar adversidades
con optimismo, pasión coraje, humildad. Confrontan
la problemática en forma honesta y con congruencia
entre lo que se dice y se actúa.
Inteligencia emocional
43. Habilidades
Pensamiento estratégico
Excelente
ejecución
Experiencia
Un líder inspira
Sensible en la cultura
(Aprovechan la
diversidad)
Desarrolla
talento
Carácter
(manejo de
presión)
Inteligencia Emocional:
Es el conjunto de habilidades que
nos permiten percibir,
comprender y regular nuestros
estados emocionales y la de los
demás.
Inteligencia emocional
44. HABILIDADES PARA DESARROLLAR AL LÍDER QUE ESTÁ EN
NOSOTROS
1. VISIÓN CLARA DE LOS QUE QUIERES
2. INICIATIVA (Buscar nuevos proyectos y trabajar en donde otros no lo han hecho)
3. COMUNICACIÓN CLARA Y CONCRETA (Compartir y asegurar el entendimiento)
4. ADAPTARSE A LOS CAMBIOS (ser flexible)
5. TRABAJAR EN EQUIPO (todos tenemos un rol donde mejoramos habilidades)
6. APRENDER CONTINUAMENTE (el conocimiento es parte del crecimiento)
7. DESARROLLAR GENTE Y SER COACH (líderes creando otros líderes)
8. CREAR VALOR ECONÓMICO (enfocarse al resultado de la organización)
9. PROMOVERSE A SI MISMO (difundir los logros de la organización)
HABILIDAD: 1) Capacidad y destreza para hacer algo; 2) Cosas que
una persona ejecuta con gracia y destreza
Definiciones de la RAE
Inteligencia emocional
45. Inteligencia Emocional
según Salovey 1990 y
Goleman 1995
1. El conocimiento de las propias
emociones. El conocimiento de uno
mismo.
Autoconciencia
2. La capacidad de controlar las
emociones.
Autogestión
3. La capacidad de motivarse uno
mismo.
Auto
Motivación
4 .El reconocimiento de las
emociones ajenas. La empatía.
Conciencia
Social
5. El control de las relaciones. El arte
de las relaciones se basa en
relacionarnos con otros.
Gestión de
Relaciones
46. Inteligencia Emocional
según Salovey and
Meyer1990
La investigación realizada a nivel mundial por The Consortium for Research on Emotional Intelligence in
Organizations, arrojó un resultado sorprendente y vinculado a nuestro Cociente de Éxito: el mismo se
debe un 23% a nuestras capacidades intelectuales, y un 77% a nuestras aptitudes emocionales.
http://www.inteligencia-emocional.org/ 18 de Julio del 2012@15:11 hrs.
• Autoconciencia
• Autogestión
• Auto motivación
INTRAPERSONALES
• Conciencia social
• Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
GESTIÓN DE LA
INTELIGENCIA
EMOCIONAL
(Coeficiente Emocional)
47. 1. Autoconocimiento
El conocimiento de las propias emociones
Significa ser consciente de uno mismo, conocerse, conocer
la propia existencia y ante todo el propio sentimiento de la
vida. Es la capacidad de reconocer un sentimiento en el
mismo momento en que ocurre .
• Tener una actitud autocritica. Autoevaluación real.
• Conocer nuestros miedos, fortalezas y debilidades.
• Nombra o simbolizar nuestras emociones.
• Tener confianza en uno mismo.
• Reconocer como los sentimientos nos afectan.
¿Cómo se logra el autoconocimiento?
•Autoconciencia
•Autogestión
•Auto motivación
INTRAPERSONALES
•Conciencia social
•Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
Inteligencia emocional
48. 2. Autocontrol
Capacidad para controlar las emociones.
La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que
nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos
al momento. La capacidad de tranquilizarse a uno mismo,
de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la
irritabilidad y las consecuencias que acarrea su ausencia .
• Confiar en nuestras decisiones.
• Conocer nuestras responsabilidades.
• Liberar ansiedad. Respirando.
• Capacidad de concentración y de prestar atención.
• Pensar antes de hablar.
• Evitar juicios erróneos.
¿Cómo se logra el autocontrol?
•Autoconciencia
•Autogestión
•Auto motivación
INTRAPERSONALES
•Conciencia social
•Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
Inteligencia emocional
49. 3. Automotivación
Capacidad para motivarse a uno mismo.
Significa ser aplicado, tenaz, saber permanecer en la
tarea, no desanimarse cuando algo no salga bien, no
dejarse desalentar, ser capaz de ordenar las emociones al
servicio de un objetivo esencial.
• Tomar la iniciativa de hacer las cosas, innovar.
• Tener siempre una aptitud optimista.
• Mente positiva.
• Compromiso.
¿Cómo se logra la automotivación?
•Autoconciencia
•Autogestión
•Auto motivación
INTRAPERSONALES
•Conciencia social
•Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
Inteligencia emocional
50. 4. Empatía
El reconocimiento de las emociones ajenas.
Es la habilidad que le permite a los individuos concebir las
carencias, emociones o dificultades de los demás,
colocándose en su lugar para corresponder
adecuadamente a sus reacciones emocionales, es decir, es
la habilidad de conocer y entender lo que siente otra
persona
• Escuchar a los demás.
• Ver las necesidades de otro.
• Ponernos en la situación de otras personas.
¿Cómo se logra la empatía?
•Autoconciencia
•Autogestión
•Auto motivación
INTRAPERSONALES
•Conciencia social
•Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
Inteligencia emocional
51. 5. Sociabilidad
El control de las relaciones.
Es la capacidad de conocer los sentimientos de otro y
actuar de una manera, que se pueda dar nueva forma a
esos sentimientos, ser capaz de manejar las emociones
del otro es la esencia de mantener relaciones.
• Tener en cuenta las normas de la buena conducta.
• Amabilidad. Siempre saludar a las personas.
• Memorizar el nombre de todos los miembros del grupo.
• Minimizar la sensación de aislamiento.
• Estar dispuesto a colaborar y a trabajar en equipo.
• Amistad y compromiso con los compañeros.
¿Cómo se logra la sociabilidad?
•Autoconciencia
•Autogestión
•Auto motivación
INTRAPERSONALES
•Conciencia social
•Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
Inteligencia emocional
52. Inteligencia Emocional
según Salovey 1990
La investigación realizada a nivel mundial por The Consortium for Research on Emotional Intelligence in
Organizations, arrojó un resultado sorprendente y vinculado a nuestro Cociente de Éxito: el mismo se
debe un 23% a nuestras capacidades intelectuales, y un 77% a nuestras aptitudes emocionales.
http://www.inteligencia-emocional.org/ 18 de Julio del 2012@15:11 hrs.
• Autoconciencia
• Autogestión
• Auto motivación
INTRAPERSONALES
• Conciencia social
• Gestión de las relaciones
INTERPERSONALES
GESTIÓN DE LA
INTELIGENCIA
EMOCIONAL
(Coeficiente Emocional)
53. Libertad Emocional
“La Felicidad es la absoluta y plena creencia de lo que eres y lo que quieres ser.”
— Héctor Tassinari —
Lo que
eres
Lo que
puedes
alcanzar
Lo que
te hace
feliz
54. Inteligencia
Intelectual
Lo que eres
Inteligencia
emocional
Lo que te
hace feliz
Lógica y el razonamiento
Sentimientos y emociones
Lo que
quieres
lograr
Balance
Emocional
Libertad Emocional
“No podemos transformarnos en lo que necesitamos ser permaneciendo como somos ahora…”
—Max De Pree
“Somos el resultado de nuestros pensamientos dominantes, por tanto, el éxito son solo hábitos”.
—Pedro Sicaeros D´arte
55. Libertad Emocional
“El 10% de las cosas que te suceden están bajo tu control, el resto está en base a tu
actitud ante el hecho no controlado.”
— Consuelo Hernández
Inteligencia
Intelectual
Inteligencia
emocional
56. Libertad Emocional
“Cambiar tu forma de pensar está la evolución de cada persona.”
— Pedro y Ana Valdecantos
“La mejor forma de vivir entre el pasado y el futuro, es el presente, pero aprendiendo de lo vivido y teniendo
siempre sueños que alcanzar”
— Abraham Isaac —
Lógica y el raciocinio Sentimientos y emociones
CONOCE Y
MANEJA TUS
EMOCIONES
BALANCE
57. Libertad Emocional
“Casi siempre vemos las cosas más terribles de lo que son, ya que la indecisión y el miedo te agotan
mentalmente.”
— Pedro y Ana Valdecantos
“El único que fracasa es el que desiste!!!!”
— Pedro y Ana Valdecantos
CONOCE Y MENEJA TUS
EMOCIONES
GESTIÓN DE LA
INTELIGENCIA
EMOCIONAL
(Coeficiente
Emocional)
Libertad Emocional
a través de la GESTIÓN DE LA
INTELIGENCIA EMOCIONAL
58. Perfil para un índice de Inteligencia
Emocional de un LÍDER
Vergüenza, estupor, esperanza, tristeza, envidia, tranquilidad, entusiasmo,
solidaridad, enojo, serenidad, duelo, resignación, dolor, resentimiento,
desprecio, rencor, desidia, rechazo, desesperación, Interés, recelo, deseo,
rabia, prepotencia, desconsuelo, desconfianza, placer, desconcierto,
pesimismo, desánimo, pasión, desamparo, pánico, depresión, paciencia,
decepción, optimismo, curiosidad, omnipotencia, culpa, odio, congoja,
obstinación, confusión, nostalgia, confianza, miedo, compasión, mezquindad,
cólera, melancolía, celos, ira, cariño, gratitud, insatisfacción, asombro, rencor,
asco, indignación, apatía, impotencia, ansiedad, impaciencia, angustia,
hostilidad, amor, frustración, alivio, éxtasis, alegría, excitación, aburrimiento,
euforia
Aclaro que estas no son todas las emociones, pero quizás alcance la
lista para que tengan un concepto más amplio de las mismas.
59. PERFÍL DEL LIDERAZGO EMOCIONAL
Definiciones de la RAE
1. El liderazgo emocional es aquél liderazgo que incluye el manejo de las emociones de
forma efectiva para conseguir liderar con eficacia.
2. El liderazgo emocional es imprescindible a la hora de liderar porque los seres humanos
actuamos básicamente por emociones y a la hora de convencer y motivar tenemos que
estimular las emociones.
3. Cuando lideras es importante que muevas las emociones de la otra persona para
influenciarla de tal modo que el liderazgo sea pan comido.
61. Definiciones de la RAE
El liderazgo emocional se basa en provocar todas las emociones correctas para influenciar a la persona y liderarla. Para ello
hay que calibrar, si bien todas las personas reaccionan parecido a ciertos estímulos, conocer mediante el lenguaje corporal y
PERFÍL DEL LIDERAZGO EMOCIONAL
IDENTIFICA Y CRECE
Inteligencia emocional
63. CULTIVAR un ALTO índice de
Inteligencia Emocional para un LÍDER
• Lograr “TODO” lo que nos proponemosPERSEVERANCIA
• Pasar todo tipo de obstáculos en el camino de lograr
lo que nos proponemosPERSISTENCIA
• Realizar todo lo que pensamos que debemos hacer,
con consistencia y con una frecuencia determinadaDISCIPLINA
• Levantarnos todas las veces que nos derrotan en el
camino hacia nuestros logros propuestosRESILIENCIA
Inteligencia emocional
64. LOS RESULTADOS DEL LIDERAZGO EMOCIONAL
El liderazgo emocional se basa en provocar todas las emociones correctas para influenciar a la persona y liderarla. Para ello
hay que calibrar, si bien todas las personas reaccionan parecido a ciertos estímulos, conocer mediante el lenguaje corporal y
análisis a la otra persona te permitirá liderarla con mucha más rapidez y efectividad.
PERSEVERANCIA
PERSISTENCIA
DISCIPLINA
RESILIENCIA
Un buen líder en uso de su inteligencia
emocional es:
Empático por que
Utiliza sus emociones positivas para
establecer relaciones interpersonales sólidas.
Trabaja en la construcción de la confianza
entre los miembros de su equipo.
Facilita la creación y mantenimiento de un
ambiente de trabajo donde se comparten
ideas, se aprende de otros, y existe una
tendencia natural a la toma de decisiones
grupales.
RESULTADOS
ACTITUDES DEL LÍDER
PERFÍL DEL LIDERAZGO EMOCIONAL
Inteligencia emocional
65. CULTIVAR un ALTO índice de
Inteligencia Emocional para un LÍDER
Para establecer una relación positiva con los demás, es preciso cultivar toda una
serie de capacidades destinadas a combatir la negatividad y a establecer una
relación no defensiva:
1. Tranquilizarse a uno mismo, perdemos bastante de nuestra capacidad de escuchar,
pensar y hablar con claridad.
2. Desintoxicarse de pensamientos negativos hipercríticos.
3. Escuchar y hablar de modo que nuestras palabras no despierten la defensiva del
interlocutor, es decir, que no las perciba como críticas u hostiles.
4. Detectar temas, momentos o situaciones de hipersensibilidad.
5. Centrarse en los temas
6. No derivar hacia el ataque personal. Siempre es mejor, por ejemplo, decir un "me ha
incomodado que llegues tarde y no me hayas avisado", que soltar un "eres un
desconsiderado y un egoísta".
7. Disculparnos cuando advirtamos que nos hemos equivocado.
8. Procurar reflejar el estado emocional del interlocutor. Si, por ejemplo, alguien nos
expresa una queja o una preocupación que le cuesta manifestar, hemos de procurar
reflejar que nos hacemos cargo de lo que siente en ese momento.
66. QUE DEBO HACER PARA SER UN LÍDER CON INTELIGENCIA
EMOCIONAL
ZONA DE CONFORT
ACTUAL
MIEDOS
HÁBITOS Y
COSTUMBRES
CONOCIMIENTOS
EXPERIENCIAS
VALORES
PROPIOS
VALORES DE LA
SOCIEDAD
VISIÓN PERSONAL
VISIÓN DE OTROS
ZONA DE APRENDIZAJE
NUEVA ZONA DE CONFORT
Inteligencia emocional
67. QUE DEBO HACER PARA SER UN LÍDER CON
INTELIGENCIA EMOCIONAL
ACTITUDES
HABILIDADES
HABILIDAD: 1) Capacidad y destreza para hacer algo; 2) Cosas que
una persona ejecuta con gracia y destreza
ACTITUD: Postura del ser humano, especialmente cuando es determinada por los
movimientos del ánimo, o expresa algo con eficacia. Disposición de ánimo
manifestada de algún modo
68. QUE DEBO HACER PARA SER UN LÍDER CON
INTELIGENCIA EMOCIONAL
ACTITUDES HABILIDADES
HABILIDADES PARA DESARROLLAR AL LÍDER QUE ESTÁ EN NOSOTROS
1. VISIÓN CLARA DE LOS QUE QUIERES Y HACIA DÓNDE TE DIRIGES.
2. INICIATIVA (Buscar nuevos proyectos y trabajar en donde otros no lo han hecho).
3. COMUNICACIÓN CLARA Y CONCRETA (Compartir y asegurar el entendimiento).
4. ADAPTARSE A LOS CAMBIOS (ser flexible).
5. TRABAJAR EN EQUIPO (todos tenemos un rol donde mejoramos habilidades).
6. APRENDER CONTINUAMENTE (el conocimiento es parte del crecimiento).
7. DESARROLLAR GENTE Y SER COACH (líderes creando otros líderes).
8. CREAR VALOR ECONÓMICO (enfocarse al resultado de la organización).
9. PROMOVERSE A SI MISMO (difundir los logros de la organización).
PERSEVERANCIA
PERSISTENCIA
DISCIPLINA
RESILENCIA
HABILIDADES PARA DESARROLLAR AL LÍDER
QUE ESTÁ EN NOSOTROS
ACTITUDES DEL LÍDER
69. El reto de HOY es convertirnos en líderes con inteligencia emocional,
para transformar no solo, nuestra vida, si no, la de cientos y miles de
personas.
Notas del editor
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
1. Posición
La gente sigue a un líder sólo porque se le ha nombrado jefe o líder de equipo, ese es un líder por posición.
2. Permiso
Los colaboradores comienzan a tener confianza a un líder, entonces comienzan a seguirle porque quieren.
3. Producción
La gente comienza a seguir por lo que el líder ha hecho por el equipo u organización. El éxito de un líder es beneficioso para todos sus seguidores y –por ende- para la organización
4. Desarrollar personas
Los mejores líderes ayudan a desplegar el potencial de los otros para que también lleguen a ser líderes.
5. Personalidad
El líder que dedica su vida al desarrollo de personas y organizaciones produce un impacto tan increíble por tan largo tiempo que la gente lo sigue por lo que es y por lo que representa
Qué debe hacerse: "Los líderes exitosos no empiezan preguntando "¿Qué quiero hacer?", preguntan: "¿Qué debe hacerse?", luego preguntan: "De aquellos cosas que harían una diferencia, cuáles son correctas para mi?" Luego no evitan las cosas en las que no son buenos..."
Verifica tu actuación: "Los líderes efectivos verifican su actuación. Escriben "¿Qué espero lograr si tomo este proyecto?". Toman nota de sus objetivos para los próximos 6 meses y luego vuelven y verifican si los cumplieron. De esta manera, descubren qué hacen bien y qué no. También descubren si eligieron aquellas cosas realmente importantes para hacer. He visto muchísima gente que es muy buena en la ejecución, pero muy mala en elegir las actividades correctas..."
Guíate por la misión: "Los líderes comunican de manera que la gente a su alrededor entiendan lo que están tratando de hacer. Los guía su propósito, su misión. Saben establecer una misión y, además, saben decir no. La presión en los líderes para hacer 984 cosas diferentes es insoportable, así que los efectivos saben decir que no y mantenerlo..."
Abandono creativo: "Una pregunta crítica para los líderes es "¿Cuándo paras de asignar recursos a actividades que ya lograron su objetivo?" Las trampas más peligrosas para loa líderes son esos casi-éxitos donde todos dicen que si le das solo un último empujón será un gran éxito. Uno lo intenta una vez, dos veces, tres veces. Para entonces debería ser obvio que esto será difícil de lograr. Así que siempre aconsejo a mi amigo Rick Waren, "No me digas lo que estás haciendo, Rick. Dime lo que dejaste de hacer."
Cómo caen las organizaciones: "Asegurate que la gente con la que hablas entienda tus prioridades. Cuando las organizaciones caen es cuando deben empezar a preguntarse en qué está trabajando el jefe e invariablemente las respuestas son equivocadas. Así que el CEO debe decir "En esto es en lo que me estoy concentrando". Luego el CEO debe preguntar a sus asociados: "¿En qué se están concentrando ustedes?". Pregunte a sus asociados: "Pusiste esto primero en tu lista de prioridades, por qué?". La razón puede ser la correcta, pero también puede ser que te convenza de que sus razones son buenas cuando no lo son. Así que asegúrate de entender las prioridades de tus asociados y luego de tener esa conversación, te sientes y les escribas una breve nota: "Esto es lo que pienso que discutimos. Esto es lo que entendí que decidimos. Esto es a lo que creo que te comprometiste en este tiempo. Finalmente, pregúntales: "´¿Qué esperas de mi para que puedas cumplir con tus objetivos?"
El liderazgo es un desafío en el que se entrelazan equilibrios, responsabilidades y presión.
Existen diferentes tipos de líderes: unos son tímidos, otros pedantes, analíticos o impulsivos, severos o protectores con el equipo. Sin embargo, los mejores entre ellos, son aquellos que mantienen un interés apasionado por su grupo, su desarrollo y sus conquistas.
Son personas que se sienten bien consigo mismas: realistas, sinceras, íntegras, optimistas y humanas.
Haz lo que amasSteve Jobs dijo una vez a un grupo de empleados: “La gente con pasión puede cambiar el mundo para mejor”. Jobs ha seguido a su corazón toda su vida y la pasión ha marcado la diferencia. Es muy difícil tener ideas nuevas y creativas, si no eres un apasionado de los avances de una sociedad en movimiento.Hacerse un hueco en el universoEn 1976 la visión de Jobs era poner un ordenador en las manos de la gente común. Unos años después nacía Macintosh, que cambiaba la forma de interactuar con los ordenadores. Enciende tu cerebroPara Steve Jobs, “la creatividad es conectar las cosas” y conectar las cosas significa buscar inspiración en otras industrias. Por ejemplo, en varias ocasiones, Jobs ha encontrado la inspiración en la meditación zen, en una visita a la India, en un aparato eléctrico o en una cadena hotelera. En su opinión, esto no significa “robar” las ideas sino usar ideas de otras industrias para inspirar tu propia creatividad.Venta de sueños, no productosPara Steve Jobs, la gente que compra los productos de Apple no son consumidores, sino personas con esperanzas, sueños y ambiciones. Su firma fabrica productos para ayudar a las personas a alcanzar sus sueños. Di no a 1.000 cosasSteve Jobs afirmó una vez: "Estoy tan orgulloso de lo que no hacemos como de lo que hacemos”. Él se ha comprometido a crear productos con un diseño simple y ordenado y ese compromiso se extiende más allá de los productos, desde el diseño del iPod y iPad hasta el embalaje de los productos de Apple, la funcionalidad de su sitio web, etc. En el mundo de Apple, la innovación significa eliminar lo innecesario.Crear experiencias increíblemente grandesLa tienda de Apple se ha convertido en el mejor vendedor del mundo gracias a la introducción de innovaciones sencillas que cualquier empresa puede adoptar para crear conexiones más profundas y emocionales con sus clientes. Por ejemplo, no hay cajeros, sino expertos, consultores e incluso genios. ¿Por qué? Apple está en el negocio de enriquecer la vida. Maestro del mensajeSteve Jobs es el narrador corporativo más grande del mundo, ya que convierte el lanzamiento de un producto en una forma de arte. Uno puede tener la idea más innovadora del mundo, pero si no puede entusiasmar a la gente con ella, no importa.
Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo. El reconocer un sentimiento
mientras ocurre, es la clave de la inteligencia emocional. Una mayor certidumbre con respecto a
nuestras emociones es una buena guía para las elecciones vitales, la falta de esta habilidad nos deja a
merced de nuestras emociones. En el proceso de autoconocimiento o autoexploración, es importante
tener en cuenta:
• Que es la valoración y no el comportamiento del otro lo que causa nuestra reacción.
• Ser muy conscientes de que nuestra valoración es sólo nuestra.
• Aceptar que las valoraciones están sujetas a cambio.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior. Las personas que saben serenarse y
librarse de la ansiedad, irritación o melancolías excesivas, se recuperan con mayor rapidez de los
reveses de la vida, a diferencia de aquellas que poseen un menor control y que, por ende, caen
constantemente en estados de inseguridad. Cuando deseamos orientar nuestro esfuerzo en la solución
de un problema que se nos plantea, necesitamos tomar el mando de nuestros pensamientos y
emociones, por ello resulta relevante considerar:
• El problema real no es quién está involucrado. El problema real es cómo respondemos.
• El problema real no es que nos moleste el problema. El problema real es cómo me siento.
• El problema real no es cómo ha ocurrido. El problema real es cuándo lo tratamos de resolver.
• Manejar o controlar nuestras emociones no significa ahogarlas o reprimirlas.
3. Automotivación. Las personas que saben controlar la impulsividad y esperar para obtener su
recompensa, cumplen con sus objetivos y están conformes con sus logros. Dirigir las emociones para
conseguir un objetivo permite mantener los esfuerzos, actuar en forma más creativa y desarrollar, por
consiguiente, una mayor productividad y eficacia. El uso productivo de nuestra emoción puede
responder a la siguiente cadencia:
• Sintonía de pensamientos e interpretaciones.
• Uso de frases motivadoras y diálogos internos constructivos.
Sentido del humor.
• Relajación.
• Actividad física.
• Uso de técnicas de resolución de problemas.
• Apoyo en nuestro equipo de personas-soporte.
• Reapreciación de metas y establecimiento de otras nuevas.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan, es la habilidad fundamental para establecer relaciones sociales y vínculos personales. Dentro
de este marco de relaciones interpersonales, algunos indicadores que deben considerarse son:
• Autoapertura: es no hablar desde lo absoluto, sino desde la interpretación que nosotros damos a
nuestros datos, siendo sensibles a los sentimientos del otro y cuidando mucho el lenguaje corporal.
• Asertividad: en Gestión de la Inteligencia Emocional, a la asertividad le damos una acepción especial,
basada en la habilidad de mantener nuestros derechos, opiniones, creencias y deseos, respetando al
mismo tiempo las del otro, lo que contrasta con la agresividad, que no las tiene en cuenta, o la
pasividad, que ignora las propias.
• Escucha activa: en la escucha activa hemos de poner énfasis en desactivar nuestros filtros de
recepción, sintetizar las declaraciones del otro, usar frases de dinamización, dar noticia de que somos
conscientes de los sentimientos del otro y usar apropiadamente las pistas no verbales de quien se nos
da.
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás: determinar la capacidad de liderazgo, de popularidad, de
eficiencia en las relaciones interpersonales. Para ello resulta útil considerar lo siguiente:
• Separar las personas de los temas.
• Enfocar en intereses y no en posiciones.
• Establecer metas precisas de la negociación.
• Trabajar juntos para crear opciones que favorezcan a ambas partes.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.
1. Conocer las propias emociones. La conciencia de uno mismo.
2. Manejar las emociones. Se basa en la capacidad anterior.
3. Automotivación.
4. Empatía. La capacidad para reconocer las emociones de los demás, saber qué quieren y qué
necesitan,
5. Manejar las relaciones. Esto significa saber actuar de acuerdo con las emociones de los demás y de
producir sentimientos en los demás.
1. El conocimiento de las propias emociones. El conocimiento de uno mismo, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Como veremos en el capítulo 4, la capacidad de seguir momento a momento nuestros sentimientos resulta crucial para la introvisión psicológica y para la comprensión de uno mismo. Por otro lado, la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que tienen una mayor certeza de sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. En el capítulo 5 examinaremos la capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de desembarazarse de la ansiedad, de la tristeza, de la irritabilidad exageradas y de las consecuencias que acarrea su ausencia. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que batallar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en el ejercicio de esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los reveses y contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. Como veremos en el capítulo 6, el control de la vida emocional y su subordinación a un objetivo resulta esencial para espolear y mantener la atencion, la motivación y la creatividad. El autocontrol emocional —la capacidad de demorar la gratificación y sofocar la impulsividad— constituye un imponderable que subyace a todo logro. Y si somos capaces de sumergimos en el estado de «flujo» estaremos más capacitados para lograr resultados sobresalientes en cualquier área de la vida. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todas las empresas que acometen.
4 .El reconocimiento de las emociones ajenas. La empatía, otra capacidad que se asienta en la conciencia emocional de uno mismo, constituye la «habilidad popular» fundamental. En el capítulo 7 examinaremos las raíces de la empatía, el coste social de la falta de armonía emocional y las razones por las cuales la empatía puede prender la llama del altruismo. Las personas empáticas suelen sintonizar con las señales sociales sutiles que indican qué necesitan o qué quieren los demás y esta capacidad las hace más aptas para el desempeño de vocaciones tales como las profesiones sanitarias, la docencia, las ventas y la dirección de empresas.
5. El control de las relaciones. El arte de las relaciones se basa, en buena medida, en la habilidad para relacionarnos adecuadamente con las emociones ajenas. En el capitulo 8 revisaremos la competencia o la incompetencia social y las habilidades concretas involucradas en esta facultad. Éstas son las habilidades que subyacen a la popularidad, el liderazgo y la eficacia interpersonal. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser auténticas «estrellas» que tienen éxito en todas las actividades vinculadas a la relación interpersonal.